✎ Imaginas (III) ✓

♥ Ensueño

Tener un romance escolar era un tanto complicado, teniendo en cuenta las personas que apostaban que no durarían lo suficiente y terminarían odiándose, el ser de diferentes años era una desventaja notoria para los curiosos y las posibles preferencias a esa edad. Y es que mientras tú te enfocabas a mitad del año en salir bien en tus calificaciones para poder aplicar en la universidad que querías, él ya estaba con un paso ingresando y dejando atrás el bachillerato. 

Y todos tus temores se hacían presentes, ¿Y si se hacía realidad? Él conocería a lindas chicas universitarias, que compartirían las mismas pasiones que él, estarían lucrando para el mismo futuro mientras que tú aún estabas indecisa sobre que estudiar. Inclusive planeabas tomarte un par de meses más después de graduarte para pensarlo antes de intentarlo en la segunda convocatoria que te ofrecían diversas universidades, aún tenías tiempo, pero no creías escoger en un futuro cercano por la presión.

—Él sin duda alguna tendrá muchas ofertas, escuché que las universitarias se van contra los nuevos tan pronto como los ven llegar, son como la carne fresca que están dispuestas a probar.—Escuchaste hablar a una compañera que estaba entre tu grupo de amigos y emitiste una mueca. 

—No ayudas, ¿Por qué siquiera estás aquí?—Cuestionó una de tus amigas ante su comentario con disgusto.

La misma chica rodó los ojos y se levantó del asiento.—Solo quería convivir con ustedes, pero viendo que no soy bienvenida me iré.

La vieron alejarse de la misma manera inesperada en la que llegó y ocultaste tu rostro entre tus manos, totalmente mortificada por los últimos días transcurridos. Y es que ya se acercaba el final del ciclo escolar, los preparativos de la graduación y de concluir un año más de clases se sentía a la vuelta de la esquina, por lo que tu novio estaba entre los involucrados y ni siquiera tenían suficiente tiempo para verse más que para mensajearse.

—Hey, no te mortifiques por lo que dicen, conoces como es él y no se atrevería a engañarte, todos aquí somos más que conscientes del amor que se tienen y que él estaría dispuesto a crear una religión para alabarte todos los días.

Sus últimas palabras hicieron que todos rieran y solo provocó un rubor en ti, sabías que en cierto modo tenía razón, y es que el amor que se tenían era tan puro y leal que cualquier acción que tuviera que ver con apreciar al otro sería vista por ustedes.—No exageres, no es para tanto.

Y como si lo hubieran invocado, tu celular vibró con un nuevo mensaje de él.

"¿Nos veremos esta noche? No puedo esperar a verte después de mucho :)"-13:46 pm.

Sonreíste ante su mensaje y le escribiste tu respuesta de forma rápida. 

"Claro, nos vemos en la noche."-13:48 pm.

—Ya, pero hagamos apuestas a que él acaba de mandarle mensaje y por eso ahora está tan contenta.—Cuando tu amigo habló, todos iniciaron una bulla. 

—Ustedes, chicos, son tan insoportables.—Les sacaste la lengua en forma de indignación y todos rieron ante tu acción.

Y a pesar de todo, no cambiarías sus amistades aunque fueran juguetones a veces, eso era lo que te mantenía viva.

(...)

Había caído una lluvia torrencial de camino a la casa de tu novio; Después de acordar que tú irías a visitarlo para tener un motivo para salir de casa y para evitar las bochornosas charlas que tenía tu mamá con ustedes en cada ocasión que los veía juntos, preferías salir pero no esperabas que casi llegando a la calle donde vivía se soltara una lluvia que te empaparía por completo.