Para ti.

Capítulo 28

-Capítulo 28-

Alice:

Estaba muerta de nervios, hoy tendría un examen de química importante, y aquello me aterraba, había estudiado demasiado pero aún era difícil para mi.

En cuanto termine de ducharme me vestí, me coloqué una falda roja, un top blanco y una chaqueta de blue jean, quería verme linda, eso me hacía sentir mejor en días con alto estrés.

Baje a desayunar, era el último día que estaría con mis padres antes de que se fueran a Washington a visitar a la abuela, insistieron demasiado en que fuera, pero en época de exámenes se veía más como suicidio. Y realmente a ellos no les molestaba que me quedara unos días sola, así que sabía que estarían tranquilos.

Salí de mi casa llena de libros y libretas, tenía mucho que estudiar a pesar de que la noche anterior me había desvelado por ello.

Al verme, Evan salió rápidamente de su auto.

-Déjame ayudarte, preciosa.- me quito algunos libros, quitándome un peso de encima.

-Gracias, cariño.

-Por cierto...te ves hermosa hoy.- ya era algo común que Evan y yo los dijéramos cosas lindas, pero aún así seguía sonrojándome cada que decía algo de ese estilo.

-Y tu te ves perfecto, Ev.- dije antes de besarlo.

-Ah si, olvide decirte que...hoy no podré estar contigo en el receso, el maestro Collins quiere que lo ayude a revisar exámenes, te molesta?- me miro triste.

-Claro que no Ev.- le sonreí.

-¿Y como vas con lo de química? ¿necesitas que te ayude o algo?

-No lindo, gracias, ayer me dormí muy tarde estudiando y creo que puedo tener una buena nota.

-Confió en ti, preciosa, todo va a salir bien en tu examen, eres muy inteligente. Igualmente si...quieres estudiar un poco más o necesitas algo, estaré en el salón 42, puedes buscarme cuando quieras, si?

-Claro Ev, gracias.

-Ah si, otra cosa...

-Dime, cariño.

-Mañana sera la cena con mis padres, pasaré por ti, sera en un restaurante lindo, espero te guste.

-No puedo esperar a mañana, se que será perfecto.- sonreí.

Evan me llevo hasta mi salón, estaba demasiado concentrada, no quería perderme ningún detalle de la clase, al acabar las primeras clases salí al receso, no tenía mucha hambre, pero sabía que Evan si, y el no podría ir a comer, así que decidí comprarle un sándwich, un jugo de naranja y llevárselo a su salón.

Toque la puerta y espere pacientemente afuera del aula.

-Pasa Alice.- dijo el profesor.

-Gracias...sólo quería entregarle esto a Evan.

-Gracias linda.- contesto Evan mientras me daba un beso en la mejilla.

-Que tengan un buen día...hasta luego.

-Hasta luego Alice.