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Jagger
╚══≪ •❈• ≫══╝Término de acostar a los bebés, les doy un beso a ambos en la frente y los observo mientras duermen por un par de minutos. Pasamos toda la tarde en el parque y la única razón por la que vinimos a casa, es porque Jared estaba durmiéndose en el columpio. Después de que Keren dijera que no paso tiempo con ellos, he estado saliendo más temprano de la empresa y pasando la tarde con ellos. Sé que no debo hacerlo, que mi atención siempre ha estado en mis hijos y que ellos nunca han sido una segunda opción, pero no puedo arriesgarme a que de alguna forma Keren confirme todas esas acusaciones falsas que está haciendo.
Sonrío viéndolos, están dormidos en la misma cama. Hope no quiso pasarse a su cama, dijo que quería dormir con Jared y no hubo manera en la que lograra convencerla de cambiarse de lugar, así que la dejé ahí. Y ahora está dormida al lado de su hermano mientras le sostiene la mano.
Son míos.
Los amo y son míos.
Apago la luz y suspiro, pasándome las manos por la nuca, sintiendo como el estrés se acumula en mis hombros. Bajo las gradas, cerrando la baranda que evita que esos dos diablillos bajen sin supervisión y voy a mi despacho para terminar de arreglar unos detalles en el diseño del hotel de Genevieve. Me sirvo un trago mientras tanto y me enfoco en eso, evitando pensar en todo lo que Keren planea hacer. Incluso ignoro los últimos mensajes enviados por la abogada. Hoy disfruté con mis hijos y no pienso dejar que esta mierda me quite la paz que sentí con ellos.
Arrugo las cejas viendo el mensaje que acaba de llegarme. Me paso la mano por la cara y sacudo la cabeza, quizás esté quedándome dormido y veo cosas que no son.
Pero sí es.
Es un mensaje de Genevieve... de Candy por medio de aquella aplicación.
¿Qué hace escribiéndome por aquí? Es más, ¿cómo es que ella ha iniciado la conversación? ¿Es ella realmente?
Le escribo un mensaje normal y su respuesta me llaga por medio de la aplicación.
Sí es ella.
Veo los papeles en mi escritorio, veo hacia la puerta cerrada del despacho y luego veo el celular. Ya acosté a los bebés, ya tomaron leche y ya sé que duermen plácidamente.
Puedo seguirle el juego como muchas otras veces hice.
Wolf:
¿Por qué me escribes por aquí?Candy:
Me contaron que estás estresado.
Candy:
Yo te ayudo cuando te estresas.Sonrío.
Wolf:
Usar esto ya no es necesario.
Wolf:
Siempre puedes venir y
desestresarme en persona.
Wolf:
¿Cómo es que estás escribiéndome?
¿No soy yo el que debe iniciar esto?Tarda en contestar y lo que hace es enviarme un mensaje a mi número.
El trago que acabo de darle a mi whiskey se va por mal lado y debo golpearme el pecho varias veces mientras toso. Tiene que estar jodiéndome. Tiene que estar jodiéndome.
Sin siquiera dejarme reaccionar, me envía un mensaje por la aplicación.
Candy:
No hagas preguntas estúpidas.
Disfruta lo que te envié.¿Que disfrute lo que me envió? Joder, claro que sí. Vuelvo a entrar a su mensaje normal y suspiro con pesadez al ver la foto de nuevo. Si su idea era quitarme el estrés, no lo está logrando. Me estresa más saber que está usando eso y que ni siquiera la tengo cerca para poder quitárselo. Ver a Genevieve desnuda siempre va a encantarme, pero verla usar esas diminutas piezas de lencería me hace perder los estribos. Especialmente cuando son negros. Negros y que apenas cubran sus perfectas tetas. Negros y que su culo quede casi al descubierto. Ni siquiera es una foto sexy, solo es ella sentada en la orilla de la cama, con una pierna doblada sobre el colchón, una mano sobre su muslo, la otra como si se acomodara el pelo que lleva recogido en un moño desordenado.
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Inefable
RomanceGenevieve, a pesar de ser optimista , alegre y carismática, siempre ha pensado que ser adulta es una mierda, lo confirma cuando después de haber tenido un empleo exitoso, queda desempleada, con deudas que pagar, un padre enfermo y una madre ama de c...