Capítulo 43

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Narra Alesandro

Jugaba con mis dedos por debajo de la mesa mientras mordía mi labio inferior.
Desde que entramos, me sentía inquieto, quería salir de ahí lo antes posible.

── Alesandro, deja de estar nervioso.

── Oliver, esto sinceramente no me trae buenos recuerdos, aquí fui sincero con lo que siento por ti, rompiste mi corazón y me dejaste aquí solo. Ahora estamos bien, sí, sé que me quieres porque me lo has demostrado, pero este lugar ya no me gusta.

── Sé que no es excusa, pero en ese momento rompí tu corazón porque estaba confuso, no podía aceptarte porque esto es nuevo para mí y tenía miedo ──Como estaba sentado a mi lado, dejó su mano en mi muslo── Siento haberte roto el corazón, pero en ese momento no podía decirte que me gustas porque no sabía lo que sentía. Ahora, sentados aquí, en la misma mesa que me confesaste lo que sientes por mí, yo te digo que estoy perdidamente enamorado de ti. Te amo Alesandro.

Nos quedamos mirando hasta que sonreí. Tomé su mano y entrelacé sus dedos con los míos.

── Gracias por decirme esto, yo también te amo.

Apoyó su codo en la mesa y acercó su cara a la mía.

── ¿Qué tal un beso? ──Preguntó sonriendo.

── Que sean dos ──terminé de acercarme y lo besé. Sonrió en medio del beso.

Finalmente, terminé más tranquilo y pudimos cenar y conversar bien.
Luego de pagó, salimos.
Lo miré sonriendo cuando entrelazó nuestros dedos.

── Putos maricones ──Dijo un chico al pasar por nuestro lado junto con varios más, todos se rieron.
Oliver detuvo su paso, se giró hacia ellos y luego miró a todas partes.
Cuando solté su mano, me miró con el ceño fruncido.

── ¿Qué coño haces?

── Te da vergüenza que nos vean cogidos de la mano, ¿no? Por eso miras a todas partes.

── Miraba a todas partes porque estaba buscando una piedra para lanzársela a ese homofóbico de mierda. Cuando acepté lo que siento por ti, sabía que me tendría que enfrentar a situaciones como estas, y aún así decidí dar el paso de estar contigo porque te quiero, y eso es más importante que todo lo demás. Además, si me avergonzora estar contigo, sería muy bajo de tu parte soportar algo así. Eres un idiota.

Caminó delante.

── Oliver ──Corrí hasta llegar a su lado── Lo siento, no debí suponer tal cosa.

── No debiste, pero lo hiciste.

── Bebé, lo siento, perdóname por favor ──Cuando intenté tomar su mano, se separó de mí y me miró enojado.
Decidí dejarlo tranquilo, no quería que se enojara más.

Al llegar a casa, fue a su habitación y se puso el pijama. Salió de ahí con varios libros y con una sudadera que no era mía.

── Oliver ──Me interrumpió:

── Voy a estudiar porque la semana que viene son los exámenes finales. Esta vez no puedo suspender ninguna materia, te agradecería que no me hablaras.

Asentí. El anterior trimestre le quedaron dos materias, si vuelve a pasar lo mismo, lo tendría muy complicado.
Decidí coger mi ordenador, me senté en frente suyo y comprobé mi agenda de trabajo. Luego de mandar un correo al director del hospital solicitando una semana de vacaciones a partir del sábado siguiente, me puse a mirar los billetes para viajar a Alemania. Sabía que no me negarían esos días de vacaciones porque todavía no había cogido las vacaciones que me tocaban. Oliver saldría de vacaciones el viernes y podríamos irnos el sábado en la mañana para llegar allí en la tarde.
Reservé los billetes y luego apagué el ordenador.

── Buenas noches ──Dije.

── Buenas noches ──se despidió sin siquiera mirarme.
Tenía difícil que me perdonara por mi jodida metedura de pata.

Desperté para hacer pis. El lado de Oliver seguía igual, no se había acostado todavía, y eran más de la cuatro de la mañana.
Luego de hacer pis y lavar mis manos, fui al salón. El pobre se había quedado dormido encima de su libro.
Levanté su cara con cuidado y luego le quité la hoja del libro de la cara, que se le había quedado pegada.
Nada más levantarlo, pasó su brazo por mi cuello.

── Estoy enojado contigo ──Susurró.

── Lo sé.

Lo tumbé en su lado de la cama y lo tapé.
Me tumbé a su lado quedando de frente hacia él. Se había dormido.
Acaricié su mejilla lentamente.
Quería abrazarlo, pero estaba enojado conmigo y yo tenía que respetar eso.

Cuando desperté, eran las diez de la mañana y él no estaba en la cama.
Cepillé mis dientes y salí, no lo encontré por la casa.
Cogí mi móvil para llamarlo, entonces ví el mensaje que me había enviado a las nueve.

Estoy en la biblioteca con los chicos, mañana tenemos que entregar el trabajo final. Aprovecharé para estudiar unas horas. No sé cuándo llegaré a casa.

Le respondí un "está bien" y salí de la conversación.
Aún está enojado conmigo.

Narra Oliver

Eran las dos cuando decidimos tomar un descanso para salir a comer. Hannah también estaba con nosotros, siempre intentamos hacer los trabajos en grupo, nos conocemos y así es más fácil. Además, con Callum ahora somos cuatro.

── ¿Ese no es Jeffrey? ──Pregunté sorprendido. Ellos miraron donde yo estaba mirando. Jeffrey se encontraba sentado en un banco cerca de la entrada de la biblioteca. Callum frunció el ceño── ¿Le pediste que viniera?

── Por supuesto que no.

Nos acercamos a él.

── Jeffrey ──se puso de pié── ¿Qué haces aquí?

── Hace rato cuando hablamos, dijiste que tenías hambre, así que te he traído comida ──Levantó una bolsa para que la viera.

── Bueno, no sé yo ──Habló Patrick── Pero como que hay amor en el aire ──Hannah le dió un codazo, Callum lo miró con el ceño fruncido, Jeffrey continuó con su sonrisa y yo me reí.

── Entonces nosotros tres vamos a comer a la cafetería ──Dijo Hannah── Quedamos aquí a las tres, ¿de acuerdo? ──Callum asintió.

Una vez en la cafetería, nos sentamos en una mesa después de comer.

── ¿Qué harás en las vacaciones de Semana Santa? ──Preguntó ella.

── Alesandro y yo iremos a Alemania.

── ¿En serio? Que pasada, ahora verás a los padres de Alesandro siendo ustedes novios.

Tragué en seco, no había pensado en eso. Ahora estaré con ellos pero siendo novio de Alesandro.

Aceptando lo que sentimos (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora