cincuenta

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Dos días antes...

— Binnie, quédate quieto~ — masculló Felix, haciendo un puchero.

Desde hacía al menos veinte minutos que el conejo llevaba peinando el cabello de Changbin, aunque ahora sólo hacia que este se inflara y molestaba sus orejas cuando pasaba el cepillo por sobre estas.

— Lixie, basta, basta— Changbin se alejó de él, aunque el conejo le hizo ojitos tristes—. Bien, toma, peina mi cola— se volvió a acercar a él, tomando su peluda y oscura cola y dejándola sobre el regazo de Felix, haciendo que este vuelva a sonreír.

Felix tenía una extraña obsesión con peinar cualquier cosa que viera y en todo momento, aunque muchas veces se quedaba ocupado peinando sus largas orejas o su cabello, tanto Changbin como Hyunjin habían sufrido de tener al híbrido peinandolos por mucho rato, el máximo habían sido unos treinta minutos, hasta que el castaño había encontrado algo para hacer y se había olvidado del cepillo.

Changbin no lo sabía, Hyunjin lo recordaba vagamente, pero cuando el conejito había llegado a la casa apenas si conocía la higiene, y tomó bastante tiempo para que se tomara duchas diarias, se lavara los dientes o incluso se cambiara de ropa cuando está llevaba un tiempo de uso o se había manchando.

Seungmin lo atribuía a que habían descuidado mucho al pequeño Felix y no le habían enseñado nada de esas costumbres básicas de limpieza.

No fue sino hasta el día en que Felix vió lo lindo que quedaba su cabello y sus orejas si se bañaba y se peinaba suavemente que comenzó a tomarse la higiene en serio, aunque también llevaba esto a otras personas, y peinar lo relajaba bastante.

Con el conejito canturreando una melodía mientras peinaba la cola de Changbin, quien tenía el ceño fruncido por tanto toqueteo a su cola, Hyunjin habló para cortar el silencio.

— Binnie, ¿Cómo vas con tu mala suerte?

— Supongo que ¿Bien? — dijo el gatito—. Creo que lo último que pasó de mala suerte fue... Cuando Honnie se cayó en la bañera— asintio.

— Y eso fue hace...

Changbin contó con sus dedos un momento antes de responder, llegando a alzar cinco dedos.

— Cinco días— murmuró.

Hyunjin alzó sus cejas, sus redondas y doradas orejas se movieron un poco.

— Eso es bastante, y nada muy grave— hizo una mueca, Changbin se preocupó.

— ¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Algo malo?

— ¡Binniee! — se quejó Felix—. No nuevas tu cola... ¡Y la erizaste! No puedo peinarte así.

Changbin suspiró con fastidio por el conejo, decidió ignorarlo, alzando sus orejas hacia Hyunjin, esperando una respuesta.

— Dentro de dos días es "Martes trece". El día de la mala suerte.

Changbin soltó un respingo, su boca se quedó abierta.

— En ese día se alinean los planetas, con el sol y la mala suerte, todas apuntan a la Tierra— explicó Hyunjin, su voz sonaba más grave que su tono normal—. Si Minho tiene mala suerte acumulada... Con la que ya carga... Es posible que en Martes trece ocurran cosas de muy mala suerte.

— ¿Por ejemplo?

— Quizás si sale del departamento, rumbo a la universidad o a comprar el pan... No sé, se le caiga una maceta en la cabeza desde algún balcón de algún quinto piso.

Changbin tenía los ojos muy abiertos, tragó saliva duramente.

— ¿Qué pasa sí...?

— ¿Se te cae una maceta en la cabeza?

Mjm.

— Quizás tengan que llevarlo al hospital por la herida... O podría matarlo.

Changbin sintió las lágrimas picar en sus ojos.

— No quiero que Minho se muera por eso— murmuró.

— Podrías hacer algo por él, Bin.

Changbin alzó su rostro hacia Hyunjin.

— Si mantienes a Minho en el departamento, lo más cerca posible de tí, podrás cuidarlo mejor que si está afuera, ¿No? — Changbin asintió—. En el departamento hay menos riesgos, no se le puede caer una maceta en la cabeza ni nada parecido— Changbin negó—. Sólo debes hacer que Minho se quede todo el día en el departamento.

Changbin frunció los labios.

— ¿Cómo hago eso? — dijo—¿Cómo hacen ustedes cuando quieren que Seungmin se quede todo el día en casa?

Los otros dos híbridos se miraron, las mejillas de ambos se enrrogecieron, apartaron la vista del otro a los pocos segundos.

— Pues... Te explicaré.







 Te explicaré

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Bad Luck (MinBin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora