Darren
No dormí nada, no comí bien, rechace la indirecta de Astrid de querer verme, todo perdió la importancia desde que llego el día de poder pasar un día entero con mi hijo, mi humor es el mejor que he tenido en años.
Planifique todo para que no olvide este día juntos, el primero de muchos. Dónde tengo a Drogon es un lugar pequeño, comparado con el rancho que era de mi padre, lo vendi apenas me lo entregaron con la herencia que me dejo, necesitaba deshacerme de todo lo que me uniera a Houston y eso hice, a Drogon no lo podía dejar, así que me lo traje lo más cerca que pude dándole el espacio que necesita, aunque no lo visito con tanta frecuencia como antes, tengo a alguien que se encarga de su cuidado, mi caballo es lo único bueno que me quedo de mi padre.
El servicio me abre la puerta, guiándome a una amplia sala para que espere, tomo asiento en uno de los sillones más comodos en los que he puesto mi puto culo en toda la vida. No había venido a su casa antes, ni sabia donde vivian, me sorprendió la dirección cuando Alice me la envio anoche por un mensaje y aún más cuando llegue, es una enorme mansión de lujo moderna.
Mi hijo ha vivido rodeado de lujos y comodidades, eso no se puede negar, lo han sabido cuidar y darle el cariño que por lo menos yo solo tuve por unos años de Marietta, antes de que me abandonara y Ralph hiciera de mi vida un infierno, él nunca fue cariñoso, sin embargo, tampoco violento como hasta ese momento.
—Darren —Me pongo de pie, Isaac me saluda con un asentimiento de cabeza que le correspondo, viene con Milán cargado entre sus brazos que se mantiene en silencio cargando de tensión el ambiente—. Saluda, Milán.
Mi hijo intercambia una mirada con Isaac, solo cuando este asiente es que posa sus ojos acero como los de su madre en mi.
—Hola. Mi mami me dijo que nos llevaras a conocer a tu caballo.
—Asi es, se llama Drogon.
Se queda en silencio de nuevo, la emoción mezclada con los nervios no me dejan pensar con claridad en como comportarme, la sensación de que soy un intruso en su vida por como busca la mirada de Isaac en todo momento me envenena.
—¿Por que tú no vienes con nosotros, papi? —Le pregunta frunciendo el ceño, Isaac besa su frente.
No noto incomodidad en él, parece que también está aceptando finalmente que soy el padre de Milán, no él.
—Porque iré a visitar a la abuela Christine, y recuerda que mañana iremos a pasar el dia con ella todos juntos.
—Pero, mi papi también puede venir, ¿no?
Está vez me mira a mi, su expresión está tan llena de tristeza que siento la punzada en el pecho, ¿Todo porque Isaac no irá con nosotros?
Paciencia.
—Muñequito, papá estará ocupado, yo estaré contigo, ¿Eso no es suficiente para ti? —interviene Alice, entrando a la sala dejandome sin respiración por lo bonita que se ve.
Tan parecida a mi ángel.
Viste como aquella vez que la lleve al rancho, trae un vestido suelto sencillo con zapatos deportivos blancos. Verla asi es como tener un flashback de unos años atrás.
—Si, pero yo quiero a papá, siempre vamos juntos —Se queja, aferrándose al cuello de Isaac con sus brazos.
Hace un puchero y parece que ya va a llorar, por unos segundos noto la misma mirada en Isaac, los ojos húmedos por las lágrimas contenidas.
Espero que esto mejore, no quiero tener que estar pasando por esta situación cada vez que venga por él, tiene que entender que su padre soy yo, por mucho que lo haya criado Isaac estos cinco años.
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Obsesión
RomansaNunca imaginé que un amor tan bonito se convertiría en una obsesión. A veces solo me pregunto ¿Que no vi?, ¿Como no lo noté? Su amor solo nos causo dolor. ----------------------------------------‐------------------------------------------ Esta hist...