Micaela
Ni siquiera quiero decir su nombre en voz alta porque sé que no va a acudir a mi llamado. Simplemente no está, nada fue real. Pienso eso hasta que veo una nota en mi mesita de noche.
“no salí corriendo eh, pero necesito que me demuestres con actos lo que me dijiste anoche, yo quiero estar contigo, pero necesito saber de verdad que tu también quieres estar conmigo” Elisa.
¿Entonces lo que paso anoche, si fue real?
Se me sale una sonrisa, tomo mi celular y le envío un mensaje.
M: che, ¿alguna vez voy a poder despertar y que vos estés a mi lado?
Elisa
Llegué al departamento de Yuyu y me encontré con una Angie completamente dormida en el sofá. Aún era muy temprano, pero es la primera vez que me despierto feliz un domingo a la mañana, y más cuando me quede contemplando por varios minutos a Micaela profundamente dormida. Es un hecho que es una de las pocas personas que se ve muy tierna cuando está dormida, pero quise venirme antes de que se despertara para darle tiempo a que meditara en la nota que le deje.
Espero tener los resultados que tengo previsto porque si no, sería un enorme fail para mí intentar hacerme la misteriosa. Lo que paso anoche fue mágico, pero necesito que esa magia se mantenga durante el tiempo que dure nuestra relación.
Me meto a mi habitación, me vine en la pijama que me presto Micaela porque la verdad se la quiero entregar limpia, aunque estoy tentada a quedarme con la camisa porque tiene su olor, me va a dar pesar lavarla.
Me baño y luego salgo de mi habitación para preparar el desayuno.
Solo que ya se me adelantaron Yuyu y Angie.
-¿Qué haces aquí? –Pregunta Yuyu en cuanto me ve –para mi que ibas a pasar todo el día con tu amorcito.
Yo me pongo a reír.
-¿ya hiciste el desayuno? Muero de hambre –me acerco a la nevera para sacar la caja de leche y servirme un poco.
-no te hagas la pelotuda. Mira que me vine a dormir a un sillón en vez de mi camita para que vos y Micaela tuvieran la casa sola y garcharan sin tener que estar pendientes de que yo las escuchara. –dice Angie con vos ronca. –nos merecemos saber que paso anoche. Espero que todo lo que me cuido Yuyu anoche haya valido la pena para que nuestras amigas consumaran su amor.
-¿te emborrachaste? –se cubre la cara con las manos.
-esta vez no tanto, lo prometo.
-¿entonces Yuyu si te cuido bien?
-excelente, cinco estrellas por el servicio, hasta me ofreció su cama para dormir pero la verdad no quería pasarme de lanza. –me pongo a reír cuando escucho lo último que dice.
-mírala a la mexicana –digo.
-me encanta la manera en como estas evadiendo lo importante aquí –por fin es Yuyu la que habla mientras saca tres platos para servirnos el desayuno –ya wey, cuenta todo.
-lo merecemos. –agrega Angie haciendo pucheros.
Yo me siento en el comedor junto a Angie y casi no me puedo aguantar la risa cuando ambas me quedan viendo fijamente.
-órale wey ya, nos tienes en ascuas –dice Yuyu mientras nos pasa nuestro desayuno.
-no puedo creer que Yuyu te consienta más a tí que a mí, mira hasta la frutita picada te da. –continuo evadiendo el tema.
-tú porque si comes chilaquiles, mientras que Angie es vegetariana, además es nuestra invitada, hay que tratarla bien para que después no anden diciendo que los mexicanos somos bien mamones.
-por suerte porque los argentinos si somos bien mamones –ríe.
Nos volvemos a quedar todas en silencio.
-boluda ya –me tira un pedazo de sandía.
-ok ya, que chismosas. Bueno llegue a su casa, hablamos, ella me dijo que tenía miedo de que ambas saliéramos lastimadas porque solo vamos a salir el tiempo que ella va a estar aquí. Y bueno yo le dije que no había problema –hago una pausa y tomo un trago de mi leche. –entonces ella al final le gano la valentía y creo que ahora si vamos a intentar algo.
-¿y eso es todo? -pregunta Angie. Yo asiento. –osea ¿no garcharon? –niego con la cabeza, no sé porque esa palabra me causa tanta gracia.
-solo volvimos a dormir juntas de nuevo.
Angie toma su celular y marca un numero –pará –levanta un dedo para que haga silencio –aló, ¿policía? ¿Con el departamento de virgas? Sí, quiero denunciar a dos. –Yuyu y ella se sueltan en carcajadas. –no boluda, bueno por algo dice un dicho “donde no te de pena mostrar lo virga que sos, ahí es” y a Micaela le viene genial con lo virga que es.
-es que apenas estamos empezando, como que sentí que no era el momento.
-tranquila, solo te estoy jodiendo –dice riendo. –me parece perfecto que se tomen su tiempo. Eso quiere decir que lo de ustedes es serio. Nuestro shipp empieza a ser cannon. –le toma el brazo a Yuyu y lo sacude con emoción.
Mi celular suena y veo que es un mensaje de Micaela.
M: che, ¿alguna vez voy a poder despertar y que vos estés a mi lado?
Es inevitable que se me salga una sonrisa.
-eaaa, ¿es Micaela? –pregunta Angie. Yo asiento.
¿Qué le contesto?
E: todo depende de tí, de ahora en adelante. Pero, para serte sincera, si me costó irme de tu lado.
No puedo creer que Angie tenga razón, si somos un par de virgas.
-me encanta verte así con esa sonrisita –dice Yuyu. –medio rara Micaela, pero la verdad es que si la acepto como cuñada. ¡ighh! Wey, ¡WEY! –hace una pausa –si se te hizo lo del video.
-¿que video?
-che, en el que dices que Micaela es tu crush. Se te hizo literal con tu crush, sos el verdadero QUIEN PUDIERA. –contesta Angie cuando ve que no sé qué video era. Hago memoria y si, recuerdo que fue en el primer video que hice con Yuyu en el que digo eso. Y no puedo creer que sí, si se cumplió.
Me llega otro mensaje de Micaela.
M: ¿querés salir conmigo esta noche? Espero digas que sí porque recien empiezo a prepararte una sorpresa.
Por supuesto que acepte.
Creo que ahora si se viene lo chido.
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Sempiterno [Rewrite The Stars]
FanfictionCuando Mica Suarez, una popular youtuber argentina, viaja a México para asistir a un evento de redes sociales nunca espero conocer a Elisa, otra creadora de contenidi famosa de México. A pesar de las diferencias que podrian tener como personas, Mica...