❝𝒅𝒓𝒐𝒑𝒐𝒖𝒕❞ ⁽ʸᵉᵒⁿᵍʸᵘ⁾

[ 𝟎𝟏 ; 𝟓𝟕 ; 𝟑/𝟑 ]

HOLA, ESTOY ESCRIBIENDO EN MAYÚSCULAS PARA QUE NO DEJEN PASAR ESTE AVISO.

A PARTIR DE ESTE CAPÍTULO EN ADELANTE, EL FANFIC NO ESTÁ EDITADO, QÚE QUIERO DECIR CON ESTO, ME REFIERO A QUE LA NARRACIÓN, REDACCIÓN E HISTORIA ESTÁ COMO LA PRIMERA VEZ QUE LO ESCRIBÍ, POR LO QUE ES MUUUUUUUUY PROBABLE QUE SE ENCUENTREN CON ERRORES, ESCRITURA DE BAJO NIVEL Y PEORES HORRORES QUE LOS DEL MISMO INFIERNO, ASÍ QUE, SEAN PACIENTES, QUE POCO A POCO IRÉ EDITANDO LOS CAPÍTULOS Y ESTE AVISO SE IRÁ MOVIENDO A LA PAR DE LOS QUE YA ESTÁN LISTOS UWU.

LOS VUELVO A PUBLICAR, PORQUE HAY GENTE DESESPERADA QUE PARECE QUE LES ROBÉ LA VIDA AL MANDAR A BORRADORES EL RESTO DE LA HISTORIA KJASHDKJAHSDKJAHSDJKAHSDKJHASD, IGUAL, CREO QUE A PARTIR DEL CAPÍTULO 70, EL FANFIC YA TIENE MI MANERA ACTUAL DE ESCRIBIR/NARRAR, POR LO TANTO... NO SÉ, SÓLO LEANLO CON LO QUE LES DIJE EN MENTE, PUEDEN HABER ERRORES Y MUCHOOOO CRINGE JDKASJDHAKDJ.

ADIÓS.

***CUANDO UN CAPÍTULO YA ESTÉ EDITADO, ESTE AVISO PEDORRO NO APARECERÁ AL PRINCIPIO***

[...]

Luego de despedirse del pelimorado, se sumieron en una caminata muda y permanecieron así hasta que llegaron a la residencia vacía —pues los adultos seguían en el trabajo—, dejando sus llaves en la mesita de un costado.

Choi Beomgyu le daba cortas miradas de soslayo al más alto, sintiéndose cansado de darle tantas vueltas a la problemática forma de ser que tenía este. Ya que, su hyung era así, un día lo ignoraba, al otro lo trataba bonito, al siguiente era frío, continuando con una actitud normal y pasando por una carencia de constancia en su humor cuando se trataba de ellos, convirtiéndose en un revoltijo de emociones que lo ponían nervioso e inseguro de qué debía esperar cada mañana.

—Tenemos que hablar —dijo repentinamente, asustando al azabache, quien aún así mantuvo la esperanza de que le explicaría qué había mal.

Se dejaron caer en el sofá de la sala de estar, mas sus semblante permanecieron fijos en diferentes puntos de la casa, evitando mirarse directamente.

—Dale una oportunidad a Soobin —soltó como quien no dice nada.

—¿Qué? —rompió su intento de distancia y lo observó con confusión.

—No eres ciego, sabes que él está loco por ti —le vio de reojo.

—¿Y qué? —espetó, molesto por la absurda razón —A mí no me gusta él —negó rotundamente.

—¿Cómo lo sabes? —se giró ante el pelinegro —Es difícil fijarse en otra persona cuando ya estás atado a una —se encogió de hombros, intentando convencerlo fatalmente.

—No quiero fijarme en él —siguió en negativa —. Me gustas tú, aunque seas algo extraño-

Una estruendosa carcajada interrumpió el diálogo del adolescente, haciendo que mirara a su hermano, expectante de una respuesta.

—No me describiría con esa palabra, pero si me ves de esa manera, supongo que está bien... —esbozó una mueca divertida, manteniendo su calmada postura.

—No voy a darle nada a Soobin hyung —repitió con una determinación inamovible.

Se removió dispuesto a levantarse del sillón, sin embargo, tan pronto como se puso de pie, en cuestión de segundos fue sentado de vuelta por el rubio, quien lo atrajo hacia abajo.

—Entiendo que nadie puede obligarte a eso —asintió comprensivo —, pero tú y yo no podemos seguir haciendo lo que hacemos —sentenció con un desinterés poco visible, aún así existente.