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Genevieve
╚══≪ •❈• ≫══╝—¡Mami Vee, mírame! —chilla Hope emocionada señalando su disfraz —¡Soy Boo! ¡Y Jar es Thomas el tren!
Sonrío viéndola y río cuando da una vueltecita.
—¡Míranos, papá Lucien!
—Te veo, abejita. —Ella se sonroja y ríe —¿Vas a traerme muchos dulces?
—¡Sí!
Sonrío al ver a papá tan feliz con los bebés aquí. Jagger los trajo el jueves como se lo prometió a papá y juro que mis padres tuvieron su momento feliz de la semana. Es lindo ver lo mucho que quieren a los bebés y viceversa. Es como sí de verdad fuesen sus nietos. Y hoy, tal y como le dije al amargado que tengo de novio el miércoles, llevaremos a los niños a pedir dulces.
—Mami, ¿ya viene papi?
—Sí, cuando él llegue iremos a buscar dulces, ¿está bien?
—¿Puedes darme pastel? Quiero probar eso. —Señala la crema batida, me giro un momento para coger un poquito de la crema batida que sobró y darle, sin embargo, al girarme hacia ella de nuevo, la encuentro con sus deditos metidos en las frambuesas con las que mamá decoraba el pastel.
—Hope.
Se encoge de hombros y sube la vista para verme, el gorro del disfraz se cae de su cabecita, revelando las dos coletas en las que está recogido su pelo. Me sonríe, sus mejillas ponen rojas y me observa con inocencia.
—Lo shento, mami.
Mamá y papá se ríen ante su intento de sobornarme con sus palabras mal dichas. Porque eso es lo que hace ahora, siempre que intenta salirse con la suya habla como chineada.
—Ven para limpiarte esas manos.
—¿Y me darás eso? —cuestiona mientras le quito las frambuesas de los dedos. Le doy a probar un poco de crema batida y ella ríe emocionada antes de correr donde Jared que juega en el cuarto de mis papás.
Hoy yo fui a recogerlos al kínder porque su papá tenía una reunión y los traje a mi casa porque aquí todos los años hacen actividades para los niños. Era mejor traerlos a pedir dulces aquí que en la comunidad donde Jagger vive, porque bueno... él vive demasiado lejos de los demás.
Hope vuelve unos minutos después y coge una frambuesa.
—Mami Vee, ya tienes pancita —dice y toca mi estómago — ¿El bebé está más grande?
—Mi amor, tan linda —susurra mamá.
—Mmm, sí, tiene el tamaño de una pera. —Cojo una del cesto de frutas y se la muestro.
—¿Y será más grande?
Asiento.
—¿Me dirás de qué tamaño está el bebé siempre?
—Sí.
Sonríe emocionada y vuelve a irse corriendo en busca de Jared, gritando que el bebé es una pera.
Debo admitir que estos últimos días han sido buenos. He alternado mis noches durmiendo en casa de Jagger y aquí. También he alternado ciertos momentos de mi día en la pastelería o en la oficina de Jagger, porque digamos que nuestros momentos en casa se han visto un poco delimitados ahora que los niños están ahí de nuevo. Cada vez que estamos los cuatro juntos parece que ellos solo quieren estar encima de nosotros. Es lindo, pero últimamente termino mi día tan cansada que hacer algo en casa es difícil porque apenas acostamos a los bebés, yo voy, me dejo caer en su cama y me duermo.
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Inefable
RomanceGenevieve, a pesar de ser optimista , alegre y carismática, siempre ha pensado que ser adulta es una mierda, lo confirma cuando después de haber tenido un empleo exitoso, queda desempleada, con deudas que pagar, un padre enfermo y una madre ama de c...