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Capítulo 54

Decisiones en la vida

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Era la semana anterior a los exámenes parciales, cuando se iban a tomar las fotos de graduación, fue entonces cuando los estudiantes comenzaron a sentirse tristes por tener que irse, al darse cuenta de repente de que su vida en la escuela secundaria estaba llegando a su fin. Se pusieron todos en una fila delante del árbol que había frente al salón, y esperaron a que el fotógrafo disparara la cámara.

Tanto los jóvenes como las muchachas llevaban hoy sus trajes y vestidos favoritos, los jóvenes se habían cortado el cabello con antelación y las muchachas llevaban sus mejores peinados, esforzándose por salir lo mejor posible en la foto de graduación.

Chen Tianhe estaba de pie en medio de la tercera fila, vestido con una camisa blanca y unos pantalones informales azul claro. Esta camisa es exactamente igual a la que tenía Han Yi, recordó que estas camisas estaban en oferta en el centro comercial, así que las compró al 2x1, pensó que era una buena oferta y le dio la otra camisa a Han Yi, que era una talla más grande, cosa que a Han Yi no le gustó en su momento y no se la puso ni una sola vez en la escuela.

Chen Tianhe miró su vestimenta y pensó: ¿Me pregunto si Han Yi aún se acordará de esta camisa?, ¿también se tomará fotos de graduación?, ¿mis compañeros se acordarán de mí?

Chen Tianhe sintió que una de las cosas más lamentables de la escuela secundaria era no estar en la misma foto de graduación que Han Yi.

— ¿Están todos listos? Voy a contar 1, 2 y 3, y ustedes van a gritar "chesse". Pongan atención, ¡miren a la cámara! ¡1!, ¡2!, ¡3!

— ¡Chesse!

Con un "clic", la cámara captó las caras sonrientes de los adolescentes.

Más tarde, Chen Tianhe vio la foto de graduación de Han Yi, y se dio cuenta de que ese día, Han Yi también llevaba la misma camisa que él.

Chen Tianhe estuvo emocionado durante mucho tiempo, y sintió que los dos se sentían bien. Aunque Han Yi dijo que sólo era una coincidencia de que hayan llevado la misma camisa ese día.

El día que terminaron los exámenes parciales, algunos estaban felices y otros tristes. ¡Habían entrado oficialmente en las únicas vacaciones de verano sin tarea!, ¡no podía ser mejor!, ¡y el próximo semestre estarían en la secundaria superior! Lo triste es que ya no podrán sentarse junto en el mismo salón. En definitiva, fue un día de felicidad y tristeza.

Pero para Chen Tianhe, ¡todo era felicidad! Estaba impaciente por recoger sus cosas, decirle algunas palabras a Lu Hai y volver a casa. Nunca antes había estado tan emocionado.

Cuando Tong Shu vio lo emocionado que estaba su hijo por haber regresado, sonrió y preguntó:

— Hijo, ¿cómo te ha ido?

— ¡Muy bien! — Chen Tianhe respondió a la pregunta de Tong Shu mientas entraba corriendo a su habitación, tomó el celular y llamó a Han Yi, quien contestó en casi segundos.

— ¡Han Yi!, ¡he terminado mi exámen!, ¡debería poder aprobar! — Chen Tianhe dijo con alegría. — ¿Cómo te ha ido?

— Sin problemas.