- ¿Se dieron cuenta de quienes estaban ahí? Potter, el hermano menor de los Weasley y la chicas...
- Granger. - Le dije a Megan. Ya todos estábamos en las habitaciones.
- Es su segundo año, y es la segunda vez que pasa algo extraño y ellos están involucrados.
- Cálmate. Debe ser alguna broma de Halloween. - Dijo Marietta.
- Si es así, es de mal gusto.
- No creo que sea una broma. Era la gata de la señora Norris. - Todas estaban confundidas por lo que había dicho. Todavía seguía shockeada por ver ese animal colgado de esa manera.
- Si no hubieses estado con nosotras, tranquilamente te culparían por eso. - Dijo Marietta. Todas la miraron.
- ¿Por qué dices eso? - Emily estaba indignada.
- Eres la que toma clases extras con uno de Slytherin. Quizás te enseño algunos trucos más avanzados.
- Marietta, ¿Por qué no nos haces un favor y cierras la boca? - Megan quería golpearla.
- No tomo clases con Luke solo. Esta el profesor Flitwick con nosotros.
- Es mejor que nos vayamos a dormir, antes de que alguien diga otra tontería.
Durante la semana, todos seguían hablando del tema. No podía ver ningún animal muerto arriba de la mesa. Con solo sentir su aroma, me daban náuseas. El celador Filch estaba completamente paranoico. Tratábamos de evitar los lugares donde estaba, para no meternos en problemas. Eso hacíamos hasta que, en una visita sola a la biblioteca, me tope con Luke.
- Sabía que te encontraría por estos pasillos. - Me dijo mientras caminaba hacia mi, sin apartar la vista de su libro. - Es bueno volverte a ver. - Lo cerró con una mano. - Te queda bien el azul, pero me gusta tu color natural. Si quieres... puedo arreglarlo.
- Las chicas ya trataron de hacerlo. - Sacó su varita del bolsillo interior de su capa.
- ¿Puedo? - Asentí confiando en él. - Listo. - Miré los mechones de mi pelo. El color azul desapareció.
- Eres un genio.
- No, solo un mago.
- Ustedes...- Escuchamos detrás de Luke. Filch se acercaba hacia nosotros. - No deberían estar por aquí.
- Disculpa, pero este pasillo conduce a la biblioteca.
- Tú, niña. - Se notaba enojado conmigo. - Tú tienes esa habilidad de hacer magia con las manos ¿No es así? Tú le hiciste algo a mi gata.
- Disculpe, señor Filch, pero ella ha estado en el banquete, yo la he visto toda la noche y jamás salió del lugar. - Luke se puso delante mío. - Ella tiene esa habilidad, pero eso no quiere decir que la utilice para lastimar a alguien.
- ¡Es mentira! - Gritó. - Ya ha lastimado a alguien.
- No mato a nadie. - Luke se ponía cada vez más serio y a la defensiva. - No es la persona horrenda que es usted, que va por los pasillos juzgando a las personas.
- ¡No me hables de esa forma, muchacho! Los dos están castigados.
- ¿Cuál es su motivo? - Filch lo arrastraba a Luke sujetándolo del hombro.
- Señor Filch, no puede hacer eso. - Corría detrás de ellos.
- Me faltaron el respeto. - Nos gritaba. Casi vomito cuando una gota de saliva salpicó a Luke.
- Señor Filch, si no suelta a mi compañero le diré al director que nos maltrato injustamente, solo por despecho por lo que le pasó con su gata.
- No me amenaces con esas cosas, mocosa.
- Si no lo suelta en este momento, no tendré.... - Luke se libero de él en un abrir y cerrar de ojos.
- Señor Filch, el jefe de mi casa se enterara de esto. - Él trato de sujetarme a mi, pero Luke volvió a poner delante mío. - Le llega a poner una mano encima y ese día será su ultimo en Hogwarts. - Lo miró fijo a los ojos. Estaba furioso. - Vámonos, _____. - Caminamos lo más rápido que pudimos. Filch no nos siguió, descargó su enojo en unos estudiantes de quinto año, que justo volvían de la biblioteca. - Ese maldito Squib, casi hace que hagas magia. - Decía por lo bajo. - Juro que lo mataré...
- ¿Squib?
- Un mago sin magia.
- Lo sé. Mi padre es un Squib. - Luke detuvo sus pasos, para mirarme.
- ¿Tu padre es un squib?
- Mi bisabuela era bruja, pero ninguno de sus hijos y nietos fue mago.
- Interesante... - Susurro con la vista en el suelo. - Pensé que eras mestiza.
- Y tú un caballero. - Se rio mirando hacia el piso. Era la primera vez que lo veía sonreír.
- ¿Cómo sabes que Filch no posee magia?
- Escucho las paredes... - Reí por lo bajo, por ese comentario. - Me gusta aprender algo más sobre ti.
Al levantar la vista, casi me derrito. En sus ojos podía notar que es mentira que los de Slytherin son malas personas. Tranquilamente te puedes enamorar de uno de ellos. En ese momento no pensé en si era de día, o en la hora, o que estábamos en medio del pasillo en plena semana de clases, solo quería acercarme a él y besarlo. Pero ni siquiera pude intentar acercarme a él, porque escuche como una persona se aclaraba la garganta muy cerca de nosotros. Era Austin.
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Mi vida en Hogwarts 3er año
Fiksi PenggemarEl tercer año esta por comenzar. Nuevas sorpresas le esperan a ____. Entre una charla con su hermano, hasta ¿un beso inesperado? Un año más lleno de aventuras y nuevos retos. Solo espera mantenerse alejada de la enfermería o el ministerio. ¿Lo hará?