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Miro hacia el campo y agitó mi mano cuando Marcos mira en nuestra dirección y lanza un beso.

— es para ti — dice Martin que esta entre mis brazos y también agitaba su mano.

— si — digo entre risas y veo como Marcos habla con uno de una mujer que llevaba una chaqueta del equipo y luego sale del campo.

— te ha gustado? — Martin asiente emocionado y me abraza.

— muchisisisimoooo — dice y besa mi mejilla.

— ahora puedes contarle a tu amigos que viste un clásico y ganó el atlético — ríe mi padre.

Papá y Martin aprovecharon  para tomarse unas cuantas fotos más y en eso llega la mujer con la que Marcos había hablado antes.

— hola, elisa? — asiento cuando ella entra al palco.

— soy Teresa encargada de la seguridad del estadio, Marcos me a pedidos que los lleve hasta la parte donde están los camerinos.

— ahm.... vale.

— acompañenme.

Le hago una seña a papá y el toma la mano de Martin para comenzar a seguir a la mujer.

— tu primera vez aquí? — le pregunta a Martin cuando subimos al elevador y el asiente tímido.

— el es mi sobrino y el mi padre — los señaló — es la primera vez de Martin en el estadio — sonrió.

— te ha gustado? — le pregunta.

No llevaba la cuenta de cuantas veces en el día le había hecho esa pregunta pero sabía que habían sido muchas, quería asegurarme que se lo estuviera disfrutando mucho.

— mucho! — dice emocionado y esta vez con más confianza.

— por aquí — dice cuando las puertas del elevador se abren.

A la distancia veo a Marcos hablando con otro jugador mientras bebe una botella de agua.

Miro hacia mi derecha y más a la distancia veo el emblemático túnel que daba hacia el campo.

— Marcos! — dice Martin y choca los cinco con él sonriendo. Estrecha la mano con mi padre y luego se acerca a mi.

— buen partido — le susurro y el deja un corto beso sobre mis labios.

— gracias — sonríe y voltea a mirar a Martin. — quieres ver a los jugadores?

Martin abre sus ojos muy grandes y asiente repetidas veces.

Marcos toma su mano y entran juntos al camerino mientras con mi padre nos quedamos afuera esperando a que vuelvan y en unos cuantos minutos ya están fuera y Martin lleva una camiseta entre sus manos.

— que tres ahí? — le dice mi padre.

— me esperas aquí o se van?

Miro a mi padre y el se encoje de hombros.

— te esperamos — digo y el asiente y se va rápido al camerino.

Miro la camiseta que Martin tenía entre sus manos, era la del dorsal de Marcos y estaba firmada por todo el plantel.

— me la ha dado Marcos y la han firmado todos, el me tomo fotos — dice emocionado y mi padre le pone la camiseta a pensar de que le quedará enorme.

Nos quedamos un rato dando vueltas por las partes accesibles del estadio y mi padre aprovechaba de tomarme foto a cada rincón sin importarle que fuera un simple letrero.

Me tomo una selfie junto a Martin cuando entra una llamada de Marcos y corta enseguida.

Marcos.

Tú mi destino ~ Marcos LlorenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora