Dueño de ti

Capítulo 71

Agapios.

Maldigo mientras miro a Acacia a través de la ventana de mi oficina, está en el jardín, solo camina de un lado a otro.

-¿qué más dijo?- le pregunto a Ava quien está también aquí.

-nada más- responde- Agapios, no puedes dejarla sola, cree que Cibran es su aliado sin recordar todo lo que ese hijo de puta ha hecho.

Mis puños se aprietan por inercia.

-el doctor dijo que era posible que su mente bloqueara los recuerdos traumantes o dolorosos- continúo mientras giro a mirar a Ava, Neo, mi madre, Nicholas y Naia- y es la única explicación que encuentro razonable al hecho de que no recuerde que sus padres están muertos y al hecho de que no recuerde que Cibran es su mayor verdugo.

-¿sabes si recuerda algo del burdel?- pregunta mi madre hacia la castaña.

-no dijo nada al respecto- responde Ava- solo mencionó que debíamos buscar a Cibran, que él nos ayudaría a salir de aquí.

-creo que su mente ha bloqueado la muerte de sus padres al ser la experiencia más dolorosa y creo también que ha bloqueado lo que pasó en el burdel por ser la experiencia más traumática- Naia habla- seguramente su mente le recuerda a Cibran pero bloquea todo lo que él le causó.

Giro a mirar de nuevo a la castaña en el jardín.

-¿estamos seguros de que no está fingiendo?- pregunta Neo ahora.

-no lo está- respondo de inmediato- creía lo mismo, no está fingiendo, es real, no me recuerda.

Un pequeño pinchazo se cuela en mi pecho al recordar su reacción en el hospital. Su manera en querer huir de mí, sus ojos mirando todo con confusión, el miedo en su mirada, la confusión, todo en uno solo.

-¿cuánto durará esto?- pregunta Nicholas.

-no lo sé- respondo- el doctor dijo que era incierto, pueden ser días, meses o incluso...

No quiero decir que esto durará años, porque, confío en que no será así, no puede ser así. Solo es temporal.

-asegúrate de que todos se mantengan en guardia todo el jodido día- hablo hacia Neo- no quiero a ningún incompetente aquí, todos deben estar al tanto de quien sale y de quien entra- asiente- Acacia no sale de aquí sola, conocen a esa mujer, no por nada es mi esposa, es astuta así que procuren no dejarse manipular por ella. Si no estoy en casa ustedes son los encargados de que ella se mantenga a salvo, ¿me escuchaste?

Pregunto y asiente.

No digo más, salgo al jardín y solo me quedo junto a la puerta trasera mientras la miro. Camina de un lado a otro al mismo tiempo que mira todo aquí, es hasta que pasados unos segundos su mirada coincide con la mía.

Sus pasos se detienen y solo me mira, no alejo mi mirada de ella, sus ojos grises muestran confusión en todo esto.

-no entiendo porque toda esta seguridad- se acerca- ¿soy una prisionera a la que tienes que mantener vigilada?

Esta Acacia va a sacarme de quicio.

-somos personas importantes- respondo- es por eso que debemos tener seguridad.

Ella mira a nuestro alrededor de nuevo.

-dijiste que responderías mis preguntas- habla cruzándose de brazos.

-aquí me tienes- respondo.

Se mantiene en silencio antes de continuar.

-¿Cuál es mi color favorito?- pregunta, mi ceño se frunce ante su pregunta.