por qué somos muy machos! | Human Huevocartoon | (EN EDICIÓN)

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Al llegar al local, Chema se sorprendió bastante del bar tan fino que había elegido su compadre para llevarlo, no pudo evitar sentir su corazón latir con fuerza en el trayecto a su mesa, aunque no sabía por qué si corazón latía tanto, tal vez estaba nervioso por el lugar, nunca había estado en un lugar así de elegante, pero, por otro lado, tal vez su corazón latía por qué era su gran amigo el que había elegido ese lugar para estar con él y no con una bella dama, una idea que lo hacía sentir extraño, pero que muy en el fondo, no le parecía para nada desagradable.

-Bueno compadre, ¿Qué le parece el lugarcito?- Preguntó Chava.

-Pues está bonito... muy... elegante-.

-¿Le gusta compadre?, Tenía ganas de traerlo desde que supe que esté lugar existía-.

Chema paso saliva y sus mejillas se pusieron un poco rojas ante el comentario -Pues... Muchas gracias por pensar en mi compadre...-.

No pasó mucho tiempo para cuando ya tenían una botella de tequila en la mesa y unos cuantos aperitivos para pasar el rato, sin embargo, Chava quería saber sobre qué había pasado con Lencha y su compadre, pero no encontraba las palabras para abrir la conversación, así que tomó un shot de tequila y se armó de valor para preguntar.

-Oiga compadre, y a todo esto, ¿Me va a explicar que argüende trae usted con la Lencha?-.

Chema se quedó mudo por unos instantes, un poco anonadado al recordar lo que había sucedido, pero por más que quisiera no hablarlo, a la vez se sentía en confianza para expresarse un poco.

-Pues verá...- comenzó a decir Chema -Con la Lencha hay un pequeño problema, ¿Recuerda usted... pues... el día que fue suplente de la actriz de María Hueverta?-.

-Si compadre, ese episodio se estrenó hoy en televisión, ¿No?-.

-Exactamente, compadre, y ese fue el problema, a la Lencha no le gustó mucho... pues... ya sabe... l-la escenita en donde usted y yo...-.

-¡Ah¡- en ese momento Chava comprendió toda la situación y comenzó a ponerse nervioso al momento de hablar de esa escena del beso entre Huector Manuel y María Hueverta -Caray...no me acordaba compadre- mentira -¿Qué le dijo la Lencha de eso?-!

-Se puso como el diablo mismo, compadre, no le pareció nada la escena, primero no le gustó por qué ella pensaba que yo estaba besando a otra muchacha-.

-Y después compadre-.

-Pues... pues después se dio cuenta de que no era una muchacha- hizo una pausa mientras se encogía un poco -Se dio cuenta de que era usted compadre- dijo un poco apenado por la situación.

Chava se encontraba anonadado, no sabía qué decir ante la situación, así que tomó otro trago de tequila -Caray, así que por eso hizo todo el disparate...-.

-Así es compadre, y después de poner la casa patas pa'rriba, que agarra las llaves y se lleva la camioneta al rancho, me dijo que se iba a casa de su mamá-.

-Nombre compadre, y con eso de que no le cae bien a su suegra, así merito le va a ir como vuelva a pisar la casa de sus suegros-.

-Pues ya sé compadre, por eso y por muchas otras cosas yo no quiero pisar esa casa, pero Lencha insiste en que vayamos a comer con ellos todas las semanas, ya le dije que yo a su mamá nomás no le caigo y que un día de estos me va a andar envenenando la comida-.

-¿Apoco si compadre?-.

-Que sí, le digo, yo ya no sé qué hacer en esta situación compadre-.

-No se apure compadre, pronto se va a solucionar, en lo mientras, chúpele-.

-Ora compadre, si estamos hablando tranquilos-.

-Que le chupe al tequila-.

-A bueno, pues va-.

Después de eso ambos siguieron tomando, Chema tomaba para olvidar el mal momento que vivió ese mismo día y Chava lo acompañaba, y siguieron así botella tras botella, después de todo, ahora eran bastante ricos y podían darse ese lujo.