Fuego con Fuego (Mafia Marshall III)

Capítulo 41

Estoy terminando de alistarme en mi habitación del hotel, para luego ir a la "morada" de Cassian, cuando suena mi celular y al tomarlo, la pantalla marca "Gruñón".

Atiendo. - Hola papá. 

- Al fin oigo tú voz. - dice en ese tono de reproche mezclado con sarcasmo. - Te he dejado cientos de mensajes. 

- Lo siento. - me disculpo, sentándome en la cama. - He estado ocupada, además la diferencia horaria no ayuda mucho. 

- Si, me he enterado que has estado ocupada... 

- ¿A que te refieres? - le pregunto sin entender, haciendo que se me forme un vacío en el estomago. Aún no estaba lista para que se enterase que me voy a casar. O más bien, él no estaba listo para oír eso, mucho menos sabiendo que es un completo desconocido. Voy a matar a Mason. 

- No te hagas la desentendida. - me regaña molesto. Nada le enfurece más cuando la gente le niega, o se hace la tonta, sobre algo que él ya sabe que es verdad. - Acaso me vas a decir que tú no tienes nada que ver con la muerte de ese criminal ruso tan importante, que aprecio muerto en la entrada de su casa con un tiro en el centro de su frente. La ultima vez que lo vieron fue luego de una conferencia que dio, en en el mismo hotel donde tú te hospedas. 

- ¿Y tú como sabes dónde me hospedo? 

- Me siguen llegando los resúmenes de tú tarjeta, Arwen. 

Suspiro con fastidio. - Tendré que hacerme una local de aquí. - me digo a mi misma. 

- ¿Niegas tener algo que ver? 

- Ay, por favor, papá... - digo con fastidio. 

- ¡Lo sabia! - exclama. 

- No te preocupes... 

- Es sencillo decirlo, no hacerlo. 

- Hemos tenido cuidado y...

- ¿Hemos? - me interrumpe. - Me imagino que solo tú y Mason. 

- Eh...

- ¡Arwen! - me regaña. - No me digas que has sido tan inconsciente de confiar en alguien sin conocerle. 

Ay papá, si supieras... 

- El tío Hayes me ha pasado el contacto y...

- ¿¡Ha sido Hayes!? ¡No me ha dicho nada! - exclama indignado. 

Genial. Va a estrangular al tío. 

- Papá... - comienzo a decir. 

- ¿Cómo se apellida? 

- ¿Para que quieres saberlo? - le pregunto riendo. - No es como si tú tuvieras contactos en Rusia. Apenas recordabas los nombres de las personas que trabajan para ti. 

- Muy chistosa... - dice con fastidio. - Le diré a Eric que lo busque. 

Eso quiere decir que el tío Eric tampoco le dijo sobre la pequeña investigación que le pidió Mason. Menos mal, porque no creo que apruebe a Cassian por su curriculum, lo que es bastante hipócrita de su parte, ni que él fuera Heidi. Según mi padre, ninguna persona sobre está tierra me merece. Y luego se preguntan por que soy tan egocéntrica, con un padre como el mío...

- Papá, tú siempre me dices que debo confiar en mi instinto Marshall, que eso nunca falla. Pues, tengo un buen presentimiento. 

- ¿Qué edad tiene? - pregunta. 

- 29 años. - respondo sin pensar. 

Quedo en silencio por unos segundos. - ¡Ahah...! - exclama como si hubiera entendido el origen del mundo. - Ahora entiendo por donde va la cosa...