𝐏𝐨𝐩𝐮𝐥𝐚𝐫𝐞𝐬 𝐯𝐬 𝐑𝐞𝐜𝐡𝐚𝐳𝐚𝐝𝐨𝐬

Capitulo 82

"Una playa de promesas"

Si tuviera que resumir mis anécdotas para nada comunes de preparatoria en un libro, entonces tendría más futuro como escritor que de licenciado en comunicación.

Y no, no soy licenciado en hablar mucho, ni en tener mejor labia.

Me fui a otro país para hacer lo mismo que pude hacer hecho en mi rancho con un curso de diseño gráfico, claramente más barato y fácil.

¡Yuju! ¡Me fuí de foráneo a lo estúpido!

Bueno no, me gusta mi carrera pero no me agrada tardar horas completas editando y al entregarlo a mi supervisor, diga: "Le hace falta más diseño".

¡Quiere que le ponga una jirafa vomitando unicornios o que!

¡No entiendo cuando quiere más diseño!

Diría que mi vida sería más fácil si hubiera estudiado administración de empresas como mis amigos, pero de sólo ver las tremendas ojeras que traen, me doy cuenta que soy muy feliz durmiendo mis 8 horas de sueño rejuvenecedor.

- ¿Porqué el repentino viaje?- Pregunté cuando el semáforo se puso en rojo.

Yeonjun me miró mal a través del retrovisor.

- Llevamos tres horas en el auto ¿Y apenas se te ocurre preguntar?- Regresó su mirada al frente.

- ¡Pues perdón!- Respondí.- Pero trato de recuperarme de la sorpresa que me lleve al ver dos vagabundos casi quemar el timbre de mi departamento de tanto estarlo tocando y como si no fuera suficiente, entraron a mi casa y empacaron lo que estuviera a su alcance en una maleta, ¿¡Pretendes que me lo tomé bien!?

- Se dice gracias maldito mal agradecido.- Respondió Hobi desde el asiento de copiloto.

- ¡Rompiste mi jarrón carísimo!- Chillé en protesta.

- ¡Te hice un favor!- Contestó a la defensiva.- ¡Esa cosa era un atentado contra la decoración old money!

- ¡No es old money!- Dije.- ¡Son cosas en oferta!

- ¿Quieren callarse los dos?- Cuestionó Yeonjun.- Me van a dar migraña con esos gritos.

- Perdón.- Respondió Hoseok.- Olvidó que la gente embarazada es más sensible.

- ¡No estoy esperando un bebé!

- ¡Nosotros sabemos de tu reciente aventura!

- ¿Aventura?- Preguntó sarcástico.- ¿Que tiene de aventura que mi novio me haya regalado un departamento?

- ¡No es un simple departamento!- Es mi turno de gritar.- Es un maldito penthouse, y en una de las zonas más caras de la ciudad.

- Y eso no te debió salir barato.- Agregó Hoseok.- Debiste entregar tu pequeña florecilla.

Yeonjun nisiquiera nos respondió, siguió conduciendo mientras que Hoseok y yo sólo íbamos molestandolo.

Continuamos así alrededor de una hora, siendo ya casi el atardecer cuando llegamos a nuestro destino.

Espera...

¿¡Este es nuestro destino!?

- ¿Vamos acampar en la playa o que?- Pregunté.- No veo ningún hotel cerca.

- Bueno, nosotros iremos a otro lugar.- Hoseok murmuró.

- ¿Qué?

- Nada, sólo ignóralo.- Yeonjun le dió empujón.- ¿No es genial la vista?