—¿Sigues molesta? —preguntó apenas llegó a su lado.
Llevaba un par de días ignorándola, así que Lisa había decidido darle su espacio, ya hablaría con ella cuando las aguas se calmaran.
—Sí —aceleró su paso.
Deseaba llegar a casa y no ver su rostro.
—Jennie —la llamó, haciendo un puchero que fue ignorado.
De pronto, una idea surgió en la cabeza de Lisa. Alcanzó a la castaña y se tiró al piso, aferrándose a una de sus piernas.
La escena no podría ser más vergonzosa.
—Suéltame —pidió con el rostro totalmente sonrojado.
—No hasta que aceptes hablar conmigo—.
Algunos las observaban divertidos, otros simplemente pasaban de largo, pues ya no era un secreto que ambas chicas estaban saliendo y su relación tenía cierto toque de anormalidad.
No le quedó de otra mas que ceder a su petición.
Con un gritito de victoria, Lisa la soltó y se levantó rápidamente, tomando su mano y sacándola de ahí.
Recorrieron el mismo camino montadas en la misma bicicleta, hasta llegar al lugar de siempre.
—¿Y bien? —preguntó una vez que bajaron.
Jennie trataba de mantenerse seria, cruzando sus brazos a la altura de su pecho y elevando la ceja derecha, esperando por las palabras de la pelinegra.
—Soy una completa idiota —admitió Lisa con una sonrisa y las manos sujetas detrás de su espalda, inclinándose un poco hacia la castaña.
—Estoy de acuerdo—.
—Lamento incomodarte con mis acciones. Verte cerca de Moonbyul me hace sentir insegura y es como si mi cuerpo reaccionara automáticamente —admitió— aunque lo hago de la peor manera—.
Jennie relajó su cuerpo. Verla tan vulnerable sólo le provocaba ganas de abrazarla y cuidarla.
—No tienes por qué sentirte así. Ella sólo es mi amiga, tú... —se detuvo.
"Tú eres mi novia", quiso decir. Pero las palabras se atoraron en su garganta.
¿Lisa alguna vez se lo pediría o era ella quién debería dar el paso? ¿Su compañera era consciente de que lo que tenían era algo más o sólo se resumían a amigas que compartían besos y una cama para dormir?
—¿Yo...?—.
—Sólo olvídalo. Pero grábate esto: no me gusta que me reclames como si fuera de tu propiedad— golpeó suavemente su pecho con el índice.
—¿Y acaso no lo es, señorita Kim? —cambió su expresión a una traviesa.
Jennie alejó todos sus pensamientos y se dejó llevar por el característico humor de Lisa.
—Eres tan molesta —colocó con delicadeza su mano sobre su mejilla— pero no puedo hacer nada contra ello. Me gustas demasiado. Y te quiero más de lo que me gustaría admitir—.
Los ojos de Lisa brillaron al escuchar aquello.
—Jen, ¿puedo quedarme contigo por el resto de mis días? —preguntó.
¿A qué se refería con eso? ¿Era una declaración? ¿Una promesa?
No lo sabía. De lo único que estaba segura era que aceptaría cualquier cosa que viniese de la chica de sonrisa radiante.
Su respuesta fue un beso cargado de cariño, seguido de otro, y otro.
Lisa la tomó por la cintura, haciendo que ambas cayeran sobre el césped, sin separarse.
Una sonrisa apareció mientras se besaban.
Podrían acostumbrarse a eso.
Sólo ellas dos lejos del bullicio.
Viviendo en su propia burbuja de felicidad.
Y Lisa no arruinaría eso dándole falsas esperanzas a Jennie al pedirle formalizar su relación.
Si esa era la única manera de evitarle un sufrimiento mayor, lo aceptaría.

ESTÁS LEYENDO
One, Two, I Love You.
Short Story"Cierra los ojos y cuenta hasta tres." Ranking: 🥇 Jenlisa 03/08/22 🥇 Jennie Kim 03/08/22 🥇 Lalisa Manoban 03/08/22 🥉 Lisa 13/08/22 🥇 Jennie 25/09/22 🥇 Blackpink 31/01/23