Advertencia: Están en todo su derecho en no leer este imagina, ¿Por qué? Al tratar del proceso del embarazo no quiero darle el típico enfoque que usualmente se ve. El nombre lo dice todo, se tratará sobre el proceso de lactancia y como se va llevando. Si a alguien le incomoda y no está interesado, solo pido que se abstenga de comentar o leer, no quisiera malas experiencias o el que se malentiendan las cosas.
De antemano, gracias por comprender. Bienvenidos sean <3.
(...)
El proceso del embarazo no era tan sencillo como se podría decir; Y es que uno está con la creencia de que los primeros meses lo único que se sufre son los mareos, las náuseas y los antojos en horas picos o las combinaciones raras que podían surgir. En los últimos meses, el tener un gran vientre cargando sobre tu espalda y que hacer hasta la mínima cosa te costaba el alma, pero si tenías a una persona correcta a tu lado todo eso se apaciguaba.
En tu caso, detestabas los cambios que estabas teniendo. Iniciando por la parte de tu pecho.
Nadie te había advertido sobre tener que inducir la lactancia semanas antes de la llegada del bebé, y aunque parecieran ejercicios sencillos y nada fuera del otro mundo, realmente no te sentaba el estar en el baño o sobre la cama mientras tocabas la zona de tu pecho que se había vuelto extremadamente sensible.
Desde que la doctora que mantenía un seguimiento con tu embarazo te aconsejó sobre iniciar el proceso de inducir la lactancia, te habías puesto un tanto sonrojada al no saber de qué se trataba en sí. Mientras ella te explicaba, agradecías que tu espooso no hubiera podido ir a esa cita porque de lo contrario sería muy incómodo, y aunque se tratara de un proceso normal y en una zona de la cual se tenía más que claro que interfería en el proceso del embarazo, no quitaba lo aborchonada que te encontrabas.
Después de la cita y de mentir que te había ido todo bien y que no había cambio algunos, omitiendo la parte de la nueva rutina que tenías que hacer hasta la llegada del bebé, subiste a la habitación que compartían con la excusa de darte una ducha porque te sentías acalorada y una vez que te desprendiste de tus ropas, te paraste frente al espejo para inspeccionar tu cuerpo.
Sonreíste ante la hermosa curvatura que formaba tu vientre al tener los meses avanzados con el embarazo. No te importaban tanto las estrías ante la piel siendo estirada de más por la carga en la zona, en ocasiones te podías acomplejar pero sabías que todo valía la pena. Tu espalda ya resentía el peso, los sujetadores ya te molestaban para esa etapa, haciendo de tus pechos se sintieran extremadamente sensibles con cualquier roce y en ocasiones una horrible picazón.
Centraste tu mirada sobre tus pechos, dirigiendo tus manos sobre estos para iniciar con uno de los ejercicios que te había dicho la doctora, pero antes de que pudieras acercarte lo suficiente, te detuviste abruptamente y retiraste tus manos, sintiéndote avergonzada con la acción. Fue cuando recordaste las palabras de la doctora:
"—Es normal pensar de ello como algo explícito, pero uno lo hace con la intención de ayudar para el momento del nacimiento del bebé. Son simples estímulos en la parte del pecho y en el pezón, realmente no duran más allá de cinco minutos porque aún no producirán leche. Cuando estos desprendan la lactancia, los ejercicios seguirán pero por mayor tiempo, no tienes porqué asustarte o sentirte avergonzada porque no eres ni la primera ni la última mujer embarazada que pasará por esto.—Había dicho con total confianza."
Y cuando sugirió el que tu esposo te ayudara, casi te caíste de la silla y negaste rápidamente, diciendo que podrías hacerlo por tu cuenta. Pero si no podías siquiera tocar tu cuerpo porque lo sentías de forma extraña, menos podrías proviniendo de tu esposo porque se sentía demasiado íntimo.
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✎ Imaginas (III) ✓
RandomEfectivamente, estás leyendo bien, este es el tercer libro de imaginas ;) Inicio: 18/Mar/2022. Fin: 21/Dic/2022.