Un Sentimiento Muerto en Un Corazón Roto. ||Draken x OC Female|| Tokyo Revengers

09.- ¿Por quién late tu corazón?

Draken entró a su habitación y ella cerró la puerta detrás de sí. Enseguida volvió a sentarse en su cama y se tapó con una manta, el mayor indagava entre los estantes y los posters que tenía pegados en la pared.

- ¿Qué tanto miras?

- Nunca había estado en la habitación de una chica. Digo, además de las habitaciones de las chicas del burdel, a veces arreglo sus camas o limpio y me pagan. Ya sabes, pero fuera de ellas, esto es nuevo para mí.

- ¿Ni siquiera en la habitación de Emma?

- ¿Por qué habría estado en la habitación de Emma?

- Porque está enamorada de ti, ¿tú no sientes nada por ella?

- La quiero. -dijo después de un rato en silencio- Es complicado.

- Sí, es la hermana de tu mejor amigo.

- ¿Y tú?, ¿has estado en la habitación de algún chico?

- Takemichi ha sido mi mejor amigo durante años.

- Además de la de él.

- ¿Por quién me tomas? -Draken la miró fastidiado- En la de Baji. Hace una semana me llevó a su casa para que conociera a su mamá, es la mujer más agradable. Mientras ella preparaba la cena nosotros esperamos en su cuarto y jugaba con Peke J.

- Con qué ya conociste al gato. ¿Lo quieres?

- Claro, me encantan los gatos. -nuevamente la miró mal- Sí, lo quiero muchísimo. Por eso mismo siento que le estoy fallando ahora.

Draken tomó asiento a un lado de ella y también se cubrió con la manta que había puesto en sus piernas.

- Lamento ponerte en esta situación, ¿lo sabes?

- No creo que lo lamentes tanto, acabas de sentarte a lado de mí y taparte con mi cobija favorita de cuándo era muy pequeña.

- Baji es uno de mis mejores amigos, me duele la forma en la que se ha ido, ya lo perdí a él. No quiero perderte a ti también.

Guardaron silencio durante un buen rato, pensando en ellos y en su relación con Baji.

- ¿Cuál es tu sueño?

- Quiero el taller mecánico más grande de Japón, ¿y el tuyo?

- Volver a tener un hogar cómo el que tuve hace mucho.

- Creí que hablábamos de cosas menos profundas. -ambos soltaron una pequeña risa- También es mi sueño, conocer el amor de un hogar y de una familia. No quiero volver a sentirme de esa manera, solo y sin nadie con quién ir.

Dudosa, tomó su mano y luego le sonrió.

- No volverás a hacerlo. Yo estaré para ti. Cuándo todo esto pase, verás que Baji entrará en razón y en un futuro nos vamos a reír de esto. Tú y Emma formarán una familia, con un hijo, Mickey irá a visitarte y ella se va a enfadar porque comenzarás a ignorarla por beber y charlar de cosas viejas con Mickey. Takemichi estará ahí, también Hina, Mistuya y Pah.

- ¿Y tú?

- También. Junto a Baji.

- Junto a Baji... Ya entiendo. -nuevamente se puso de pie y comenzó a estirarse- Debo irme, si tus abuelos me encuentran aquí van a matarme.

- Draken, ¿quién es Kazutora? -preguntó interrumpiendo- En casa de Baji, encontré una carta dónde su remitente era esa firma. Y Baji ha hecho mención de que tendría que verlo pronto.

- Qué te lo diga él. -dijo caminando a la puerta. Raku saltó de su cama y se puso frente para no dejarlo pasar- ¿Sabes qué puedo quitarte, verdad?

- ¿Sabes qué puedo romperte los brazos, verdad? Dímelo Draken, ¿quién es Kazutora?

- Yo no debería de decirte.

- Tampoco debiste buscarme y aquí estás.

- Estoy aquí porque tú me lo has permitido. -se agachó y quedó a su altura- Parece que los dos hicimos mal.

- Pues termina tu mala acción.

Sonrió de lado, burlón por el comentario que él mismo provocó. Pensando en que si hacía la mala acción iba a recibir un golpe por atrevido, perdería a Baji y probablemente le darían la golpiza de su vida.

- Cuidado con lo que pides. -volvió a enderezarse- Mickey tenía un hermano mayor. Shinichiro-kun, era un sujeto agradable y a todos nos tenía estima, todos aprendimos mucho de él.

- ¿Por qué hablas en pasado?

- Kazutora mató a Shinichiro y quién lo acompañaba esa noche era Baji. A todos nos consta que fue un accidente pero Mickey aún le tiene rencor.

- ¿Baji? -preguntó titubeante- ¿Él está involucrado en la muerte de él hermano de Mickey?

- Algo así, eso debería de contártelo él. Ah, y Kazutora ya salió de la correccional, deberías de tener cuidado. -con gentileza la tomó por los hombros y la apartó- Y tranquila, nadie va a enterarse de que estuvimos juntos.

- Draken. -volvió a llamarlo antes de que diera un brinco del balcón al piso- Cuando sepa más sobre Kazutora y Baji, ¿puedo llamarte? No sé cómo asimilar todo esto.

- Claro, puedes hacerlo. Yo vendré aquí, a la misma hora. -le dedicó una suave sonrisa y pegó un salto para caer en la acera. Se montó en su motocicleta y antes de marcharse giró a verla nuevamente, con sus manos formó un corazón y le guiñó el ojo para marcharse.

Sus piernas temblaron y se emocionó, pero también se sintió mal, sucia. Cómo si acabara de serle infiel a Baji.
Justo en la ventana de enfrente, Takemichi suspiraba aliviado, no podía dormir y al abrir la ventana para tomar un poco de aire pudo ver tal escena.
Naoto y Draken ya le habían dejado claro que Raku era una pieza clave en que él no se desmoronara, aún podía salvar a Draken pero para eso tenía que salvarla a ella y salvarla significaba salvar a Baji.

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