♥ Acampar

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Debías de confesar que nunca habías sido gran fanática de los campamentos ni el ir a las montañas, pero después de ser convencida por tu grupo de amigos y un par de besos por parte de él, habías cedido y ahora estabas sintiéndote mal entre toda la maleza, los molestos mosquitos y la noche llegando tan lento como lo podías esperar.

Estaban alrededor de la fogata contando un par de anécdotas, pero no podías concentrarte por el repentino dolor de cabeza que te había dado mientras comías un malvavisco y las náuseas que se aproximaban. No querías irte a la van, queriendo ayudarlos cuando recogieran todo porque había formado parte de ello, pero conforme los minutos pasaban todo parecía darte vueltas y solo querías acostarte.

Todos estaban en su propio mundo cuando te levantaste de tu lugar y fuiste dentro de la van en busca de una botella de agua, pero cuando ibas de regreso a la fogata y volteaste hacía donde reposaba una de las camas, tu tentación fue mayor y decidiste acostarte a descansar un par de minutos, pensando que con eso te sentirías mejor y te levantarías cuando todos se pusieran a limpiar, pero cuando tocaste la almohada y te hiciste ovillo en medio del colchón, no dudaste en cerrar los ojos y entraste en un profundo sueño ajena a tu alrededor.

Tu novio había comenzado a notar tu ausencia, removiéndose en su lugar pensando si sería buena idea ir a buscarte; El problema era que para el grupo de amigos que compartían, aún eran simplemente amigos y no habían formalizado ningún tipo de relación. Habían decidido hacerlo después, por mientras todo se mantenía en secreto y seguían llevándose como los mejores amigos que eran frente a ellos. 

Por suerte, tu mejor amiga sabía de su estatus como pareja y al verlo impaciente por tu desaparición, fue a la van para checar como te encontrabas, sorprendiéndose de verte profundamente dormida en la cama mientras temblabas levemente del frío por la baja temperatura que estaba recibiendo la noche. Buscó una manta en los compartimentos y encontró una limpia, depositándola sobre tu cuerpo hasta cubrir tus hombros, cuando comprobó que seguías dormida salió con un solo propósito en mente.

—Ella está dormida adentro, si quieres ir a verla está bien, yo me encargo de todo aquí.—Tomó lugar a su lado y susurró por lo bajo, sosteniendo uno de los malvaviscos hacía el fuego mientras señalaba la van en un simple gesto.

—Gracias.—Le mostró una sonrisa de agradecimiento y se levantó, estirándose en su lugar antes de dirigirse hacía la van. 

Entró con cuidado y cerró la puerta detrás suyo, dando un par de pasos hasta la pequeña habitación donde estabas descansando y tomó asiento en la orilla de la cama, apartando el cabello que tapaba tu rostro.

—Hey, bebé.—Pinchó tu hombro con intenciones de despertarte, sin lograrlo aún.—Bebé, vamos.

Se inclinó y repartió varios besos por tu rostro, haciendo que sonrieras ante la acción y abrieras un poco tus ojos, tratando de despertarte, pero el cansancio te seguía ganando.

—¿Pasó algo?—Cuestionaste en un susurro apenas audible, tratando de enfocar a tu alrededor.

—Todo está bien, pero ¿Cómo te sientes tú? ¿Te sientes mal? Solo vimos como entraste, pero ya no saliste y vine a comprobar que todo estuviera bien.

—Me empecé a sentir mal, vine a acostarme un rato para luego salir a ayudarles cuando limpiaran, pero me siento muy cansada.—Hiciste un leve puchero, tratando aún de orientarte.

—No tienes porqué preocuparte de ello, Vianey y yo lo vamos a resolver, ¿Está bien? Solo procura descansar, ya mañana partiremos de aquí y podemos pasar por algo de medicamento.—Asentiste a lo dicho, cerrando los ojos nuevamente. Sentiste como se levantó y pensaste que se iba a ir, pero de repente sentiste el colchón hundirse detrás suyo y a lo siguiente como sus brazos te rodeaban.

—¿Qué haces? ¿Y si alguien viene?

—Vianey nos echará una mano para ello, ahora descansa que es lo primordial en este momento, me quedaré contigo hasta que te sientas mejor.

No protestaste, en cambio, te giraste en sus brazos hasta estar cara a cara y depositaste tu rostro contra la curvatura de su cuello, también envolviéndolo en tus brazos y metiendo una de tus piernas entre las suyas, dejando poco espacio entre sus cuerpos.

Lo último que sentiste fue como su mano daba suaves caricias en tu cabello, arrullándote más de lo que ya estabas, para luego aspirar la dulce colonia que llevaba puesta combinada con la naturaleza y la propia leña, haciéndote suspirar. 

Y con un último suspiro, caíste profundamente dormida entre sus brazos y su calor. 

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Los imaginas estarán detenidos apróximadamente por una semana/dos semanas mientras pueda concluir con "Figura materna", ya que es un proyecto que ya está próximo a concluir y quiero darle prioridad y también a "Love enemies", si bien aún le restan varios capítulos, quiero aprovechar la racha de inspiración que tengo para darle un rumbo definido que me hacía falta. Heartbeat tendrá capítulos suspendidos, ya que no es muy de mi prioridad pero aún estoy tratando de encontrarle un rumbo convencedor, cualquier novedad yo se las haré llegar. 

Nos vemos en las próximas publicaciones <3. 

✎ Imaginas (III) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora