Luego de su divorcio, Joseph Morgan no pensó volver a enamorarse debido a su corazón lastimado.
Blair Flores ha sufrido mucho por amor, se ha vuelto a enamorar, pero no ha tenido ese poderoso sentimiento que tuvo en el pasado y no pensó volver a sen...
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Maratón 3/10
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Blair
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"A esa, yo le doy mi lugar. Que recoja tu mesa, que lave tu ropa y todas tus miserias. Que venga, que se juegue por ti, pero, a ver si es capaz de darte las cosas que yo te di." Es curioso como mi abuela escuchaba esa canción lavando la ropa y ahora yo la entiendo y la sufro a pesar de que no fui una amante, solo una estúpida.
El mini bar tiene alcohol que podría apostar fue rendido con agua, porque esa mierda no me está haciendo nada. El desinterés por pagar la cuenta exagerada lo tuve desde que abrí la primera botella, así que no puedo decir que es efecto del vodka que estoy bebiendo.
Huele horrible, pero es como beber agua de río.
Tocan a la puerta y sé de antemano quien es, porque es a la única persona a la cual me atreví a decirle mi humillación por el simple hecho de que no tiene sangre de Joseph corriendo por sus venas, no es su amigo o algo más.
Me levanto del suelo y el alcohol hace que me maree, pero no lo suficiente para evitar ir y abrirle a Gian, que tiene una bolsa en una mano y el asa de su maleta en la otra. Me ve y de inmediato comprende todo.
—Le iba a decir que lo amo. —Repito lo que le dije por teléfono, arrastrando las palabras y creo que todo el alcohol que bebí efectivamente está haciendo algo ahora. —Y él me salió con que vuelve con su ex esposa que ahora será su esposa.
—Sí, sí, todo te pasa a ti. —Hay varias razones de que llamara a Gian, una de ellas es que venía en camino para grabar una canción, otra es que será malo conmigo y me hará pensar en otra cosa. —El tipo podrá ser muy lindo y todo, pero no te merece.
—Eso se les dice a las amantes. —Yo no soy su amante, nunca engañó a Persia conmigo y eso no pasará porque él es muy caballero para atreverse a proponerme eso ¿Verdad? —Lo perdí... —Mi cabeza se estrella contra el pecho de Gian y él me empuja dentro de la habitación. Sigo llorando contra él, nunca dejé de hacerlo. —Ni siquiera era mío y lo perdí.
—¿Quieres hablar de eso?
—No, solo quiero olvidarlo. —Quiero sacarme a Joseph del corazón y así tal vez mañana en la boda cuando él como padrino y yo como dama de honor tengamos que caminar juntos hacia el altar, pueda haberlo sin hacerme ilusiones, porque eso me metió en este lío en primer lugar. —Estoy muy triste y mañana tengo que parecer feliz.
—¿Quieres dejar de estar triste?
—Pues obvio, tarado. —Pensé que ser mala con Gian ayudaría, la verdad es que no lo hace, pero que me abrace se siente bien porque es mi amigo.
