Elisa
Luego de dos semanas, hoy era mi último día de pre aviso en mi trabajo. Todavía no puedo creer que mi jefe haya sido lo suficientemente imbecil como para realmente obligarme a renunciar, no tenía ningun derecho, me da rabia justo eso; no tenía ningún motivo para hacerlo. A veces me pongo a pensar que realmente le hubiera hecho la vida de cuadritos para que tuviera la justificación necesaria para correrme, pero luego, pienso que es mejor no manchar ni mi nombre, ni mi reputación. Al menos no se atrevió a robarme mi liquidación porque ahí si le hubiera armado el desmadre de su vida.
Aún no le he dicho a nadie que estoy desempleada y eso me esta consumiendo por dentro. No tengo idea que voy a hacer, y de solo pensar en que tengo que enviar currículos a varias empresas para ver cual me acepta, me da dolor de cabeza. Al menos con la liquidación me da chance de solventar mis gastos los proximos dos meses.
Llego a mi departamento con la esperanza de que Yuyu no se encuentre ahí, hoy no me apetece dar explicaciones de porqué estoy tan temprano en casa. —¿hola? ¿Yuyu? —pregunto en voz alta, no obtengo respuesta alguna. Paso directamente a mi cuarto y me tiro boca abajo en mi cama mientras doy un grito de desesperación —¿que carajos voy a hacer ahora? —digo volteandome y quedando viendo fijamente el techo ~como si este fuera a hablarme~ ruedo los ojos y dirijo mi mirada a unas cajas que tenía encima de mi closet. —¿y eso? —pregunto extrañada, me levanto de mi cama y con esfuerzo logro bajar las tres cajas que estaban ahí llevandolas a la sala. No recuerdo haber traído estas cajas, y de haberlo hecho ya no estarían en mi cuarto, cuando me mude saque todo de sus cajas y puse en donde correspondía cada cosa. Quizas son de Yuyu y como ya no tenía espacio en su habitación las puso en la mía. Asi que antes de meter la pata decido enviarle un mensaje.
E: Amiga, habían unas cajas encima de mi closet ¿son tuyas?
Y: No, son tuyas. Tu mamá las mando hace como dos dias, dijo que ya no quería nada tuyo en su casa jajaja, se me olvido decirte, sorry.
E:ojala en una de esas cajas venga una nueva mejor amiga que no sea olvidadiza.
Y: y si venía, ya valió porque seguro ya sé murió, ni modo, te quedas conmigo :D
E: ¡que chistosa!
Así que son mías, procedo a abrirlas y me encuentro con varios de los libros que había comprado cuando era adolescente, incluso cosas de mi misma autoría; fanfics, historietas, obras de teatro. Fue como abrir un baul lleno de recuerdos. Ahora que me acuerdo, no me traje todo esto porque estaban en el cuarto de servicio en la casa de mi mamá, seguro limpió ese espacio y me mando todo lo que es mío antes de tirarlo a la basura.
Buena decisión porque me habría molestado mucho que lo hiciera.
Termino de sacar todo de las cajas y empiezo a ordenar entre los libros comprados y las cosas escritas por mí, todos los libros comprados los coloco en una repisa en mi cuarto que aún tenía libre. Con todas las cosas que tengo en unos meses tendré que comprar una casa para que me pueda alcanzar todo lo que tengo.
¿Que acabo de pensar? Estoy desempleada y según yo en unos meses quiero comprar una casa. Lindo sueño. Lindo pero muuy lejano.
Pierdo la noción del tiempo arreglando todo hasta que alguien llama para que le abra el porton del edificio. Era Angie. Le doy el acceso para que suba a mi departamento y para mientras voy a esperarla a la puerta —hola —dice en cuanto me ve, extendiendo los brazos para fundirnos en un abrazo. —tenía miedo de que aún no llegaras de tu trabajo.
—vine temprano. —contesto mientras cierro la puerta —yo pensé que hoy tenías llamado hasta tarde y que no ibas a venir.
—no, yo ya termine, la que quedo con muchas escenas aún es Micaela y Alicia, y creo que Santiago, pero Juan y yo salimos temprano.
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Sempiterno [Rewrite The Stars]
FanfictionCuando Mica Suarez, una popular youtuber argentina, viaja a México para asistir a un evento de redes sociales nunca espero conocer a Elisa, otra creadora de contenidi famosa de México. A pesar de las diferencias que podrian tener como personas, Mica...