No Hay De Que Temer. Libro II (Trilogía) [Los Sueños de Dios]

59| El diario

Capitulo dedicado  a Scarlet Mota 💕💕

Sábado 11 de Junio

Sahúl había despertado, toda su cara estaba con moretones, nadie había dormido después de lo sucedido. En los pasillos del hospital, unos sentados, otros caminando de un lado a otro.

Tiffany y Adam estaban dentro viendo a Sahúl.

Hellen puso sus manos en su rostro, estaba cansada.

—Tranquila, todo va estar bien —dijo José susurrando.

—Gracias, Kylle —suspiró —quiero que esto acabe ¿Por qué nos quieren  dañar? ¿Que les hemos hecho?

—No lo sé, pero si creo que terminará, vamos a descubrir a las personas detrás de esto. Dios no nos va dejar solos.

Hellen sonrió
—Es lindo verte decir eso —soltó sin darse cuenta que esas palabras provocarían un terremoto en el corazón de José.

José se levantó y fue donde estaba Kelly, dentro de sí mismo se preguntaba por qué había sentido eso, por qué le había gustado las palabras de la castaña.

****

—Asi que el fue el que intentó hacerte daño —dijo Isaque mientras Jireh le explicaba quién era Santiago.

Al tener mucho sueño, ambos se habían puesto a hablar. Isaque había sacado el tema de Santiago. El quería ayudarlos y para hacerlo tenía que saber cómo iba la situación.

—Cuando lo vi, solo pude gritar del miedo, aún cada vez que lo veo me da mucho miedo.

—No crees que el pudo haber cambiado. Lo digo porque se veía realmente atemorizado y si buscó la iglesia antes que el hospital es por algo.

Jireh asintió.

Isaque se abrazó así mismo, hacía frío, era de madrugada y para Isaque que venía de un país súper caliente, estar en un país fresco, a esas horas sentía mucho frío.

—¿Querés ponerte mi chaqueta? — le preguntó Jiji.

—De lo ancho me queda, pero tiene corazones rosa.

Jireh se encogió de hombros

—Y es malo que te deje aguantar frío —frunció el ceño, acto que le hizo ver muy tierno.

—No tengo frío, Isaque —dijo mientras  abría y cerraba los ojos —si tuviese me la pondría, pero siento calor.

—Ok pues, pásala

Jireh se la dio y este se puso la chaqueta.

—Definitivamente, es una prenda muy ancha para ti, a mi me queda súper, lástima que tiene corazones rosa, si no te la hubiese quitado desde hace mucho.

Jireh rió ante el comentario del castaño mientras se ajustaba  el pañuelo que andaba en la cabeza.

Isaque la observó de reojo. Se sintió mal por verla en ese estado, era su amiga y le lastimaba verla así, recordó cada llamada que tenían, pero la que más le dolió fue haberla escuchado llorar por su cabello.

Jireh se recostó y cerró los ojos, Isaque hizo lo mismo y así quedaron dormidos.

Alon, Jimmy y sus dos hermanas se habían ido, también Oliver y Lilliam. Tendrían que trabajar. En los pasillos del hospital  estaban: Kelly —que estaba dormida y ocupaba a José cómo almohada —Hellen que estaba al lado de José y no dormía, pero tenía cerrados los ojos. Jiji e Isaque, Adam que estaba apunto de dormirse y Tifi que estaba dentro con Sahúl.