One Shots de Kakegurui

Osito Cariñosito

Muchos ven a Kirari como una persona cruel e inhumana, que no tenía sentimientos por nadie y por nada del mundo además de ella.

No estaban del todo equivocados pero solo habían 2 personas en todo el mundo que les mostraba su lado dulce y en busca de cariño.

Ririka, su adorada onee-sama, ella siempre fue la única que veía a Kirari en su lado y decidió llamarlo "Osito Cariñosito".

Sayaka, su hermosa secretaria que se convirtió en su novia, le sorprendió ver ese lado pero le pareció tierno la busca de afecto que Kirari siempre quería.

Un día normal en la academia o eso debería fue lo que Sayaka pensó, cuando llegó a la oficina de la presidenta se encontró con Kirari abrazando como koala a su hermana.

Ririka: Kirari...

Kirari: ni creas que me despegare de ti -dijo con un puchero.

Ririka miro a Sayaka deseando que la ayudara, amaba a su hermana pero aveces ese lado suyo era un poco asfixiante, un ejemplo no la dejaba alejarse de su lado por nada del mundo, incluso han dormido juntas por esa razón.

Sayaka: presidenta debería soltar a la vicepresidenta -dijo enternecida.

Kirari:¿Para que se vaya con ella rubia teñida y que se olvidé de mi? Perdón Saya pero no -dijo aferrándose más fuerte a su hermana.

Ririka:"perdóname Igarashi-san pero necesito respirar" mira Rari no me olvido de tu existencia solo me gusta pasar tiempo con mi novia, y creo que Igarashi-san también quiere tu atención -dijo con una sonrisa nerviosa.

Sayaka:"te quiero y todo Ririka-san pero... Bueno tampoco es que me queje".

Kirari lo pensó por unos segundos y soltó a su hermana no sin antes susurrarle a su gemela mayor.

Kirari: cuando lleguemos a casa me debes dejar de darte cariños por toda la tarde -dijo con un puchero.

Ririka suspiro y simplemente asíntio lo dicho por su hermana, Ririka se fue a donde se reuniría con Mary dejando a la pareja sola.

Sin darse cuenta Sayaka estaba enjaulada por los brazos de Kirari, rió por lo bajo y empezó a darle cariños en la cabeza.

Sayaka: hoy despertaste con muchas ganas de ser mimada -murmurró enternecida.

Kirari: Riri no me a dado cariños hace 1 semana y quería atención -dijo con un puchero.

Sayaka: lo entiendo, mejor nos sentamos en el sofá -dijo tranquila.

Se sentaron en el sofá en un tranquilo silencio, Kirari se sentó en las piernas de Sayaka disfrutando las suaves caricias que la menor le daba.

Sayaka jugaba con el cabello perfectamente peinado de Kirari, eran raros los momentos en los que Kirari quería cariño en la academia, para ella eran extraños pero para Ririka era muy común.

Kirari: Sayaka...¿Quieres quedarte el fin de semana en mi casa? -pregunto con los ojitos brillantes.

Sayaka sentía que su alma se iba por la ternura de su pareja, mostró una dulce sonrisa y beso la frente de Kirari.

Sayaka: claro amor.

Kirari sonrió de manera tierna y abrazo con más fuerza a Sayaka, así se la pasaron dándose cariños y mimos.

Ririka entro a la oficina de su hermana y vio a las 2 chicas durmiendo pacíficamente, con una sonrisa dulce las arropó para que no sintieran frío y estar calientitas.

Cuando las clases terminaron Kirari no quería despegarse de su novia, Sayaka le daba cariños y Ririka intentaba separarlas.

Ririka: me rindo.

La mayor se intenta ir pero se detuvo hasta sentir los brazos de Kirari en su cintura.

Kirari: nos vemos mañana Sayaka y no te olvides que ya tienes planes conmigo para tu fin de semana -dijo con una sonrisa.

Sayaka: claro Kirari -dijo con una sonrisa.

Ririka empezó a caminar con algo de dificultad porque Kirari había enrollado sus piernas en su cuerpo, si no fuera porque era su hermana hace tiempo le hubiera dado una llave de artes marciales.

Ambas subieron a la limosina y Ririka sabía lo que le esperaba cuando llegaran, su castigo por no prestarle atención a Kirari, aunque tampoco se queja de mimar a su hermana pequeña y viceversa.