𝐅𝐚𝐥𝐥 𝐢𝐧𝐭𝐨 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐔𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞 [𝐃𝐫. 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞]

»Capítulo 89«

Capítulo dedicado a Shareny_mc

Capítulo largo ambientado en Doctor Strange y el Multiverso de la Locura.

Evangeline Strange se alzó un poco, tomando un poco de aire disimuladamente hasta que mira su alrededor y se da cuenta de que está en su habitación, comenzando un nuevo día. Y mientras eso ocurría, sólo ve a Stephen dormir plácidamente a su lado. 

Necesita un poco de aire, así que se aleja un poco, se alza del colchón con las piernas firmes, pero temblándoles por una extraña razón. Y antes de que pudiera abrir al menos alguna ventana o salir al pasillo, puede escuchar el grito de pánico de su esposo, el cual se sienta sobre la cama a la vez que se lleva las manos al rostro.

—Ey, ey, Stephen —le llama mientras corre hacia él, inclinándose hasta que se arrodilla sobre el colchón y gatea hacia el hechicero.

Y mientras lo ve mirar su alrededor, respirando con el pecho subiendo y bajando debido a la agitación, su reacción es llevar su mano hacia la mejilla de él, ayudándolo a poder tranquilizarse.

—Todo está bien, ¿si? Una pesadilla, sólo fue eso.

Stephen asiente unos instantes, después guía su mano hacia la de Evangeline, justo aquella que le sostiene el rostro y sólo se precipita a tragar saliva mientras parpadea varias veces.

—¿Estás mejor?

—Si. Si, si, es que... —disimula volver a tragar saliva y entonces prosigue— no sé, fue...fue realmente extraño.

—¿Quieres contarme, Stephen? —le pregunta y él está a punto de entreabrir los labios, listo para contestarle a la castaña, pero simplemente es interrumpido cuando escucha la puerta que se abre y observa que su hijo está llegando con un veloz andar que causa que ambos padres lo volteen a ver.

—Mami, Sarina está despierta, pero Zeira parece un tronco. No deja de llorar —se queja el niño con cierta preocupación e irritación, por lo tanto, Evangeline ladea la cabeza y se alza cuidadosamente de la cama.

—¿Está bien si...?

—Ahora te alcanzo —le interrumpe el hechicero, besándole la mano con dulzura hasta que se remueve y la mujer sólo acierta a mover los labios, a punto de fruncirlos un poco.

No obstante, busca una pequeña liga sobre la mesita de noche, se ata el cabello y entonces anda con su pijama de conjunto a cuadros con blusa de tirante mientras toma de la mano a Cedric Strange y se encamina a la habitación de las mellizas.

Y esa es la oportunidad para que Stephen Strange pueda empezar a esclarecer su mente, intentando captar su atención en cosas de su alrededor. Más allá de todo, recordó ligeramente el día que era y sabía que tendría que levantarse para ello, además de ayudarle a su esposa con el par de chiquillas que nacieron unos días atrás.