Mi Pobre Diablo (Yoontae)

Extra: Ogritos

Después de tantos años jamás me canso de ver su hermoso rostro mientras duerme, incluso se me hizo costumbre despertar antes solo para apreciar su hermosa piel brillando.

— Tontin — susurro subiendome en su espalda.

Se queja intentando estirarse pero es imposible por mi posición a lo largo de todo su cuerpo, beso su mejilla con dulzura haciéndolo sonreír de medio lado entre sueños, me acuesto en su hombro dándole varios besos por donde alcanzo.

— Buenos días mi niño bonito — menciona con voz ronca.

Grito espantado cuando de la nada soy girado del otro lado de la cama con su cuerpo encima del mío, una gran sonrisa se asoma en mis labios viendo su cabello ahora rubio alborotado, abro las piernas dejándolo ingresar.

— Buenos días mi hermoso tontin — menciono y sonríe dejando ver sus dientecitos junto a su encía.

Cruzo los brazos detrás de su cuello acercandolo a besarnos, sonriendo unimos nuestras bocas con calma, toco su labio inferior pidiendo permiso y me lo concede, me entretengo en su boca jugando con nuestras lenguas por un largo rato.

— ¿Tenemos tiempo? — murmura separándose.

Asiento viendo como cambia de dirección hacia mi cuello donde deja un beso, sigue bajando hacia mis clavículas dando una fuerte mordida que me hace calentar.

Ocupándose en mi cuello le acaricio el cabello, levanta mis piernas hasta dejarlas en forma de M mientras apreta mis muslos para subirlas en su espalda y pegar nuestros cuerpos.

Hasta que una música estruendosa de kpop junto a un inentendible canto se escucha por todo lo alto y cada rincón que hace temblar las paredes de la casa.

— ¡APAGA ESO QUE TENGO SUEÑO! — se escucha alguien gritar a pasos apresurados por el pasillo.

— ¡NO ME MOLESTES! PONTE ALGODÓN EN LOS OÍDOS Y DUÉRMETE — responden desde más lejos.

Me carcajeo escondiéndome en el cuello de mi esposo así como él se esconde en el mio dejando varios besos entre risas.

— ¡CALLENSE LOS DOS! — otro grito con voz dulce se escucha.

Nos separamos con prisa escuchando en medio de tanta música varios pasos apresurados junto a un ladrido hasta que la puerta de una habitación es cerrada con fuerza.

— NO TIREN LAS PUERTAS — grito en el oído de yoongi haciéndolo saltar del susto.

— Y así es cuando me quitan las ganas de forma instantánea.

Me río con fuerza mientras se quita de mi cuerpo para darse la vuelta, me acerco abrazandolo desde atrás dándole un beso en su desnuda espalda, me levanto para darme un relajante baño.

Con malicia empiezo a desnudarme sabiendo que sus ojos están pegados en mi cuerpo, una vez desnudo camino hacia la puerta poniendo pestillo en esta para detener a los invasores.

Sigo hacia el baño llenando el jacuzzi con una espuma que me encanta, tiene olor a mandarinas, unas frías manos se posan en mi cintura rodeandome desde atrás junto a unos labios que me hacen enchinar cada rincón de mi cuerpo.

— Es importante darnos los buenos días — susurra con voz aún ronca.

Ingresa al jacuzzi con una sexy sonrisa encantadora que siempre he amado, ahí me doy cuenta que está desnudo, cuando está sentado tiende su mano mirándome con unos ojos de amor que siempre a tenido y más durante cada uno de los años que tenemos juntos.

Con una tímida sonrisa sostengo su mano e ingreso hasta que estoy sentado encima de su cuerpo sintiendo bajo mi trasero su despierto miembro.

— Estos si son buenos dias.