Bad Luck (MinBin)

setenta y ocho

Seungmin se quitó la mascarilla para toser de nuevo, insultó internamente cuando la sensación de ahogo no lo abandonó y lo obligó a seguir tosiendo fuerte, doblándose sobre su estómago y haciendo que su rostro enrrogeciera por el esfuerzo.

— Sigues mal...

Alzó sus ojos hacia Minho, el castaño le dedicó una sonrisa penosa.

— Hola, ¿No? — el otro volvió a colocarse la mascarilla.

— ¿Estás con eso todo el día?

Seungmin negó.

— Unas cuatro veces al día, media hora.

— ¿Sabes que tus dos pequeños creen que vas a volver pronto? Se turnan para vigilar la puerta de la entrada o mirar por la ventana... Y estás así.

Seungmin bajó el rostro, sintiéndose horrible por mentir así, y se le rompió un poco el corazón al imaginarlos.

— ¿Y cómo es eso de que vas a volver con Changbin? — la voz de Minho sonó rota, bajo su vista para ocultar sus lágrimas.

— Contraté un detective privado.

— Oh, Seungmin.... — Minho abrió sus brazos —. ¿En serio?

— ¿Me vas a decir que hice mal? Pudrete.

Minho abrió su boca pero ninguna palabra salió, suspiró y la volvió a cerrar, se acercó a la camilla, tomó una silla y la acercó a la cabecera, donde Seungmin estaba medio sentado.

— ¿Qué dice?

— Dijo que iba a hacerte unas preguntas, porque todo estaba muy "sucio" y que tenía que "limpiar" las cosas un poco.

Minho lo miró confundido.

— ¿Nada más?

Seungmin negó.

— Dijo que tenía muy poca información, muchas pistas que no podía unir aún, le faltaban datos, todavía no había descubierto nada... Pero lo único que me dijo, de lo que está seguro, es que el atentado no fue contra la Organización, sino contra alguien — Seungmin lo miro para ver si entendió sus palabras —. Minho, ¿En qué mierda estás metido?

— ¿Yo? — Minho se llevó una mano al pecho, negó —. Yo nada, no he hecho nada.

— Lee, piensa un poco... ¿No hay nadie que los odie lo suficiente como para quemar el lugar donde estaban?

Minho volvió a negar, completamente seguro de que él no tenía ningún enemigo.

— Mejor me callo... El detective te preguntará las cosas mejor que yo.

— Y ¿Quien es? ¿O tengo que responderle con sinceridad al primer loco que empiece a preguntar por esas cosas?

— Se presentó como The8 — Seungmin se encogió de hombros —. No sé su nombre real, y creo que nunca me lo dirá. Es bastante excéntrico y tiene una ardilla de mascota y siempre está con ella al hombro, le dice Dino hasta ese animalito tiene nombre secreto.

Minho frunció el ceño en demasía.

— ¿Qué clase de locos privados consigues?

Seungmin se encogió de hombros.

— Le pregunté a los detectives que están tratando la investigación del incendio y ambos me recomendaron a este, así que debe ser bueno.

Minho asintió un poco.

— ¿Y cómo estás tú?

Seungmin sonrió de forma espléndida, llevó su mano libre a su pecho, sobre uno de sus pulmones.

— Muy jodido, pero ya no tanto.

— ¿Cómo? ¿Qué tanto?

— Pues... Primero empezó como una intoxicación más normal, digamos, pero luego hizo una infección en no sé que — Seungmin abrió sus brazos y se encogió un poco de hombros —. Y bueno... No me deja respirar porque es como si tuviera agua en los pulmones, como los ahogados, así que comenzaron a darme antibióticos y oxígeno— alzó su mascarilla y después se la colocó de nuevo —. Pero se ve que los remedios están funcionando y la infección está controlada y se está curando.

— No entiendo nada pero suena grave.

— Si no se curaba podía romperse el pulmón por dentro y dejo de respirar.

— Oh, mierda.

— Si, mierda — Seungmin le restó importancia —. ¿Cómo están mis bebés?

— Nadie les dijo la verdad y son las personas más felices de la casa en estos momentos.

— ¿Más que Jeongin y Chan?

— Los dos se están haciendo cargo de los demás como si fuéramos sus hijos... Y Jeong no lo sabe, pero se escucha en toda la casa cuando llora como un perrito en la noche.

Seungmin hizo un puchero por la triste imagen.

— Me da ternura que sea un perrito, ¿Sabes? — Seungmin sonrió un poco —. Y me da más ternura que su híbrido lo cuide tanto... ¿Notaste que Chan no es como nuestros híbridos?

Minho asintió.

— Es más como un adulto, los nuestros son unos bebés... Cocina muy bien también, sabe hacer muchas cosas.

Seungmin asintió, se sentía tranquilo que aquellos dos manejaran su casa, confiaba en ambos para mantener todo en algo de orden.

— ¿Y Jisoo?

— No lo sé... Siempre está afuera, sé que se la pasa en el techo y bueno, o Jeongin o Chan le dan comida, supongo... No salgo del cuarto, en verdad, esta es la primera vez que salgo de la casa... Sólo me quedo en la cama, pocas veces como en la mesa... O como en realidad... Es una mierda, Min....

Seungmin abrió sus brazos hacia él y Minho no tardó ningún segundo en dejarse abrazar, no pudo evitar que las lágrimas surgieran de nuevo, y su amigo dejó caricias en su cabello mientras lo dejaba llorar.

— Lo recuperaremos, Minho. Y todo eso va a terminar, amigo.