Marco sabía que había pasado más allá de lo atrevido, pero le gustaba tanto tentarla, quitarle ese aspecto de chica seria que mantenía la mayor parte del día –Sigo esperando ¿te gusta lo ves? —se acercó un poco más. La vio alzar la mirada – ¿Quieres que te diga la verdad? –él sonrió a medio lado mostrado picardía -por su puesto...
-Es feo...
-Sabía que te iba a gust...-cortó su oración cuando cayó en cuenta en las palabras que ella le dijo -¿¡Cómo que feo!?—miró hacia abajo y por primera vez en sus 27 años de vida se había sentido inseguro de su cuerpo como hasta ahora, llevó una mano hacia adelante para cubrirse –Tu dijiste que te dijera la verdad, es la primera vez que veo a un hombre desnudo y más en su estadio de excitación –vio como volvía a bajar su mirada para detallarlo —Nosotras las mujeres somos más linda que ustedes —el aún la miraba con asombro, no podía creer que le haya dicho eso -¡Si soy tan feo deja de verme! —no le gustaba el escrutinio de su mirar.
Isabel sabía que se había pasado con aquel comentario, se tuvo que morder el labio para evitar que el viera la sonrisa que estaba a punto de escapársele cuando vio su rostro pasar a un pícaro empedernido a uno confundido —Ya deja el drama –puso su mano en su pecho y lo empujo a la cama. Como tenía el pantalón en sus pies junto con las botas le fue más fácil hacer que cayera en la cama.
-Cuando viste por primera vez una mujer ¿no pensaste que era algo rara? —le preguntó. Vio como el buscaba la sabanas para taparse a lo que ella se sentó en la esquina de la cama y tomo una de sus piernas para quitarle las botas y así bajar el pantalón –A diferencia de ti la primera vez que vi los pechos de una mujer dije ¡qué exquisito! —ladeó un poco su cabeza por aquel grito, siguió con el otro pie donde hizo exactamente lo mismo, alzo su mirada a donde él y vio que había puesto un brazo en sus ojos y las sabanas al frente tapándose así su desnudes.
Se levantó de los pieceros de la cama y caminó a paso lento hasta la cabecera –Marco – lo llamó, pero él no hizo ningún tipo de movimiento –tanto que no te gusta que te ignore y me estas ignorando ahora tu —solo recibió un gruñido de su parte lo que hizo que sonriera. Se acercó hasta su oreja y en un pequeño susurro le dijo -Solo estaba bromeando- Quitó su mano de su cara y la miró con ojos acusadores -¿entonces te gustó lo que ve viste? —Ella sonrió y asintió –sí, me gusto –él se levantó y tomo su bavarilla entre sus manos – ¡Mi pequeña malcriada! – le dijo lo que provocó que se riera abiertamente en su cara.
-¡Esas palabras la sentí como si me hubieran dado en las pelotas! –Abrió los ojos y puso una mano en su boca para callarlo -no entiendo tu afán de ser grosero.
-Así como yo no entiendo tus bromas mujer.
-Touché -dijo ya que la dejó sin palabras su afirmación —duerme –trató de retirase, pero su amarre se fortaleció – No mi señora, merezco un beso por tu agresión.
-Hace poco te besé, no puedo darte otro —le contestó.
-Tu dijiste que tengo un día de gracias, un día abarca mucho —era cierto su observación –También piensas decirme que mis besos no te gustaron—eso era algo que no podía engañarse, ni los pequeños besos fugases que se dio con Daniel le removieron todo su ser como los dados por Marco—tu sabes cuál es la repuesta a eso —vio cómo se encogía de hombro—contigo no sé a qué atenerme —ella abrió la boca sorprendida por sus palabras lo que a provecho para robarle un beso, estaba vez no tuvo la ternura inicial del primer beso compartido, la devoraba por completa, llevó sus manos hasta la parte de atrás de cuello donde las entrelazo, para disfrutar más el beso. Pero el bruscamente se, separo de ella –estos labios me pertenecen –le dijo teniendo su mejilla agarrada con su mano, para luego darle una lamida rápida, estaba tan aturdida por las acciones repentinas de él que no pensó mucho en las palabras que salieron de su boca - ¿Cuáles labios?
La sonrisa que él le dio hizo que cayera en cuenta que aquella pregunta podía malinterpretarse —por el momento tu boca, pero tenlo por seguro que más adelante serán los otros —lo empujó para alejarlo de ella, pero él solo se reía a carcajadas en la cama -¡que tonto! —le gritó mientras con la almohada lo golpeaba podía sentir como sus mejillas estaban enrojecida por la vergüenza.
-Tu preguntaste, yo solo contesté —le respondía entre risa mientras esquivaba su golpe –duerme —le dijo mientras salía rápidamente de la habitación, estando afuera se apoyó en la puerta que cerró de un golpe escuchando su risa ruidosa al fondo, sonrió y se llevó una mano en sus labios recordando el beso dado -¡no puedo ser, me esta gustado el patán de mi esposo! -dijo en un susurro y lo peor es que la idea no le desagrado al contario ¡Abigail! se había olvidado por completo que ella estaba en su cocina.
Ya estando en su concina, decidió disculparse por la situación que presencio –Abigail quería pedirte disculpa por lo que viste –vio como ella volteaba con unos huevos en las manos -Yo no vi nada de malo, malo hubiera sido si te hubiera encontrado con otro hombre, pero es tu esposo y ambos son jóvenes - le alegraba que Abigail no se ofendiera.
-Además tú y Marco, me recuerdan a mí y a mi difunto esposo, estos dolores de la cadera no es por la vejez –borró cualquier pensamiento que proyectara imagen sucia estando Abigail presente -¡Abigail no hable así!
-Solo digo la verdad niña, ten cuidado –ella movió sus manos para despejar los pensamientos y dudas que dejaban esa afirmación de Abigail y se concentró en ayudarla con el desayuno para luego cambiarse.
Hola mis amores espero que sea de su agrado 🤗 no olviden comentar y darle like 🥰 el próximo capítulo será largo y depronto veamos a la innombrable 🤢
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Amor En La Llanura
RomanceIsabel Thompson regresa de su temporada en Londres a Montana para casarse con su prometido, Daniel Crowl. Sin embargo, en el mismo día de su regreso, descubre que Daniel planea casarse con su prima Madison en lugar de con ella. Resulta que Madison h...