"Distance" Pt. 5

757 95 27
                                    

LS: ¿que tal? — preguntó saliendo del vestidor con el décimo vestido de la tarde — me gusta el color.

SH: te queda lindo — respondió con desinterés.

LS: dijiste lo mismo de los anteriores.

SH: porque todos se te ven lindos, Lisa — explicó rodando los ojos — podrías ponerte un costal de papas y seguirías viéndote bien, así que decide de una vez.

LS: ¿te gusta más el rojo o este? — insistió mirándose en el espejo.

SH:¿cuál te gusta más a ti?

LS: el rojo.

SH: entonces lleva ese — la pelinegra lo pensó algunos segundos antes de aceptar.

Así llevaban toda la tarde, entre una tienda y otra gracias a que la abuela de Lisa le envió una cantidad sorprendente de dinero sin razón aparente y, obviamente, la tailandesa consideró que era la oportunidad perfecta para renovar su guardarropa. Park no estaba acostumbrado a hacer compras, normalmente solo acompañaba a Yeosang y el rubio no era demasiado complicado, a diferencia de su amiga que le preguntaba hasta que color de medias comprar.

LS: bueno, ahora solo falta ir a mirar zapatos — avisó colgándose del brazo del peligris con emoción.

SH: ¿por qué no vas tu primero y yo te alcanzo? — sugirió deteniéndose — todavía tengo que comprar la corbata y quiero llevarle dulces a Sang.

LS: está bien, avisame cuando termines — aceptó retomando su camino.

Seonghwa se apresuró a la tienda en la que su hermano solía comprar las corbatas y eligió la primera que vio del color que Hyunwoo necesitaba, estaba cansado de seguir a Lisa pero tampoco iba a dejarla mucho tiempo sola. Después de pagar la corbata se dirigió a la dulceria y tomó dos bolsas de gomitas para su rubio, mientras hacía la fila una sonrisa se formó en su rostro con sólo pensar lo emocionado que este se pondría por el pequeño detalle, lastimosamente su felicidad se vio interrumpida por una presencia bastante indeseada para él.

MH: Park Seonghwa, que sorpresa, cuanto tiempo sin verte — rió deteniéndose junto al peligris.

SH: si, desde que te partí la cara por decir estupideces de mi novio — le recordó a la defensiva.

MH: escucha, tuve suficiente con la golpiza que Daniel me dió, estoy arrepentido.

SH: si, bueno, ¿ya me dejas en paz? — pidió intentando no perder la calma.

MH: ¿todavía sigues con las tontas gomitas? — se burló mirando las bolsas — ¿no te da pena darle una cosa así a un chico como Yeosang?

SH: ¿un chico como Yeosang?

MH: ya sabes, una persona que nació en cuna de oro merece lo mejor — explicó con fingido desinterés — algo como esto, por ejemplo.

Seonghwa dirigió su mirada a la caja de chocolates que el otro sostenía, él conocía esa marca porque eran los que Byul solía comprarle a Solar en su cumpleaños, carisimos, finos y, por mucho, fuera de su poder adquisitivo. Era cierto que los negocios de Seojoong iban bien, pero aún no lograba la estabilidad económica y mucho menos la posición que solían tener antes de la millonaria estafa, por lo que tanto él como Hyunwoo debían ser bastante cuidadosos con sus gastos y él ya había gastado más de lo que se suponía solo con la corbata de su hermano, gracias a que se negó cuando Yeosang quiso comprarla.

SH: ¿por qué no dejas de joder? — preguntó rodando los ojos.

MH: una vez, cuando fingí ser el novio de Sang — empezó a contar con un deje de burla en su voz — le regalé una caja más grande que esta y te juró que nunca lo vi sonreír de esa forma antes, le brillaban los ojitos.

This Sh*t Isn't What You've Been Looking For || ATEEZ || pt.IVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora