Capítulo 103

1.3K 150 29
                                    

Hoy es uno de esos tantos días en los que nos encontramos haciendo alguna labor para el clan, porque por más que ya nos encontramos en la cima de la pirámide nunca dejamos de trabajar, siempre nos mantenemos en acción. En especial ahora que estamos en el auge de nuestro clan. 

Nuestro siguiente objetivo es expandirnos hacía el conteniente asiático, que gracias a Hiro hemos logrando adentrarnos tanto en Japón, como China y Corea del Sur. Aunque recién estamos dando las primera pisadas y nos queremos asegurar que es tierra firme para avanzar a zancadas. 

Uno de nuestros contactos, que se relaciona en esa parte del territorio para ser nuestros ojos y oídos allí, nos informo que desde el país de Indonesia están en contra de que tomemos poder en esa parte del continente, por lo que habían enviado a un informante para que nos vigilara de cerca y de darle la orden, que nos acabara. Que ilusos si creen que uno solo bastara para acabar con el clan Markov. 

Pavel e Irina no tardaron en dar con él. Así que Nikolai se encargo de capturarlo y llevarlo hacía el viejo galpón, el cuál seguíamos teniendo y usando cuando necesitábamos un lugar alejado para hacer alguna de estás cosas que requerían de estar apartados de todo. 

Cuando con Cassian, Pavel y Viktor entramos a la vieja morada, vemos al sujeto atado a una silla y amordazado. Su rostro se encontraba bastante hinchado por los golpes. 

- Pav, ¡que bueno que llegas! - exclama Nikolai con alegría. - Hace una hora que este lleva hablando que no le entiendo nada. 

- ¿Acaso alguna vez te conté que tome un curso de indonesio? - le pregunta este con sarcasmo. 

- Ya se que eras un niño cuando te marchaste de India, pero supongo que algo debes recordar de tú idioma natal. - sigue diciendo. 

Pavel nos mira confundido, algo boquiabierto. 

- Si, lo dice enserio. - le confirma Cassian. 

- En India se habla hindi, ¡tarado! - corrige Pavel a Nik. 

- ¡Pues yo que se! - se queja el menor de los mellizos. - Ni siquiera termine la escuela. Todo es lo mismo para mi. Indonesia, India. 

Miro a Cassian. - Se escapaba con mucha frecuencia y lo terminaron expulsando. - me responde. 

- ¡Ese no es el punto! - continúa con sus quejas. - Sino hacer hablar a esta alimaña. 

- ¿Tú vives en la época de la cavernas o que? - le pregunto con fastidio. - Solo basta con buscar en ese celular tan caro que llevas una aplicación para traducir y listo. 

- No soy tan joven y listo como tú, Arwen. Apenas si se poner la alarma despertadora en este aparatezco. Una vez que uno pasa los cuarenta la función neuronal comienza a disminuir. - se excusa Nik. 

- Contigo vamos al horno entonces, ya que de por si las tenias bastante disminuidas. - se burla Viktor. 

- Tú siempre tan chistoso con tu sarcasmo. 

- Dicen que una forma de inteligencia. - le responde Viktor. 

- Suficiente. - anuncia Cassian con su voz firme. - Terminemos con esto que quiero largarme de aquí. 

Miro a Pavel. - ¿Te encargas? - le pido. 

- Claro, a diferencia de algunos, mis neuronas no disminuyen. - me responde acercándose a nuestro prisionero. 

- No lo digo yo Pav, lo dice la ciencia. - sigue Nikolai. 

- Si, lo que digas. - responde mientras se sienta en una de las sillas con su computadora encima de las piernas y empieza a teclear. 

Fuego con Fuego (Mafia Marshall III)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora