Kim Taehyung estudiante de arquitectura, sus habilidades especiales lo convirtieron en un luchador desde pequeño, su vida da un vuelco de 180° cuando conoce de una manera peculiar e inimaginable al prestigioso empresario Min Yoongi.
¿Qué sucederá...
- Buenos días bebito - escucho a lo lejos una dulce voz.
Poco a poco estiro mi cuerpo abriendo los ojos despacio hasta que veo la radiante sonrisa que desde hace un año y ocho meses la observo cada día.
- Buenos días hobi hyung - me acerco a besar su mejilla haciendo que sus perfectos dientes se vean más brillantes.
- Vamos, es hora de desayunar - asiento volviendo a estirarme.
Sale de la habitación y observo el techo de esta, hace tiempo mi vida cambió demasiado.
Extraño a Yoonie lo extraño mucho.
Elimino mis pensamientos dañinos levantándome de la cama secando mis ojos cuando intentan dejar caer lágrimas por el dolor que siento aún al perder a quien amo.
Bajo las escaleras de la mansión saludando a los empleados que me sonrien encantados, camino a la cocina viendolo sentado leyendo el periódico, pido yo mismo hacer el desayuno y me conceden el puesto, me dedico hacer Hot cakes recordándome ciertos momentos.
Jung Hoseok toda mi vida cambió gracias a él, desde ese maldito día que todo se volvió una mierda estuvo conmigo.
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Es un hombre solitario que por un terrible accidente quedó sin padres y heredero de toda su fortuna junto a su hermano mayor, su hermano lo odia creyendo que fue el culpable pero yo siempre le digo que no lo es y jamás lo será, es demasiado bueno para este horrible mundo.
Recuerdo cada instante, cuando me desmayé en el avión, un médico que viajaba ahí me dió los primeros auxilios hasta que les dije que era porque estaba embarazado, hobi se dedicó a cuidarme hasta que bajamos en el aeropuerto de París donde haríamos escala, sabia que me seguían así que no me quedó de otra que pedirle ayuda.
Creí que se iba a negar pero al contrario me ayudó mucho, salimos del aeropuerto hacia un lugar donde él debía ir, me ayudó a cambiarme de ropa y de look para no llamar la atención con mi antiguo cabello rubio, estuvimos bien ahí por una semana hasta que me di cuenta que me seguían nuevamente.
Por eso hubo que cambiar de ruta, me ofreció protección en su país, por mi pésimo estado de salud no podía viajar muy fácil sin un médico a mi lado, el contrató uno para que viaje con nosotros solo hasta su casa en su avión privado, fue un momento difícil el seguir llorando en cada rincón y cada 5 minutos por extrañar los brazos delgados y pálidos de mi precioso hombre.
Llegamos a su país, Australia, ahí me di cuenta que es un arquitecto multimillonario, se ofreció llevarme a su casa para seguir con mis cuidados luego de mi amenaza de aborto en esos días de París, estoy más que agradecido con él por toda su hospitalidad, por cada uno de sus cuidados durante todo este tiempo.
