La Hermana de Eri-chan (Bakugo)

Capítulo 11

Desperté a las 10 am. Era domingo. Los rayos del sol atravesaban mi ventana y creaban un ambiente cálido en mi habitación. Hoy decidí levantarme rápidamente y ordenar mi cuarto. Tenía pensado hablar con Aizawa-sensei porque quería saber si era posible efectuar el plan que rondaba por mi mente desde hace un par de días. Me dirigí rápidamente hacia donde me había indicado Todoroki que Aizawa-sensei podría estar. Toque la puerta un par de veces y escuché un leve "adelante" a través de la puerta. La abrí para encontrar a un sensei cansado, sin embargo, parecía dispuesto a escucharme.

Tn: Buenos días Aizawa-sensei. - simplemente asintió con la cabeza esperando a que continuara hablando. - quería preguntar si podría salir a la ciudad... - dije tímidamente.

La verdad no sabría si podría. Sato salió sin problema a hacer compras a la ciudad. Yo también quería disfrutar el día de hoy paseando y relajándome fuera de la UA.

Aizawa-sensei me miró durante unos segundos y luego rebuscó algo en uno de los cajones de su habitación. Sacó un trozo de plástico y me lo entregó.

Tn: ¿Qué es esto? - pregunté extrañada. Existía la posibilidad de que estuviera tan cansado que no me hubiera escuchado bien. Sin embargo Aizawa-sensei me explicó.

Aizawa: Es tu tarjeta de crédito. Para que compres cosas. La UA le ha ingresado unos... ¿300 dólares?
Aproximadamente... Cada mes se renovarán. Es para que compres cosas que quieras o necesites. La contraseña es 1606. Los primeros dos dígitos son tú edad. Y los dos últimos los de Eri. El director pensó que así te resultaría más fácil recordarlo.

⚠️ (Elegí usar esa forma económica, pues creo que la gran mayoría conoce su valor. Si no es así, se puede buscar en Google al respecto. Para aclarar, ni siquiera es mi moneda 😅)

Me quedé perpleja. En verdad no lo esperaba, pero ahora estaba más emocionada.

Aizawa-sensei: Sin embargo... preferiría que las primeras veces que salieras de la UA estuvieras acompañada por si pasa algo.

Entendí a qué se refería. Sí pretendía salir a la ciudad, debía convencer a alguno de mis compañeros para que viniera conmigo. Le agradecí al sensei y me despedí. Salí de su habitación, y me dirigí a la sala común. Seguro que allí habría alguien a quien preguntar.

Al ser domingo, la gran mayoría de los compañeros habrían ido a visitar a sus familiares, si no lo habían hecho el sábado. Otros estudiaban o entrenaban. Sin embargo yo tenía otros planes. Si era necesario pensaba ponerme de rodillas y suplicar que me acompañaran. Cuando llegué, mis ojos recorrieron la sala hasta toparse con una cabellera verde brócoli. No lo dudé mucho y me acerqué a él.

Tn: ¡Midoriya-kun! ¿Puedo pedirte un favor?

Midoriya: ¿Ah? Tn-chan, claro, sin problema. ¿Qué necesitas? - dijo con su sonrisa. Era tan dulce que si fuera posible a cualquiera le daría diabetes.

Tn: Verás... yo quería ir a la cuidad, a pasear y esas cosas... pero Aizawa-sensei me ha dicho que no puedo ir yo sola. Ya sabes... por precaución. Así que quería saber si podrías acompañarme.

Midoriya: Si, claro. No tenía nada que hacer hoy. Voy a mi cuarto un momento, bajo en diez minutos y entonces podremos ir. - dijo mientras se disponía a subir hasta su habitación.
Mientras esperaba, pensé que sería grandioso invitar a otra persona más. Después de todo, cuántos más, mejor ¿no?

Diez minutos después, en la sala común...

Midoriya: Ya estoy listo.- decía cargando una pequeña mochila a su espalda. - ¿Ah? ¿Uraraka? ¿Tú también vienes? - Uraraka asintió con la cabeza.

Tn: La llamé hace unos minutos y también le emocionó la idea. Espero que no te moleste. - dije, a pesar de que sabía que le agradaría. La química entre estos dos se ve a kilómetros. Seguro que algún día serán una linda pareja.

Midoriya: No, no te preocupes. No pasa nada. Entonces vámonos ya. - dijo. Acto seguido los tres nos dirigimos al centro de la ciudad.

Fue un día maravilloso. Fuimos a tiendas de ropa, hasta convencimos a Midoriya para hacer de modelo. A Uraraka le encantó, lo vi en su mirada. Pasamos a una tienda de batidos, donde elegí uno de fresa, Uraraka de cereza, e Izuku de limón.

También vimos una tienda donde vendían decoraciones. Me llamaban la atención, algún día decoraría mejor mi habitación. Mientras caminábamos por las calles, de tienda en tienda, me paré en un escaparate. Izuku y Ochako seguían caminando y hablando. No sé dieron cuenta de que me detuve. Entré rápido a la tienda y compré lo que tanto me había llamado la atención. Al salir de la tienda escuché unos gritos.

Uraraka: ¡Tn-chan! ¿A dónde habías ido? - al girar para mirar al lugar de donde provenía la voz, podía ver a mis dos amigos corriendo hacia mi con cara de preocupación.

Tn: Lo siento, me quedé mirando un escaparate. - me disculpé.

Midoriya: Se supone que te teníamos que acompañar y te hemos perdido de vista... - dijo Izuku por lo bajo.

Tn: Tranquilos, no ha pasado nada grave.

Después de ese "susto" que les ocasioné, decidimos volver a la academia. Después de todo, el día estaba llegando a su fin.
Más tarde en mi habitación, decidí sacar de mi mochila lo que había comprado... y empecé a escribir.

"Hola. Diario. Hoy ha sido un día excelente. La pasé muy bien con mis amigos Izuku y Ochako mientras disfrutábamos del ambiente urbano. Aunque al final del día se asustaron porque creían que había desaparecido. Y todo por comprarte a ti. ¿Vaya cosas no? Aunque es cierto que ese día acabo con un susto, espero que algún día podamos reírnos los tres de ello. Y espero que para ese entonces, esos dos ya sean una pareja oficial. Bueno, lo lamento, pero por hoy no te podré contar más. Debo ir a estudiar, y luego descansaré. Mañana hay que volver a la nueva rutina. Hasta pronto"

Continuará...

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Gracias por llegar hasta aquí, espero poder actualizarla pronto :)