Sonó el timbre, la barahúnda de chiquillos corrió para salir cuanto antes de la escuela.
Kaiyo y Kuiam esperaban ansiosos, no sabían si Izuku llegaría antes que Yoselin, pero había que intentarlo.
Afortunadamente divisaron la característica cabellera con forma de brócoli acercarse a la puerta, y la treintena de niños ya se iban a su dirección, algunos chocando entre ellos luego de frenar los de delante.
- Hola chicos, que tal el día?- pregunto con una sonrisa, cargando a Cio entre sus brazos y Líen de alguna forma sentado en su cabeza, con la apariencia de un Izuku chiquito.
Pronto empezaron a hablar varios a la vez, pero fueron callados por la firme declaración de Kaiyo
- Izuku, necesita que analices su peculiaridad - dijo señalando a Kuiam, que tuvo un efecto de cuello tortuga al ser observado por los demás niños, que no habían notado su presencia hasta entonces.
- Oh, de acuerdo - respondió algo inseguro, pero sin ver ningún inconveniente - cual es tu peculiaridad?-
- Ehm.... Yo...puedo darle poderes a las cosas...y esas cosas a la gente...- dijo algo nervioso.
- Ok, como le das poderes a las cosas exactamente?- dijo apuntando en una libreta sacada del bolsillo, y escribiendo mientras sostiene a la pequeña cyborg con gran equilibrio.
- N-no lo se.... cuando los toco estando enfadado...o asustado....ahí normalmente se me escapa la neblina.
- Neblina?
- Sí, las cosas se embadurnan de una niebla morada...y en menos de un segundo....-
- Alguna vez los objetos han reaccionado por si solos? Es decir, explotan o tiran algo sin que los toque nadie?-
Antes de que pudiera responder la pregunta, una mujer de aspecto severo se dirigió hacia ellos a paso veloz.
- KUIAM- llamó, tirando del brazo del niño - que haces? Vas a llegar tarde a tus extraescolares - y sin decirles ni buenas tardes se llevó a rastras al niño de pelo plateado, que inútilmente se quejó y pidió quedarse unos minutos más.
Izuku suspiro mirando la escena, intentaría llegar más temprano para terminar el análisis al día siguiente, porque con lo que habia apuntado solo podia trabajar en el campo teórico, y no sabia aun con certeza los limites de su peculiaridad.
- Bien, vamos a casa, vale?- dijo volviéndose a los niños.
- muy bien, señorita....Okimih- dijo Nezu haciéndose una idea del anagrama y la posible identidad de la chica que llamaba - le importaría ir mañana a una entrevista presencial?
- Para nada....- dijo.
- Bien, hasta entonces.- seguidamente colgó y empezó a hacer otra llamada - Aizawa, voy a necesitarte con refuerzos para una sospechosa que me ha llamado pidiendo empleo.
- Crees que es alguien de la liga de villanos?-
- Sí es quien creo que es , es posible que lleguemos a un acuerdo. Igual necesitaremos encerrarla un tiempo para hacernos una idea de la situación.-
Mientras, Himiko fue preparando los últimos detalles para conseguir sangre regularmente de una persona que esté bien calificada para colarse dentro sin levantar sospechas.
Había tenido que esperar tanto, planeando el donante adecuado para ello, y también su posición en la liga.
Estaba dispuesta a desertar? Sí
Dispuesta a venderlos? NoTiene sus límites, y no ella no va a vender a sus amigos, incluso si eso significa seguir siendo una fugitiva.
Y si no era como empleada, pues los visitaría en la calle, de camino al colegio ( para ser niños que estaban en la UA por ser "posibles blancos de villanos" según la información que obtuvo, no parecían tener escoltas y siempre iban por la misma ruta).
Todo sea por la amistad y la sangre regalada.
Fue de camino cuando vieron un pequeño incidente, donde había varios curiosos y se escuchaban los gritos de panico y angustia de dos niños.
Ellos se acercaron con rapidez y vieron la situación: un niño, de cuyos dedos salían hilos, los cuales estaban enredados en un pequeño, que lloraba asustado.
- Suéltame, suéltame - decía el niño en el suelo al tener atada las piernas.
El niño de las cuerdas estaba igual de nervioso, moviendo las manos y tratando de retraer los hilos, pero aquello no estaba funcionando.
- Eh eh, tranquilos - dijo el pecoso acercándose a ellos - tranquilizaos, vale?- dirigiéndose al niño - como sacaste los hilos de tus manos?-
- Es mi peculiaridad -
- Lo se, pero, de que forma?-
- ESO QUE IMPORTA?- grito de los nervios
- Sí sabes cómo los sacas, sabes cómo hacer para retraer, no?-
- Sí.... P-pero no está funcionando....-
- Tranquilos, vale? Vamos a solucionar esto....- dijo examinando al pequeño enredado. Los hilos parecían ser bastante fuertes, y no quería arriesgarse a cortarlos y dañar al niño, así que trató de desenredarlo primero, con ayuda de sus pequeños, que se unieron en ayudar.
Tardaron bastante en conseguir liberarlo, dando instrucciones al dueño de la peculiaridad para poder ayudar, y unos 25 minutos después el pequeño corrió a los brazos de sus padres.
- Gracias - musitó el niño
- No pasa nada, era la primera vez que se enredaba alguien, verdad?-
El niño asintió con la cabeza, para poco después dar un par de pasos atrás y salir corriendo a su casa.
Kuguma fue corriendo por las calles con rapidez , aunque las cosas hayan salido bien, ya tenia cierta "popularidad" gracias a su don.
Seguramente ese peliverde fue amable con el porque pensó que su peculiaridad solo eran hilos.
Camino cada vez más lentamente, mirando a ambos lados de la calle varias veces antes de colarse en la casa abandonada.
- Ya has vuelto - comentó su hermano gemelo, sentado con las piernas cruzadas en el suelo polvoriento.
- Sí...-
- Sigo sin entender porque sales a jugar fuera -
- yo no soy un antisocial como tú, que se pasa todo el día metido aquí-
- y tú te metes en problemas saliendo a la calle - replicó - dime, que ganas con eso? Has hecho amigos? Se como te miran, y no me hace falta oírlos para saber cómo te llaman-
- ....tú eres un chismoso.- acusó furioso sin saber que más decir.
Se giró y fue a la habitación contigua, pero aquello no le duró mucho, teniendo en cuenta que no tenía a nadie más.
- Bueno, y tú qué te cuentas,Magund?-
- no he encontrado pegamento, así que....- dijo encogiéndose de hombros. Me he tenido que entretener con mi peculiaridad.-
- Y me has estado espiando, verdad?-
- Porque dices eso?-
- Yo no te dije que me hubiera metido en ningún lío -
-..... Sabes lo mala que puede llegar a ser alguna persona -
- Bueno, no todos...-
- Ya, lo dices por el peliverde que te ayudó, no?-
- Entonces si me estabas espiando - dijo triunfal.
Su hermano solo río, volviendo a su maqueta, y empezó como pudo a terminar los detalles de un Izuku Midoriya en miniatura antes de volver a ponerlo en la pequeña escala de la ciudad.
BUENAS. Siento haber tardado, es que....me quedé un poco sin inspiración. Gracias por esperar, y también por apoyar está historia.
ESTÁS LEYENDO
un orfanato de monstruos?
FanfictionDespués de leer la historia de No dirijo un orfanato, se me ocurrió escribir esta. Varios de los personajes son propiedad de Horikosi. Esta es mi primera historia. Espero les guste.