ciento veintiuno

317 49 5
                                    

El celo de Changbin duró casi una semana, y Minho terminó más que agotado, y se preguntaba cómo iba a hacer para soportarlo cada mes.

Por parte de Changbin, el híbrido solo había vuelto a la normalidad, como si nada hubiera pasado.

— Honnie, ¿Cómo sabremos cuando tengamos gatitos? — preguntó Changbin.

— Pues podremos hacer un test, o podemos esperar al mes que viene y si no llega tu celo, pues... — se encogió de hombros —. Pues si hacemos un test también y ya veremos.

Notó el marcado puchero en los labios de Changbin.

— ¿Qué pasa? ¿Estás impaciente?

Changbin asintió.

— Oh, bebé... ¿Cuántos besos necesitas para borrar ese pucherito? — Minho se acercó a él para tomar sus mejillas, dejó un beso en la punta de su nariz antes de comenzar a dar múltiples y pequeños besitos en sus labios, hasta hacerlo sonreir con encías y todo—. Eres tan pero tan lindo, Changbin — apretó sus mejillas con cariño.

— También eres muy lindo, Minhonnie.

— Pero tú eres más lindo que yo.

Changbin sólo asintió.

— Oh, ¿Lo sabes?

— Claro que si, tonto — dijo, riendo de forma tierna.

— Mí Binnie lo sabe todo — dijo Minho, su tono de voz era como si le hablara a un bebé —. Mí lindo Nyabi... Meowni...

— Eso suena muy tonto — dijo el híbrido.

— Sí, pero estás ruborizado así que algo de todos esos nombres tontos te gusta.

— Me gustas tú, es distinto.

— Lo sé, bebé, yo también me gusto — se burló con una sonrisa llena de confianza.

Luego de sobrevivir al primer celo de Changbin tuvieron que sobrevivir al segundo, y había momentos donde Minho en serio entendía a Seungmin y a sus pastillas mágicas, especialmente al tercer día y Changbin seguía con todas las energías a las tres de la mañana, y se iba a maullar desesperado a la sala cuando no lo atendía.

— No lo has hecho con suficientes ganas — le dijo Seungmin cuando Minho lo llamaba por sus crisis en medio del celo de su novio.

Cuando el tercer celo de Changbin no se presentó, fue cuando el híbrido se puso muy contento, tanto que había comenzado a saltar y se pasó largo rato cambiando a su forma animal y humana mientras iba por toda la sala.

Minho salió a buscar un par de pruebas de embarazo, al regresar, le tuvo que explicar a Changbin cómo funcionaban, aunque al final lo tuvieron que hacer juntos, en el baño del departamento.

Changbin estaba muy impaciente en el rato que tenía que esperar a que se revelara el resultado así se quedó viendo ambas pruebas en el baño.

— Minho, tienen dos rayitas — dijo, al salir, cargando con la dos pruebas, una en cada mano.

Minho se levantó rápidamente del sillón y fue hacia él, el híbrido estaba confundido y seguía nervioso, sus orejitas estaban algo bajas y su cola se movía mucho.

— ¿Significa que si o que no? ¿Dos rayas es que serán dos? Pero si me hice dos.. ¿Entonces significa que serán cuatro?

Minho sólo pudo reír, mirando el resultado positivo de ambas pruebas, para tomar las mejillas de Changbin y sentir que estaba por llorar.

— Significa que lo logramos, Bin — dijo, y el gatito alzó sus orejas, sus ojitos se abrieron de más y brillaron —. Vamos a tener gatitos.

Notó la sonrisa de su novio, que rápidamente se convirtió en un puchero que le pareció adorable y lo abrazó con ganas, escondiendo el rostro en su cuello, Changbin comenzó a ronronear de la emoción, bastante fuerte, al estar tan juntos Minho podía sentir la vibración en su pecho y se sentía demasiado bonito.





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Bad Luck (MinBin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora