Mi vida en Hogwarts 3er año

Celos

- ¿Te dormiste con la ropa puesta? ¿Tan cansada estabas para no ponerte el pijama?

- Debo decirles algo, antes de que todas nos vayamos. - Todas me prestaron atención. - Anoche paso algo. - Todas se vinieron cerca mío. - Anoche, cuando volvía con Luke...

- ¿Qué hiciste? - Dijo Emily. No sabía si decirlo o no. - ¿Te besaste con Luke? - Ella recordaba lo que dijo la profesora Trelawney. - La profesora tenía razón... - Se sentó de golpe en la cama, pensativa.

- ¿Qué? - Estaban confundidas.

- Luke y yo nos besamos.

- ¡¿QUÉ?! - Gritaron todas. Fue tan fuerte que algunas chicas golpearon la puerta para saber si todo estaba bien.

- ¿Te besaste con el hijo no reconocido de Snape? - Megan estaba enojada.

- Fue solo un beso.

- No fue solo un beso. Fue el primero. - Se notaban decepcionadas de mí. Menos Marietta.

- Por favor. Déjenla en paz. Tampoco que se va a casar o ponerse de novia con él.

- Pensé que el primero sería Austin. - Emily la miró a Megan.

- O Weasley. - Dijo Cho.

- No digan nada a nadie. No sé como voy a actuar de ahora en más.

- Ignóralo. - Megan ya estaba en la puerta. - Haz como si nada hubiese pasado.

- No haré eso, Megan. Es feo que te traten así.

- ¿Acaso te gustó el beso?

- ¿Por qué te molesta tanto, Emily? ¿Por que no beso a tu hermano?

Esperamos llegar al desayuno para poder seguir hablando del tema. Fue el camino más incomodo que recorrí con las chicas. Al llegar allí, Luke estaba sentado con un libro en su mano derecha mientras comía. Mirándolo recordaba todos los detalles de ese beso. Antes de ir a la mesa, levantó la vista, bajo su libro mientras me miraba con una pequeña sonrisa... Que se le borró de inmediato.

- Buenos días, Ravenclaw. - George se me tiro encima. Ambos se notaban muy cansados y llevaban los uniformes de Quidditch.

- ¿Qué les pasa? ¿Por qué traen los uniformes?

- ¿Ustedes ya están entrenando? - Cho se notaba un poco asustada.

- Wood nos obligó ir a entrenar a la madrugada. - Se incorporó George.

- Estamos muertos. - Fred imitó a su hermano. Casi me caigo por tener todo el peso de su cuerpo encima del mío.

-Dejen de tirarse encima mío. - Lo empuje a Fred, para que se enderezara.

- Y todavía no le dijimos todo. Malfoy es el nuevo buscador de Slytherin.

- ¿El rubio pretencioso? ¿Que hizo? ¿Compro al equipo? - Algunas rieron. Solo los chicos, Cho y yo, no.

- Todas tienen escobas nuevas.

- ¡Es una locura! - Cho estaba enojada.

- No se preocupen... - Fred se tiraba de nuevo encima. - Si alguien tiene la necesidad de regalar escobas para comprarse un puesto en Quidditch, no es un buen jugador.

- No te dijimos la mejor parte. - George me sacó a su hermano de encima. - Los de Slytherin la insultaron a Hermione.

- ¿Esa es la mejor parte?

- Déjame terminar...

- Eso fue divertido. - Le interrumpió su hermano. - Ron trato de hechizar a Malfoy, como venganza por lo que le dijo a Granger, pero como su varita esta dañada desde que chocó el auto de papá con el sauce boxeador, el hechizo le rebotó.

- Esta escupiendo babosas en este momento.

- Se me fue el apetito. - Emily aparto su plato de avena.

- ¿Por qué nos mira tanto Adams? - Me preguntó George.

- Porque están usando los uniformes en el desayuno, y no hay ningún partido.

- Debe odiarnos porque comenzamos a entrenar. Es de Slytherin. Cualquier cosa que haga un Gryffindor, les molesta. - Pensaba que quizás era porque ambos se me tiraban encima. Ahora entendía su teoría sobre el amor.

- ¿Van a ir a comer o la van a seguir usando como su cama? - Quizo saber Megan.

- Es cómoda. - De nuevo Fred estaba encima se mi espalda.

- ¡Weasley! - Austin le llamó la atención. - No te pongas encima de _____. - A su vez, apareció Percy.

- Fred, compórtate. Estas en público.

- No te metas, Percy. Tú no tuviste que levantarte al alba para entrenar.

- Estamos muy cansados. No estamos todo el día pensando en como castigar al mundo.

- Saben que como prefecto puedo quitarles puntos si no se comportan.

- No lo harás.

- Yo si lo haré si vuelven a tirarse encima de ella. - Les dijo Austin.

- Estábamos teniendo una buena charla hasta que llegaron ustedes. ¿Por qué no se esfuman?

- Okay, un punto menos para Gryffindor. - Percy acepto el gesto de Austin.

- ¿Qué? Estas loco.

- Si quieren pueden ser más.

- ¿Acaso los prefectos se les sube el poder a la cabeza? - Se quejó George.

- Aléjense de ella. Vayan a su mesa y no les descontaré más puntos.

- No te obedeceremos. - Se le enfrentó Fred.

- Okay. Dos puntos menos. - Fred estaba frente a Austin, mirándose fijo.

- ¡Ya basta! - Todos me miraron. - ¿No se dan cuenta lo ridículo que es esto? Ellos se estaban tirando encima de mi cuerpo. La que tiene que ponerles un freno soy yo, no ustedes.

- Le pusiste un freno y no te hicieron caso.

- ¿Acaso tú los conoces más que yo? Ellos siempre actúan así conmigo, solo para molestarme. Ustedes dos, par de ridículos, solo lo hacen para llamar la atención.

- Okay, _____. Dos puntos menos para Ravenclaw. - Al escuchar eso, algunos alumnos de mi casa vinieron hasta donde estábamos para quejarse con Austin. - Si no se calman, les quitaré más puntos.

- Me decepcionas, Austin.

No desayune. Salí del lugar sola. Esperaba que nadie me siguiera. De fondo podía escuchar como el tumulto de gente discutía con los dos prefectos. No sabía que le pasaba. Miento, si lo sabía, pero jamás pensé que se comportaría de esa manera. Austin estaba celoso. Al parecer Luke también. Ambos estaban celosos de la relación que tenía con Fred. Si Austin hacía eso por Weasley, no me quería imaginar que haría cuando se entere que mi primer beso fue con Luke Adams.