NARRA PABLO
A la mañana siguiente, alguien aporreando la puerta nos despertó. Abrí rápido intentando que Claudia, quien dormía como un bebé, no se despertara. Cuando abrí, vi a Ansu y Pedri allí parados, mirando sorprendidos.
-¿Qué os pasa a vosotros dos para dar esos golpes?
-Gavi tio hemos quedado en 15 minutos, no me jodas que seguís durmiendo-preguntó desesperado
-Shh, baja la voz. Sí, Clau está dormida y no quiero despertarla, ¿por qué no os vais y ya os alcanzaremos?
-Venga hombre, no seas así, hasta Ferrán y Sira se han despertado, vamos, tenéis 15 minutos para estar abajo preparados, si no volveremos con un megáfono-advirtió Pedri señalándome.
-Os voy a matar si hacéis eso-amenacé señalándoles con el dedo de vuelta.
Riendo se fueron hacia el ascensor, en lo que yo cerré la puerta y me dirigí de vuelta a la cama para despertar a mi novia. Sabía que esos cabrones eran capaz de sacar un megáfono de donde fuera y venir gritando, así es que preferí ahorrarle ese mal rato a ella.
-Amor, vamos, nos están esperando-dije besándola suave para que se despertara.
-Mmmh, ¿qué hora es?
-Las nueve menos cuarto, hemos quedado en 15 minutos abajo
-Uy, que llegamos tarde-dijo levantándose corriendo
Me reí, que fuerza tenía cuando quería la tía. Nos vestimos rápido y nos aseamos para no llegar tarde. A las 9 y dos minutos estábamos en recepción. Al llegar todos nos miraron.
-Ya íbamos a ir a buscaros-dijo Ansu-Pensabamos que seguíais durmiendo
-No me pierdo ese tour por nada del mundo-dijo mi novia abrazando a mis amigos y poniéndose la gorra.
-Yo hubiera preferido dormir otro rato más-bostecé cansado-Os odio a todos, esta pienso devolverosla.
-Venga cabezón, que hay que conocer la ciudad-dijo Ansu emocionado
Salimos los seis con gafas de sol y para evitar que nos reconocieran. Hasta Sira y Claudia tuvieron que ponérselas por precaución, nos apetecía disfrutar el día sin muchos problemas y, sabíamos que eso era lo mejor.
Ansu iba guiándonos delante mientras Ferrán, Frenkie y Pedri se reían de él y la emoción que mostraba. Por cada lugar que pasábamos y veía algo que podía llevar de recuerdo, paraba a comprarlo.
Eran las 12 y, a parte de cansancio, lo que llevábamos era muchas bolsas, sobre todo Sira y Ansu, quienes parecían dos marujas hablando. Pedri y Claudia iban hablando entre ellos riendo. Me hacía tan feliz ver la buena relación que tenía mi novia con todos que estallaba de felicidad cada vez que lo pensaba.
Y es que, al final, todo había pasado en parte gracias a Pedri. Quizás si ella no le hubiera tirado mi copa, no nos hubiéramos conocido. Bendita copa.
(...)
Parar a comer algo fue algo necesario. Me tenían agotado ya. Visitar la ciudad a pie no estaba siendo buena idea, estábamos todos ya muertos y apenas era la una de la tarde.
Decidimos comer en una hamburguesería que Ansu buscó en google y tenía buenas referencias. Tuvimos suerte de que nadie nos reconoció en ese lugar, por lo que nos decidimos por pedir y sentarnos a comer tranquilos para poder hablar y disfrutar el rato.
Cuando nos trajeron las hamburguesas, sin entender muy bien por qué, se me quitó todo el hambre de golpe, por lo que decidí comer dos simples patatas y dejar lo demás.

ESTÁS LEYENDO
Volver a ti
Romance¿En qué momento Claudia decidió mudarse a Barcelona persiguiendo su sueño? Es algo que ella aún se pregunta. A veces la vida tiene planes para nosotros que, nunca habríamos imaginado. Claudia Fernández es una chica de 21 años, nacida y criada en Sit...