Capitulo 27

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Darren

Bajo del auto sosteniendo la bolsa con el desayuno que compre para Alice. Estoy intentando controlarme para no actuar con impulsividad, en este momento debo tener mas paciencia que nunca, anoche Devon me ayudo a tranquilizarme haciéndome entender que lo mejor es darle su espacio para no quedarme esperando una llamada que no llego.

No logre dormir recordando la amenaza de Iván Thompson, la tengo clavada en la mente. Fue simple e indiferente, pero lo suficientemente claro para mí.

«Tienes futuro, Darren Holt, pero no eres lo que necesito para mi hija. Si sabes lo que te conviene, mantente alejado de Alice y te ayudare a lograr lo que quieras».

Quise decirle muchas cosas, no lo hice, ya sabía mi nombre y quizás toda la información de mi vida que necesita para asegurar que no soy alguien que desee para crear un futuro junto a ella, pero no es lo que él quiera, es lo que Alice decida y ella me quiere a su lado. Tenemos un futuro planeado, podemos luchar juntos contra él, mi padre y el que se nos interponga. No dejare ir a mi ángel con tanta facilidad mucho menos porque otro me lo pida, asi sea su padre.

—Me duele la cabeza de pensar en el examen a esta hora, mi mente aún no se despierta, ¿como no puede entender eso ese profesor? —Se queja Devon a mi lado, pongo los ojos en blanco fastidiado, no necesito sus quejas ahora.

Apenas tocamos, Hendrik abre la puerta intentando actuar con normalidad, sin embargo, el aire sombrío en el que se encuentra sumergido el lugar solo me tensa más. Algo no va bien. Lo confirmo cuando Alice aparece con exceso de maquillaje en el rostro y una sonrisa en sus labios forzada, como si le costara mantenerla.

—Te traje desayuno —Le informo, Hendrik no me saluda palmeando mi hombro como acostumbra ni Alice muestra alguna emoción por comer, solo asiente evitando mi mirada, a mi lado Devon parece igual de tenso que yo y sospechando lo peor.

—Lo dejaré para después, ya comí algo —dice—. ¿Nos vamos? Llegaremos tarde.

Hendrik es el primero en salir seguido de Devon, Alice intenta seguirlos y la detengo tirando de tu brazo. No le voy a decir nada sobre la amenaza de su padre, porque no le tengo miedo, se que ella si le tiene aunque no lo admita, por esa razón es que hace todo lo que le han impuesto sin cuestionarlo, se puede pensar que es la razón por la que también hago lo que Ralph ha dispuesto para mí, pero no, en mi caso es interés, un medio para conseguir un fin. Si ella pudiera elegir, estaría en Austin con su madre, no aquí.

—¿Esta todo bien, ángel? Me quedé esperando tu llamada anoche.

Sigue sin mirarme a los ojos, asiente manteniéndose en un silencio que no me agrada, el cambio en su comportamiento se nota, algo la tiene preocupada y triste, relacionado con su padre. La acerco para abrazarla, quisiera quitarme esta puta sensación de que no estoy viendo algo y que me la van a arrebatar si me dejo.

Iván no va a poder lograrlo, no todo se reduce al dinero ni una posición social, Alice quiere estar conmigo tanto como yo quiero estar con ella. Debo ver esto como solo un pequeño obstáculo que vamos a superar juntos, no dejare que su padre gane.

—Sabes que puedes contar conmigo, ¿no? No dejaré que te hagan daño. Se que aún no es mucho lo que te puedo ofrecer, pero lo podemos resolver.

—Estoy bien, todo esta bien —Me miente, se pone de puntillas dejando un casto y rápido beso en mis labios intentando convencerme.

La sigo sin decirle nada hasta el exterior del apartamento donde nos esperan Devon y Hendrik conversando entre susurros, tampoco emito palabras cuando nos subimos al auto, donde por primera vez el camino está lleno de silencio, sigo sin hacer el intento al ser la primera en entregar la hoja del examen y salir corriendo del salón.

ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora