»Capítulo 81«

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Veintidós de septiembre de 2024.

-Sólo no hagas ruido -comenta la madre mientras sostiene los globos y Stephen mira de reojo a Wong, reteniendo la carcajada-. Shh, Stephen.

-Es que es inevitable -expresa el padre del niño mientras mira al asiático una vez más y ríe con los dientes apretados-. Wong, ¿por qué aceptaste esto?

-Perdí una apuesta con el niño, ¿okay? -al decir eso, Stephen por poco presiona la nariz de payaso que traía el hechicero supremo, pero Wong lo detiene y simplemente frunce el ceño-. Compórtate, Strange.

-Es que no me queda claro como un niño de cinco...

-Seis -le corrige su novia mientras se asoma por el pasillo, implorando que el niño no se hubiera despertado.

-Seis años -continúa Stephen y entonces prosiguió- te haya ganado una apuesta.

-Es un genio con la cultura general, tienes que empezar a darte una idea. Incluso creo que podría tener una fresca y más...jovial memoria fotográfica -al dar esa explicación, en vez de indignar a Stephen, en realidad lo enorgullecía y palmeó el hombro del hechicero supremo con una astuta sonrisa.

-¿Y de quién crees que lo heredó?

-Oigan, señores, deben concentrarse. Estamos intentando algo, así que deben enfocarse o juro que si arruinan esta sorpresa les haré la vida imposible.

Wong arquea la ceja y luego le susurra a Stephen.

-Creo que eso de hacer la vida imposible no es algo de su estilo, ¿o si? -pregunta con duda y Stephen presiona los labios mientras mira que su novia comienza a andar de puntillas con los globos y los alentaba a seguirla.

-Bueno, no la conoces tanto como crees. Puede ser cruel aun teniendo a tus sobrinas en ese vientre -expresa y aquello deja pensando un tanto al asiático y al final simplemente se encaminan hacia la habitación del niño.

Cuando llegan, Evangeline se asoma delicadamente y entonces hace señales para que guarden silencio. Entran cuidadosamente por el lugar, como si fueran gatos sigilosos que se escabullían por los rincones y finalmente la capa de levitación se encarga de sostener los globos a la vez que Wong camina por el otro lado mientras se acomoda el ridículo traje de payaso. Stephen estaba a punto de estallar de carcajadas cuando se le ocurrió un chiste bastante negro, pero sólo se acalla cuando ve los ojos brillantes de su novia dirigiéndose fijamente al niño que estaba hecho ovillo en la cama.

-Cedric -le cantorrea Evangeline con dulzura y acaricia su hombro-. Mi amor, despierta.

-Cinco minutos más, mami -se queja el niño mientras se aferra a su almohada-. Prometo despertarme y ponerme los zapatos.

Evangeline suelta una risita y entonces le acaricia con delicadeza los cabellos.

-Pero hoy no irás a la escuela, amor.

El niño se talla los ojos y después alza la cabecita, preguntando a continuación con los ojos cerrados.

-¿No?

-No, Vice -le dice su padre y esta vez causa que el niño abra sus ojos.

En cuanto lo hace, Wong salta con un entusiasmo que sólo utilizaba con su sobrino y el niño soltó una risa mientras el mismísimo hechicero supremo (pero considera sólo el tío Wong para él) comenzaba a cantarle junto a sus padres la canción del feliz cumpleaños.

𝐅𝐚𝐥𝐥 𝐢𝐧𝐭𝐨 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐔𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞 [𝐃𝐫. 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora