Capítulo 14

74.1K 5.4K 2.5K
                                    

Agapios.

-¿qué es lo que se te ofrece, Ileana?- pregunto una vez que tomo asiento en la silla giratoria de mi oficina.

Sus ojos azules me miran mientras una enorme sonrisa hay en su rostro.

-haremos una cena benéfica- responde- estoy intentando incluir a los mejores inversionistas, jefes, empresarios y gente importante de Grecia- continúa- tú estás en la lista, ocupando el primer lugar, por supuesto.

Sólo continúo escuchando.

-sé que tu madre adora este tipo de eventos- ella continúa- y me he encargado personalmente de dejarle una invitación, al igual que vengo esta tarde aquí para invitarte- saca de su bolso un sobre dorado que me tiende, lo acepto después de unos segundos- de igual manera sería un placer que formes parte de los socios que aporten a esta buena causa.

Leo la invitación, la cena sería mañana por la noche en uno de los salones más demandados de Atenas.

-¿qué dices?- pregunta- ¿aceptarías esto?

Siempre me había involucrado en este tipo de eventos, de hecho, mi madre suele hacerlos también

No tenía nada en contra de Ileana, mis problemas habían sido hacia Lux y soy lo suficientemente maduro para saber y entender que nuestras familias no deben de estar mezcladas en lo que sea que haya pasado anteriormente con nosotros.

-está bien- respondo finalmente- donaré una Cadillac y un lamborghini para la subasta.

Una sonrisa se pinta en la mujer rubia.

-sabía que podía contar contigo- responde mientras se pone de pie- será un verdadero placer verte mañana ahí.

No digo más, después de algunas palabras finalmente termina yéndose de aquí.

Sirvo whisky en un vaso y comienzo a beberlo mientras miro algunos reportes de mis hombres, el hijo de puta de Cibran no daba señales alguna, me había encargado de investigar todo acerca de él, había obtenido información pero no me servía en estos momentos puesto que lo único que se mencionaba era sobre sus burdeles.

Durante todo este tiempo, he estado detrás de él, intentando seguirle el rastro, intentando que salga de la alcantarilla en la que se esconde, he estado ideando planes junto a mis hombres, investigando rutas, ideando nuevos planes de ataque, mi tiempo estaba siendo consumido por ese maldito bastardo, tanto así que apenas podía estar en casa.

Quería atraparlo cuanto antes, quería que pagará por todo lo que ha hecho, por el daño que ha causado, quería torturarlo para después terminar con su vida, solo quería hacerlo pagar.

Salgo después de algunas horas de estar encerrado en mi oficina, camino hasta la cocina esperando ver a Acacia aquí, pero, ella no está, generalmente siempre está horneando, camino hasta el jardín, aquí sólo está Zeus, subo a las habitaciones, a la biblioteca, al gimnasio, a cada maldito rincón en esta mansión pero ella no está.

-¿dónde está Acacia?- pregunto a uno de mis hombres quien de inmediato toma su postura.

-salió hace algunas horas, señor- responde este- se fue junto a Neo y algunos otros hombres.

Maldigo.

¿cómo mierdas se va?¿a dónde?¿Por qué mierdas no avisa? Odiaba que las cosas se salieran de control, me gustaba mantener todo en orden, estar enterado sobre todo lo que pasa o no, el idiota de Cibran está afuera, libre y ella sólo se va como si su vida no estuviese en peligro.

Camino al interior de la mansión, solo voy hasta mi habitación en donde me deshago de mi ropa para colocarme un conjunto deportivo y bajar hasta el gimnasio en donde comienzo a ejercitarme intentando no pensar en que está mujer me está haciendo salir de mis estribos.

Dueño de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora