𝗧𝗢𝗥𝗥𝗘 𝗗𝗘 𝗗𝗜𝗢𝗦, baam25th [tog]

Capítulo 35 | 𝐋𝐀𝐒 𝐂𝐀́𝐌𝐀𝐑𝐀𝐒

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Anaak examinó el pasillo con las tres personas en él, estaban Ran, Nobic y Asteria, esta última fue reconocida por la princesa ilegítima de Zahard.

— Tú... ¿Traicionaste a Venus...? —alzó una ceja en contra de la albina, que tenía su katana recargada en su hombro.

— No te metas en problemas, Asteria. Aunque tenga la mitad del poder de una princesa de Zahard, sigue siendo muy fuerte. —le avisó Nobic a la fémina que seguía sin mover un músculo.

Lo ignoró, — En realidad, no es como si yo quisiera hacer equipo con FUG, pero puedes considerarlo a tu gusto. —habló con simpleza, esto sorprendió al de ojos escarlata.

— Eso suena muy estúpido. —Anaak sonrió de lado, y se lanzó con su espada escurridiza para luchar con la Arie.

La de cabellos laceos detuvo el ataque de Anaak de un simple roce con su katana, y justo en el preciso momento en el que habían chocado armas, se vieron mutuamente, una con una sonrisa ladina, y la otra con las facciones relajadas.

“Las dos son unos monstruos a su manera...” suspiró el alto.

— Es imposible que no haya sido expulsada hacia atrás con la fuerza de esa lagartija. —murmuró Ran, observando la pelea de ambas regulares. Era asombrosa.

— ¿Mm? —Nobic no dejaba de aprender más sobre la Arie.

Le daba incontables vueltas a su lanza en el aire, ya había recuperado cuatro balas, le hacían falta otra dos y tendría su cámara llena. Vlatchka contaba con una menos que Venus.

— ¿Sabes lo complicado que es saltar con una capa? —la Khun se traslado con una onda de shinsu en el exterior.

— Lo sé, pero este juego salió de imprevisto y no tuviste tiempo de pintarte el cabello... —Venus tomó su arma para ponerla entre sus piernas y volar en ella—. Vayamos por allá.

Muchos de los regulares que corrían en el campo abierto y oscuro del lugar, miraron al cielo, ahí iban la princesa y la desconocida cubierta con una capa.