¿Podrá algo separarnos del amor de Cristo? Ni las dificultades, ni los problemas, ni las persecuciones, ni el hambre, ni la desnudez, ni el peligro ni tampoco la muerte. Así está escrito: «Por ti estamos siempre en peligro de muerte, nos tratan como si fuéramos ovejas que van al matadero». Más bien, en todo esto salimos más que victoriosos por medio de Dios quien nos amó. Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los poderes diabólicos, ni lo presente, ni lo que vendrá en el futuro, ni poderes espirituales, ni lo alto ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada podrá separarnos del amor de Dios que se encuentra en nuestro Señor Jesucristo.
PDT: Romanos 8:35-39
Ya era lunes, el fin de semana había pasado muy rápido.
Era tarde Sahúl hablaba con Tiffany sobre lo que su papá. También le había contado que ese mismo día encontró a la chica que le había inyectado la sobredosis de heroína.
-¿Cuando llegará tu papá a la Iglesia?- preguntó Tifi.
-El martes, el es muy ocupado, pero dijo que llegará este martes.
-Te veo preocupado... ¿Es por esa chica?.
- No lo se Tifi, ese día que la encontré recordé mi pasado y me he sentido extraño...
-Vos tenes que saber que Jesús ya borró todos tus pecados y si satanás quiere recordártelos es para que falles, pero tu debes de saber que DIOS ya te limpió y nada te puede separar de Su amor.
-Amen- respondió más tranquilo.
-Me voy, Mi mamá me llamó para algo urgente- dijo tifi algo triste
Sahúl quedo sólo, se levantó para ir a su casa.
-SAHUL-Alguien gritó
El moreno vio hacia atrás.
La chica se acercó.-que bueno que te encuentro-dijo Grethel.
Sahúl sintió un escalofrío correr por su cuerpo. Era una sensación de miedo.
-Que necesitas.
-Pedirte un consejo- respondió.
-Dime- se volvió a sentar.
Grethel se sento y se acercó a Sahúl.
-Bueno- suspiró, se veía nerviosa- es que... quiero decirte que ... me gustas.. y que siempre quise hacer esto.
Sin darle tiempo de reaccionar lo besó, Sahúl se quedó inmóvil por un momento, Grethel se pegó en mas a el, haciendo que es el chico se dejara llevar por el beso.
Sintió una punzada muy fuerte en su corazón.
apartó a Grethel.-Alejate de mi- dijo y se fue.
Sahúl sintio unas profundas ganas de llorar.
Se sentía culpable, era como si su pasado estuviese regresando al presente.
Caminaba rápido, no sabía hacia donde iba. Sólo sentía que había fallado.
No era fácil para Sahúl, en su vida pasada se había acostumbrado a andar con muchas chicas. Sus primeros días en el evangelio fueron difíciles, pues cuando una chica se le acercaba a el le gustaba. Con el tiempo Dios leo había cambiado. Pero ¿Qué estaba pasando ahora?.
Llegó a un terreno baldío, se sentó en una piedra grande. Escondió su rostro en las manos y empezó a pedir perdón.
Sintió una mano en su hombro, lentamente levanto su rostro y vio una mano muy delicada con uñas largas muy bonitas, una mano femenina.
-Kelly - dijo sorprendido-¿Qué haces aquí?
-Te vi que saliste de la Universidad. Quería hablar con vos, pero saliste muy rápido entonces me preocupé...¿Te pasó Algo?.
Sahúl no encontraba las palabras.¿Cómo le iba a decir que había besado a otra chica, cuando la que tenía en frente le gustaba?.
- No te puedo contar- bajó el rostro.
-¿Por qué?
Trató de orar en su mente, pero se sentía culpable y sentía que DIOS no lo escucharía, pero aunque el no lo sentía en ese momento, Dios estaba ahí.
-Por que me gustas y si te lo cuento me vas a odiar.
Kelly se sonrojó al escucharlo decir "Me gustas" pero se preocupó al escuchar "me vas a odiar".
- Si Dios no te odia yo tampoco lo voy a hacer.
Sahúl la vio a los ojos, ella se había sentado al lado de el, tomó su mano.
- Te sientes culpable por ese beso ¿cierto?
Sahúl se sorprendió al escucharla.
Sus ojos se llenaron de lágrimas.
Empezó a contarle sobre su pasado, las cosas horribles que había hecho, cuando le inyectaron la sobredosis de heroína y que había encontrado a la mujer que lo había hecho.
Le contó lo culpable que se sentía, era como si su pasado estuviese regresando.Kelly escuchaba con mucha atención, cuando vio a Grethel besándo a Sahúl le dolió mucho, pero gracias a Dios también pudo ver que no fue Sahúl el que la besó si no ella.
Logró a ver todo, al principio pensó en que no lo iba a seguir, pues no sabía como hablarle, pero el Espíritu Santo le hizo sentir la necesidad de hablar con el y ayudarlo.
- Me siento mal, siento culpa... no merezco nada.
-No sabía todo eso de vos, pero Jesús te limpio y te transformó, ya no eres igual, eres una nueva criatura- Dijo Kelly.
Ahora entendía por que José decía todo eso de Sahúl, pero también sabía que Sahúl no era el mismo de antes, Sahúl era hijo de Dios.
-Mira lo que vamos a hacer- siguió diciendo, tomó sus manos- vamos a orar y juntos le pediremos a Dios que te perdone y que te ayude a estar firme, nada te puede separar de Su amor... Eres mi amigo, eres mi hermano y siempre tendrás mi apoyo. Vos dijiste que te gusto y me alegro por eso, pero no quiero que me veas como la chica que te gusta y en quien no puedes confiar sólo por que crees que te voy a juzgar, pero no es así, soy tu hermana en Cristo y mi deber no es juzgarte, también me gustas...- bajó el rostro algo apenada - pero no quiero que eso me impida verte como mi hermano. Te quiero mucho y deseo tu bien.
Ambos se abrazaron y oraron mientras se abrazaban, no era un abrazo apasionado o con deseo, era un abrazo tierno, lleno de la presencia de Dios.
Cuando terminaron de orar ambos, en su mente le hicieron la misma pregunta al Espíritu Santo.
《¿Es el chico que escogiste para mi?》
Pensó Kelly
《¿Es ella la chica que escogiste para mi?》
Pensó Sahúl
Claro que el Espíritu Santo les contestaría, pero primero les enseñaría muchas cosas que ambos necesitaban aprender.
GENTEEEE, BENDICIONEEEE
¿Qué le ha parecido?
LES agradezco por esperar, los capítulos no están corregidos, por lo que no me ha dado tiempo para eso, así que lo haré después.Gracias!!!
Nos leemos pronto.
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No Hay De Que Temer. Libro II (Trilogía) [Los Sueños de Dios]
SpiritualTrilogía: Los Sueños De Dios Libro II ♡ ♡ ♡ Cuando el ser humano teme, comete los peores errores. Sólo los valientes podrán tener la victoria. La Iglesia de Cristo, siempre h...