Capítulo dedicado a Lisanet0315
Porque si ustedes perdonan a los demás el mal que les hagan, su Padre que está en el cielo también los perdonará a ustedes.
Mateo 6:14
LunesEl chico estaba inmóvil, parado viendo el atardecer, recordando una y otra vez el pasado.
Habían tantas cosas en su mente que empezaba a sentir punzadas muy fuertes en la cien.
Si cerraba sus ojos la imagen de Aurora aparecía en su mente. El tiempo no había podido curar esa herida, el no podía dejar de extrañarla.
Recordaba que siempre Aurora fue tan detallista con el, ella lo amaba.
Siempre que se dirigía a el le decía "cariño"
Eso a José le encantaba.
Ahí en la soledad, una lágrima rodó por su mejía.
¿Qué podía hacer?
El la extrañaba, pero lo que más le dolía era saber que ella ya no estaba ahí con el. Que hoy... todo lo que vivió con ella sólo era un recuerdo.
Sacó su móvil y ahí estaba aquella foto de ellos dos juntos.
Aurora sonreía cerrados sus ojos mientras José dejaba un beso en su mejía, su sonrisa era tan hermosa, su cabello negro al igual que sus ojos la hacían ver tan bella.
Sintió tanto dolor, todo lo que quería era poder tenerla cerca, ya no quería sentirse sólo.
La soledad lo estaba matando, su única compañía se había ido, y aunque ya había pasado cierto tiempo, a el le seguía doliendo su ausencia.
De vez en cuando iba al cementerio, pero eso sólo aumentaba la tristeza que había en su corazón.
Todas las noches la recordaba y se decía así mismo cuanto la extrañaba.
-¿José?- una voz se escuchó tras de el.
José se dio la vuelta para ver de quien se trataba ya que la voz se escucha débil y seca.
- Hola Jireh- respondió el rubio forzando una sonrisa, trataba de ocultar la tristeza que sentía por dentro.
Jireh noto sus ojos aún cristalizados.
-¿Estas bien? - preguntó Jireh
El asintió
-¿Vienes de la Universidad?- hablo José para luego aclarar su garganta.
-Si hoy salí más tarde, por eso voy sola, voy a comprar algo de comer a esa cafetería, ¡muero de hambre! - dijo Jireh tratando de no forzar la voz - ¿vamos?
José se quedó en silencio y luego asintió.
Jireh pensó que diría que no, pues José es el tipo de persona que no le gusta hablar con nadie y mucho menos con ella.
Pero ahora estaba cambiando ya no era grosero con ella como lo era antes.
¿Estará arrepentido?
¿Le pasaría algo?Pensaba Jireh, de todos modos trabajaría en lo que se propuso lograr desde que lo conoció y era que el pudiese conocer a Jesús.
Entraron al lugar, José llevaba un jean negro y un jersey color azul, sus cabellos rubios estaban desordenados por el viento.
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No Hay De Que Temer. Libro II (Trilogía) [Los Sueños de Dios]
SpiritualTrilogía: Los Sueños De Dios Libro II ♡ ♡ ♡ Cuando el ser humano teme, comete los peores errores. Sólo los valientes podrán tener la victoria. La Iglesia de Cristo, siempre h...