Capítulo 84

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Acacia. 

Dos años después.

Mi cabello se mueve gracias al aire que golpea, solo acomodo algunos mechones detrás de mis orejas. 

-¡tía!- volteo hasta donde proviene la pequeña voz de Lilith, mi sobrina, la hija de Atenea. 

-hola pequeña diabla- me agacho y deja un beso en mi mejilla que me hace sonreír- vinimos a ver al tío Agapios. 

Sonrío mientras acepto su pequeña mano mientras miro a mi hermana que se acerca también. 

-llegamos- suelta y sonrío mientras la abrazo. 

-Neo ha reservado nuestro asientos- informo mientras comenzamos a caminar entre las personas aquí, acomodo mis lentes negros y solo llegamos hasta donde Neo hizo la reservación de nuestros asientos. 

-¿el tío Agapios va a ganar?- Lilith pregunta mientras Atenea peina el cabello de su hija en una coleta. 

-probablemente, cariño- respondo mientras tomo asiento a su lado. 

Miro la autopista aquí, Agapios correría en una carrera de autos. 

Algunos hombres comienzan a hablar, sus voces se escuchan y resuenan en todo el lugar, me acerco hasta las gradas aquí y solo miro, mi vista enfoca al pelinegro que comienza a prepararse mientras sube a un auto, aquel uniforme que porta lo hace ver tan jodidamente sexy que hace que una sonrisa se pinte en mis labios. 

Su vista coincide con la mía, sonríe y hace una seña de que me quite los lentes negros que cubren mis ojos, obedezco subiendo estos a mi cabeza y solo sonrío hacia su dirección también, nuestro coqueteo se termina en el momento que lo hacen salir para ubicarse en la línea de salida. 

Me acerco a mi hermana y sobrina de nuevo. 

Miro a Lilith quien juega con una navaja suiza mientras mi hermana habla con Carter. 

-Lilith- llamo su atención y solo esconde el artefacto en sus manos de inmediato detrás de su espalda para mirarme con aquellos ojos negros que posee. 

-yo no hice nada- suelta, una pequeña sonrisa se pinta en mis labios mientras extiendo mi mano para que me dé lo que ha escondido, suelta un pequeño suspiro y me da la navaja. 

-sabes que esto no es para niños, ¿cierto?- pregunto. 

-yo la encontré- responde. 

-puedes lastimarte con esto- la guardo en mi chaqueta. 

-no- suelta- sé usarla- se excusa- es para matar conejos. 

Mis ojos se abren para mirarla. 

-¿qué?- pregunto, una sonrisa se pinta en sus labios. 

Sí, afirmativo, es hija de Death y Atenea. 

-cuando mi padre venga por mí le diré que me enseñe a matar conejos. 

Giro por completo hasta ella. 

-Lilith, los conejos no merecen morir. 

Levanta sus hombros mientras comienza a comer palomitas. 

-bunny- murmura sin más, estoy a punto de hablar de nuevo pero la carrera comienza haciendo que mis ojos vayan hasta los autos que comienzan a correr. 

Era una carrera amistosa, por lo cual solo habría una vuelta, quien gane en esta gana la carrera. 

Me acerco de nuevo a la baranda, me apoyo sobre esta mientras miro todo con detenimiento. Salto y aplaudo cuando Agapios gana. 

Dueño de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora