Petunia... Dursley? JAMÁS

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Severus solo podía escucharla llorar. Incluso cuando ella se tranquilizó, él solo espero a que dijera algo. La pelirroja le abrazo agradeciendo su apoyo, para cualquiera que los viera diría que eso era extraño, ya que él no hizo nada por ella, sin embargo, la conocía lo suficiente como para saber que en ese momento ella no quería contacto con alguien o palabras que le aliviarán, para él su llanto ya decía demasiado, simplemente opto por darle su espacio

— ¿Evans te dijo algo malo?— ante tal pregunta Lily solo negó con la cabeza entregándole la carta, remendada con cinta adhesiva, para que la leyera

La típica expresión sería de Snape se vio alterada por la ligera sorpresa que brillaba en sus ojos, sus pensamientos eran varios, mas ninguno pudo ser expresado en voz alta.

— Lily, sabes que puedes repararla con magia— como respuesta de ella solo fue un asentimiento—... ¿Te molesta que me interesen las artes oscuras?

El silencio estaba cargado de tensión, Severus soltó la pregunta porque de verdad quería saber que pensaba Lily, sin embargo, también existía en él la preocupación de que ella lo juzgará y lo rechazará 

Finalmente ella se decidió a decir algo —Siendo honesta, al principio me causaba conflicto, te juntas con personas que estudian las artes oscuras y desprecian a los de mi estatus de sangre, no quiero decir que tu lo hagas, pero ¿por qué juntarte con ellos si son así? 

Una mueca de insatisfacción se hizo presente en el rostro del pelinegro. 

— Petunia no sabe que ellos me llaman sangre sucia, no sé que habría dicho al respecto sobre ti... soy tu amiga y no quisiera que un día te convirtieras en alguien igual a ellos, es decir, alguien que desprecie a mi hermana y a mí por la sangre que tenemos... — un suspiro sale de ella extendiendo la carta hacía el pelinegro —toma como habrás leído ella mandó esto para ti

Él tomo el sobre entre sus manos y Lily se marchó sin decir más. Se quedó ahí unos minutos debatiéndose entre abrir la carta o destruirla, al final simplemente la guardó en su túnica y tomo rumbo a sus clases.

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Durante las clases, mientras Lily ignoraba a los merodeadores, Severus se enfoco en distintas cosas, tanto como su mente le permitía, pues siempre volvía a pensar en aquel sobre que estaba en su túnica.

Terminando el pesado horario escolar fue al lago negro, en busca de algo de paz, finalmente optando por leer la carta de Petunia Evans, saco el sobre de entre sus ropas y pudo detallar el sobre y el sello que lo mantenía cerrado, pensando en que hizo algo innecesario con los detalles del mismo.

01 de septiembre de 1974

Severus Snape.

Si estás leyendo esto, muy probablemente estés sorprendido de que te envíe una carta. La realidad es que quiero ser tu amiga o mínimo no solo la Evans fastidiosa que solo toleras porque es hermana de tu mejor amiga.

Quizás y no sea de mi incumbencia, pero considero que tenemos la suficiente confianza para comentarte algo respecto a una inquietud de Lily. Sé que es tu mejor amiga y por eso me he tomado la libertad de escribirte. 

Bien, a Lily le resulta preocupante tu amistad con los compañeros de tu caso, así como tu acercamiento a las artes oscuras. Si todos son como ese chico Black al que golpee, quizás deberías tener en cuenta que en algún momento deberás dejar en claro cuales son tus creencias respecto a personas como Lily y yo. Fuera de eso he de decirte que no me sorprende, luces como alguien que no se queda con lo que le enseñan los demás, y eso esta increíble. No sé como lo haya tomado mi hermana, pues mis palabras, más que apoyar el argumento de que solo hay blanco y negro, me presto a creer que por algo existe la gama de colores.