A Obol no le gustaba estar encerrado.
Prefería estar al aire libre, correteando y explorando, incluso jugando a juegos que le enseñaron los otros niños y el cuidador.
Allí no había ruidos fuertes.Izuku se fue al parque con los niños.
Les vendría bien tomar el aire.
Todo iba bien, los niños se divertían en los columpios,el tobogán, el balancín...Hasta que sonó el petardeo de un coche.
Y ahí se desató el infierno.
Obol se volvió más agresivo, violento, y se abalanzó sobre la primera persona que vio que estaba frente a él.
Izuku trató de calmarlo, pero estaba confuso, mordía a todo el mundo y solo corría hacia ninguna parte.
Incluso causó desgarros musculares a una personaA lo lejos se oyó una ambulancia.
Luego de llevarlo otra vez al hospital, le diagnosticaron a Obol trastorno de estrés post traumático.
Dijeron que podría ser peligroso, pero al menos no lo suficiente siempre que Obol estuviera acompañado, además de darle a Izuku una pistola de dardos tranquilizantes.Izuku entendió que tenía que ver con su pasado, pero los héroes no le contaron que se suponía que le pasó al niño. De todas formas el lo investigaría.
Volvieron a casa, y todos se fueron a dormir.Más tarde, esa noche
Obol se encontraba de nuevo en esa arena, rodeada de esas odiosas vallas de alambre. Oía los gritos de la gente, y veía a su oponente,que se le abalanzaba encima con las fauces abiertas, y justo cuando le saltó encima se despertó.
Trató de calmarse. No era la primera vez que tenía esas pesadillas.
Debió haber gritado, pues su cuidador peliverde entró a la habitación.
Se ofreció a ayudarle, como quedándose a dormir con el o dejándole una luz encendida.
Obol solo negó con la cabeza.Después de eso, Izuku tenía que ir a por las pastillas que necesitaba Obol, por suerte Yuri iba tan bien que le retiraron la medicación.
Izuku prohibió los contenidos violentos y los petardos.
También se prohibieron imitar las peleas de héroes que salían en la televisión, así como los programas de carreras o coches.
Estos parecían ser los que más perturbaban a Obol.El cual ya no salía de casa.
No quería hacer daño a la gente, y menos recordar lo que hizo antes de entrar aquí.
Llegó a encerrarse en su cuarto, y solo salía para ir al baño, comer o ir a las clases de fisioterapia.
El trayecto a estas últimas eran lo peor a la vista del niño.Muchos coches, y cuando había una pelea entre héroes y villanos...
Los sonidos de la pelea, incluso el ruido de fondo de la gente animando, era demasiado similar a lo que oía antes.Después de un ir un par de veces, y de haber tenido que sedar a Obol por el camino, Izuku decidió que sería mejor para el chico que lo hiciera donde la cabaña.
Le mostró sus ideas al personal médico, además de explicar el porqué sería mejor para Obol.
Estos estuvieron de acuerdo, y acordaron que serían ellos los que vendrían a ayudar.
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un orfanato de monstruos?
FanficDespués de leer la historia de No dirijo un orfanato, se me ocurrió escribir esta. Varios de los personajes son propiedad de Horikosi. Esta es mi primera historia. Espero les guste.