ochenta y tres

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Seungmin llegó a su casa aún llorando, aún con el amargo sentimiento en su pecho, y al abrir la puerta fue recibido por sus dos novios en saltos, sonrisas y besos que apenas pudo corresponder, rompiendo en llanto sin poder evitarlo, quebrandose en los brazos de aquellos dos.

— Minnie-hyung... Me hará llorar también— Felix movió un poco sus orejas, de forma adorable, y Seungmin sonrió entre lágrimas, mientras se frotaba el rostro intentando apartar las lágrimas —. B-Basta... — el castaño hizo un puchero, sus labios temblaron mientras sus ojos enrrogecian.

Hyunjin fue a abrazarlo, y giró sus cuerpos para ver al humano.

— ¿Y Changbin? ¿No vendrías con él?

Seungmin se rompió un poco más.

¿Cómo le diría a sus lindos bebés que su mejor amigo estaba muerto? ¿Cómo haría para explicarles lo que había pasado? ¿Entenderían si quiera que su amigo no iba a volver?

— C-changbin... Se fue de viaje, muy lejos.

Hyunjin alzó las cejas y su expresión fue triste.

— ¿De viaje? ¿Enfermo?

— Él ya se curó... No sé enfrentará nunca más.

El tigre movió sus orejas, pensativo, su cola se balanceaba de un lado al otro.

— ¿Cuándo volverá de su viaje? ¿Minho fue con él?

Seungmin negó.

— Minho se quedó aquí... Y Changbin no volverá en mucho tiempo.

— ¿Cuánto? — preguntó Felix, asomó sus ojos del pecho de Hyunjin para mirarlo, corriendo las lágrimas de sus rosadas mejillas.

— Me temo que nunca regresará, Fefi — Seungmin se acercó a él, abrazándolo por la espalda, colocando su mentón en su hombro.

Los ojos de Felix se abrieron con algo de miedo, sus orejas bajaron con dolor.

— ¿No vendrá a jugar con nosotros? ¿Qué pasará con Minho-hyung?

Seungmin se mantuvo en silencio.

— Min...— murmuró Hyunjin —. ¿Cómo estará Minho con Changbin de viaje?

Seungmin apretó los labios y aguantó las lágrimas.

— Minho está triste, muy triste — dijo—. Pero Changbin ahora está en un lugar más bonito, está muy bien y muy feliz, y algún día se encontrarán, porque Minho también viajará allí... Todos lo haremos y estarán juntos de nuevo.

Los híbridos permanecieron en silencio, hasta que los sollozos de Felix interrumpieron, el pequeño cubrió su rostro con sus manos mientras sus hombros de sacudían con su llanto, Seungmin se preocupó por él y lo volteó para verlo.

— Felix... Pequeño bebé, ya...

— Sabes... Podrías decir de forma más directa que está muerto — habló Hyunjin, en un tono grave y bajo qué Seungmin pocas veces había escuchado, sólo cuando el tigre estaba muy enojado usaba esa voz.

— Hyunnie... No quiero lastimarlos más...— Seungmin abrazó a Felix, acomodando la mejilla de su novio en su pecho, miró a Hyunjin con algo de pena, el rubio tenía la mandíbula muy apretada y la mirada baja, pero se rompió cuando su vista se cruzó con la del humano.

Hyunjin se unió al abrazo, reconfortandose con los otros dos.

— Los extrañé muchísimo, bebés — murmuró Seungmin, luego de unos segundos de llanto.

— Yo también — dijo Hyun.

— Yo más — dijo Lix.

Seungmin sonrió, sólo por estar con ellos dos de regreso, tomó primero el mentón del menor para dejar un amoroso beso en sus labios, para separarse, viendo el rubor en las mejillas del conejo y sonreír con orgullo.

Prosiguió con colocar una mano en la nuca de Hyunjin y atraerlo hacia él, para besarlo con ternura y apretar una de sus mejillas para hacerlo sonreír.

El pequeño Felix se notaba sumamente adorable con sus mejillas rojas y sus ojos brillando en felicidad, y algunas lágrimas aún, pero con esa linda sonrisa característica, que el tigre no pudo resistirse a dejar besos en sus mejillas y labios con una sonrisa amplia.

Desde las escaleras, Jeongin y Chan miraron a los tres, el más moreno con una expresión extraña y el híbrido con una sonrisa.

— Creo que es de las cosas más raras que he visto — dijo Jeongin.

— Amor, sabes que te amo y eso pero... ¿Nunca has visto un trío? ¿Tan virginal es tu vida?

El humano lo miró con una ceja alzada.

— Tú, mejor que nadie, sabe que mi vida es de todo menos virginal.

Chan rió y rodó los ojos.

— Te sorprendiste de ellos tres.

— Quizás porque nunca me dejaste hacer un trío.

— Si te dejará hacer eso sería con Lucas y él te la pondría, amor — Chan dió una nalgada firme y Jeongin hizo una mueca, frotando su zona afectada —. Y así te va a quedar el culo.

— Si sigues molestándome el tuyo va a quedar peor...

— ¿Crees que eso va a hacer que pare? — Chan llevó una mano al pecho, alzando sus cejas mirándolo a los ojos con expresión indignada.

— Qué perra que estás hoy, amor — comentó Jeongin, riendo, mientras una mano se posaba en su trasero y se dirigían al cuarto de huéspedes en silencio.






— Qué perra que estás hoy, amor — comentó Jeongin, riendo, mientras una mano se posaba en su trasero y se dirigían al cuarto de huéspedes en silencio

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Bad Luck (MinBin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora