Kim Taehyung un lindo castaño que es ofrecido por su padre, como pago de una deuda al Jefe de la mafia más conocida y peligrosa de Corea del sur.
-Pues lamento informarle que yo no lo conozco-
-Bien en ese caso- se detuvo para soltarme, pero seguía...
La mañana llego y Taehyung despertaba, abrió sus ojos lentamente y observo el lugar donde se encontraba, todo a su alrededor era muy bonito, los muebles de estilo victoriano estaban presentes, parecía un castillo dentro, mientras que por fuera se veía como una simple cabaña.
Llevo su mano a la mejilla que tenia golpeada y la sintió desinflamada, toco su labio y sintió la pequeña costrita de sangre en este, soltó un suspiro triste y después observo el sillón.
Vio a Jungkook profundamente dormido y una pequeña sonrisa se forma en sus labios, se levantó de la cama y con un poco de ayuda de esta se apoyo hasta quedar frente al sofá, camino a pasos lentos y después se arrodilló en el suelo frente a Jungkook, llevo su mano al cabello azabache y lo acaricio.
Jungkook sintió caricias y poco a poco comenzó a despertar, al abrir sus ojos vio a su pequeño frente a el.
—Perdóname— dijo el menor confundiendolo, procedió a sentarse y ver al menor.
—¿De que estas hablando pequeño?, ¿por que te disculpas?—tomó a Taehyung de sus manos y lo ayudó a levantarse, con paciencia y cuidado caminaron a la cama en donde el azabache sentó al menor para después sentarse el.
—Porque estoy sucio Jungkook, me usaron, hicieron lo que quisieron conmigo...y-yo no...
—Shh...tranquilo, tu no tienes la culpa de nada amor... y no estas sucio... yo te voy a amar igual o más de lo que ya te amo.
—P-pero yo...
—No mi ángel...recuerdas lo que dije cuando te di esto— dijo mostrando el collar del tulipan —Dije que mi amor por ti era incondicional, yo te amo Taehyungie, sin importar lo que pase te amo y te seguiré amando.
Taehyung sintió lágrimas salir de sus ojos y Jungkook quiso borrarlas de sus mejillas por lo que procedió a pedir permiso.
—¿Puedo tocarte amor?—Taehyung asintió y después Jungkook pasó sus pulgares por sus mejillas, el azabache procedió a colocarle el collar y después lo volvió a arropar —Iré a ver si le desayuno esta listo — Jungkook salió de ahí y de dirigió a la casa grande.
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Ji-eun salía del baño de su habitación después de haber devuelto su desayuno, fue al balcón y vio a Jungkook caminando a la casa, salió de la habitación rápidamente y después bajo las escaleras, y vio a Jungkook entrando.
—Oh Jungkook... buenos días
—Hola Ji-eun— dijo pasando a un lado de la chica sin siquiera mirarla.
—Oye estaba pensando en si vamos a motar, ya sabes como antes de que te fueras.
—No puedo debo de cuidar de Taehyung.
—No crees que ya esta lo suficientemente grande para cuidarse solo, vamos a montar y después nadar en la piscina.
—No Ji-eun entiende, voy a cuidar de Taehyung el tiempo que necesario para que se sienta mejor, deja de insistir ya estoy harto, no quiero pasar tiempo contigo.
