CAPÍTULO FINAL

620 67 154
                                    

- Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te desea Louis, cumpleaños feliz.- le susurró al oído a Harry, mientras le acariciaba la mejilla con su nariz y envolvía sus piernas entre las de él.

Louis vio como el menor esbozaba una tierna sonrisa, contagiándosela a él.

Harry abrió los ojos y se encontró con unos suaves labios trazando besos por todo su rostro, tan delicadamente que parecía irreal.

El menor bajó lentamente sus manos por toda su espalda, hasta llegar al trasero de Louis, apretándolo suavemente.

El ojiazul dejó su tarea en el rostro de Harry y clavó la mirada en sus ojos.

- Con que yo te doy tiernos besos y lo que tú haces es centrarte en mi trasero. Styles, son las ocho de la mañana.-

- Y es mi cumpleaños. Así que deja que disfrute de cada pequeña parte de tu cuerpo como se merece.-

- ¿Me lo merezco yo o te lo mereces tú?-

- Ambos nos lo merecemos.-

Dicho esto, tomó con fuerza la cintura de Louis y le dio la vuelta, hasta que éste sintió el colchón chocar contra su espalda.

El mayor reaccionó rápido y pasó sus brazos por los hombros de Harry, al igual que sus piernas en su cintura.

El menor no pudo contenerse más y le besó apasionadamente, a lo que Louis respondió abriendo aún más la boca, dejando que Harry la recorriese con su lengua.

Y es que cada movimiento estaba lleno de lujuria, pero también de dulzura. 

El rizado empezó a recorrer el abdomen de Louis con la yema de los dedos, haciendo que se le erizase la piel. 

Cada pequeño movimiento estaba medido, como si de una coreografía se tratase, creando miles de sensaciones en su interior. 

Harry logró sacarle la camiseta al mayor, dejando al descubierto su torso, el cual cada día estaba más torneado. Recorrió las pequeñas marcas de músculos con la boca, dejando castos besos sobre éstas. 

Louis sintió enloquecer y empezó a acariciar el pelo de Harry entre sus dedos, intentando no tirar de él. 

El ojiverde volvió a subir hasta el rostro de Louis, parando a la altura de sus ojos, perdiéndose en ellos.

- Todavía no asimilo que esto sea verdad. Que lo nuestro sea de verdad.- susurró Harry, juntando sus frentes.

Louis sonrió y empezó a mover la cabeza de un lado a otro, rozando las narices de ambos.

- Pues lo es. De hecho, es la primera vez que siento que algo es de verdad. Que mis sentimientos son correspondidos, que pertenezco a algún sitio, que no estoy solo.- 

- Nunca pensé que podría encontrar la felicidad en alguien como tú. Mi futuro no albergaba un corazón, tan solo mi persona y algún que otro gato. Pero aquí estás, brindándole significado a mi vida y dándome un motivo para volver a levantarme.- 

Sus labios volvieron a unirse, dejando el sabor del otro sobre éstos. 

- Se nos va a hacer tarde.- dijo Louis, separándose del menor, quién respondió con un puchero.- No me pongas esa cara que sabes que no me puedo resistir.- 

Harry frunció el ceño, pero sonrió al notar un beso sobre su frente. 

Para disgusto de ambos, tuvieron que levantarse de la cama y empezar a vestirse. 

Aunque pasaban todo el día juntos, excepto las horas que dedicaban a las sesiones, siempre se les hacía insuficiente.

Porque sentían que debían recuperar el tiempo perdido, ya que vagaron tanto tiempo sin conocer realmente lo que era el amor. 

Clínica Cowell [ls]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora