Tú mi destino ~ Marcos Llorente

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Miro a Marcos que toma la bota entre sus manos.

— la rosada es linda — dice mirando los colores.

— negra — asiente y pide la negra en mi talla y el mismo color de tobillera ortopédica.

Habíamos comprado los medicamentos, bueno, enrealidad solo los pedimos ya que todo era cargado al seguro médico.

El chico que atendía se acerca y me pone la bota mientras me explica como ponerla con cuidado y también de como poner adecuadamente la tobillera, aunque eso se lo termina explicando más a Marcos que a mi.

— que fastidio — digo y el me mira — tener que usar esta cosa por dos semanas.

— alégrate, tienes una de licencia médica.

— me aburrire y me atrasare mucho con las materias — me quejo.

— lo decía por tu trabajo.

— oh, si. En ese caso lo agradezco, tendré que ir a dejar el papel medico mañana.

— yo lo llevo — dice tomándome por sorpresa.

— no tienes que hacer eso.

— evitar cargar el pie, eso dijo el doctor por eso te dio una semana, no importa que tengas la bota. Luego puedes quedar con el tobillo resentido, es grado dos Elisa. — dice sonando más como regaño — yo dejaré el papel médico en tu trabajo, me queda de pasada y también en tu universidad.

— oye no puedes andar así por la vida... digo, por los lugares los  que yo suelo ir. Todos.... — me interrumpe de la nada

— somos novios, se supone y además.... ya todos lo saben. Por las fotos.

El resto del camino me recordó las cosas que no debia de hacer hasta que llegamos a mi casa.

— oye lo digo de verdad — me mira — evita cargar mucho el pie recuerda que para eso es la bota — asiento y tomo mi maleta con la mochila ya puesta en mi espalda.

— te ayudo? — niego y lo miro.

— gracias por todo, de verdad me divertí mucho.... a pesar de todo — digo señalando mi pie y el rie.

— cuidate y puedes llamarme cualquier cosa — se acerca y besa mi mejilla tomándome por sorpresa.

— vale, nos vemos — empujó la puerta y camino torpemente por el patio con la bota puesta.

Abro la puerta de casa y veo como mis padres y mi hermana se alejan de la ventana.

— es enserió!? — digo enfadada — ya se están pareciendo a los vecinos — digo haciendo referencia a mis vecinos que eran muy mirones.

— como crees — ríe mamá

— que te paso? — mi papá se acerca y me ayuda a quitarme la pequeña mochila.

— esguince grado dos, una semana de licencia médica — digo dejando la carpeta sobre la mesa de centro y mi hermana la toma de inmediato.

— los niños? — pregunto.

— Kiara duerme y Martin jugando con los vecinos en su casa — asiento ante lo que mi madre dice.

— que has hecho, que te a pasado esto?

— pues... hicimos trekking y pise mal sin ver una piedra, estamos un poco de subida y me doble el pie cayendo con todo mi peso sobre el.

— has ido ya al hospital — asiento ante la pregunta de mi padre y cuando tomó asiento mi madre me da un vaso con agua.