Miércoles 23 de agosto.

186 9 1
                                    

Día 7. Pets (mascotas) / Free day (día libre)
Cualquiera de las mascotas de Tweek (Stripe o su ave) u otro contenido animal, por ejemplo: Tweek como gato o conejillo de indias.
“Escribe lo que quieras, enloquece”.

[…]

Una vez, en el tranquilo pueblo de South Park, había un grupo de amigos muy especial. Entre ellos se encontraba Tweek Tweak, un chico peculiar y enérgico, conocido por su inconfundible personalidad y su tierno aspecto de híbrido de liebre.

Tweek pertenecía a una familia de híbridos de liebre, quienes eran respetados y queridos por todos en el pueblo.

Sus amigos también eran híbridos de distintas especies animales.

Jimmy, con sus agudas orejas de gato y su espíritu valiente, era un compañero inseparable para Tweek.

Junto a ellos, estaba Token, un apuesto híbrido de cabra con cuernos majestuosos y una increíble fuerza interior.

Y, por último, se encontraba Clyde, un fornido y amistoso oso con una gran sonrisa.

Sin embargo, el amor platónico de Tweek era alguien muy especial.

Era Craig Tucker, un misterioso y solitario lobo que siempre mantenía una imagen seria y despreocupada.

Aunque la relación de Tweek y Craig parecía extraña a los ojos de los demás, en el peculiar pueblo de South Park estaban acostumbrados a la diversidad y tenían el derecho de adoptar animales de otras especies como mascotas.

Tweek tenía un colorido loro llamado Skippy, quien aprendía a hablar con una fluidez impresionante.

Por su parte, Craig tenía un adorable cuyito llamado Bonito Stripe IV, que se había convertido en su fiel compañero.

Ambos animales eran únicos dentro de su grupo de amigos y pasaban más tiempo juntos de lo que compartían con sus amigos humanos.

Los días pasaban entre risas y aventuras, pero Tweek y Craig encontraron algo especial en su relación.

Juntos, se embarcaban en largos paseos por el bosque, sus mascotas correteaban alegremente a su alrededor.

Durante esos paseos, los dos amigos se perdían en conversaciones profundas y sinceras, compartiendo sus sueños y temores más profundos.

Una tarde soleada, mientras disfrutaban de un paseo, el cielo se tiñó de tonos rosados y dorados. El ambiente parecía lleno de magia y romance.

Tweek, con su corazón lleno de valentía, decidió revelar sus verdaderos sentimientos a Craig. Con un tono nervioso pero sincero, le confesó su amor.

Craig, sorprendido, dejó escapar una tímida sonrisa y confesó que también sentía lo mismo hacia Tweek.

Era como si el destino los hubiera unido, dos seres únicos que encontraron el amor en medio de un mundo lleno de diversidad.

—¡Beso! ¡Beso! —canturreó el loro de Tweek haciendo sonrojar al rubio y al azabache.

—Yo no te enseñe a decir eso... —se quejó un avergonzado Tweek tratando de evadir la mirada del lobo a su lado.

—¿Y eso te molestaría? —le preguntó Craig en un suspiro que sonó más a un resoplido.

Ambos estaban avergonzados, sonrojados a más no poder, pero con unas inmensas ganas de besarse.

—No, pero yo...

Sin poder decir más, fue callado con un rose suave sobre sus labios, dejándolo en blanco por unos segundos, procesando lo que acababa de pasar.

—¿Twe... ?

Unos brazos rodeando su cuello mientras los labios que había tocado superficialmente, lo dejaron atontado. Este beso era más largo y menos tímido que el anterior.

Mierda, se estaba volviendo adicto al sabor de la boca del rubio, a sus labios suaves y esponjosos. ¡Joder, pero que bien besaba Tweek!

Queriendo profundizar más en la caricia, Craig se aferró a la cintura del híbrido de libre, apretandolo en un abrazo posesivo, queriendo comerle la boca hasta dejarlo sin aliento.

Los besos paraba unos segundos para respirar y después volvían a unirlos. Danzaban al compás de sus corazones desbocados latiendo con fuerza en sus cajas torácicas.

Sus respiraciones formaban parte de la caricia. Mordiendo los labios contrarios al separarse. Encajaban a la perfección.

—Me gustas mucho Tweek... —suspiró el azabache al separase del beso viendo cuan rojo se encontraba el rubio— Me encantas.

El rubio sonrió aún sonrojado y con los ojos cerrados, recargó su mentón en el hombro izquierdo del azabache, antes de contestarle.

—Tú también me gusta mucho, tanto... —susurró besando la mejilla izquierda de Craig— Me gustas demasiado.

Ambos se se aferraron al abrazo, sintiendo sus corazones cálidos y tintineantes ante la confesión y liberación de sus sentimientos sabiéndose correspondidos.

El loro de Tweek estaba sobre la cabeza del azabache halagando lo lindos que se veían y cuan gays eran en ese momento, haciéndolos reír.

Mientras que el cuyo de Craig estaba a los pies de Tweek, alternando su vista entre la pareja que se abrazaba como si fuera un momento efímero en sus vidas. Algo que podría desaparecer si salían de su burbuja romántica.

Desde aquel día, Tweek y Craig se convirtieron en una pareja inseparable.

Compartieron su jornada diaria junto a sus mascotas, quienes parecían entender y apoyar su amor. Skippy y Stripe IV se hicieron amigos inseparables, creando un vínculo tan fuerte como el de sus dueños.

El pueblo de South Park aceptó y celebró la relación de Tweek y Craig. Eran prueba viviente de que el amor no tenía barreras ni prejuicios.

Los amigos del grupo, Jimmy, Token y Clyde, también apoyaron a la pareja y los acompañaron en cada paso de su historia de amor.

Con el tiempo, Tweek y Craig encontraron en su amor verdadero, la fuerza para enfrentar cualquier obstáculo.

Juntos, superaron desafíos, crecieron como personas y se convirtieron en una historia de inspiración para todos en el pueblo.

Y así, entre risas y aventuras, Tweek y Craig vivieron felices para siempre. A lo largo de los años, su amor perduró y se fortaleció, mientras Skippy y Spripe IV los acompañaban en cada capítulo de su vida.

En aquel tranquilo y peculiar pueblo de South Park, esta historia de amor demostró que ser diferentes no era algo mal visto.

Por el contrario, era motivo de celebración y aceptación. Y en medio de esa diversidad, dos corazones encontraron su hogar y su felicidad eterna.

Fin.

.
.
.
.
.

Quise hacerlo con un final como de cuento de hadas/fantasía. Bueno solo colocando la palabra: “fin” me pareció que le daría ese toque fantasioso que tanto estuve buscando darle a este último día.

Espero que les haya gustado si es así déjenme saberlo en los comentarios.

Me gustó compartir estás ideas durante una semana celebrando a Tweek. Gracias a los/las que siguieron estos One shorts desde el primer capítulo.

Publicado el 23 de agosto 2023.
Editado el 8 de octubre 2023.

Tweek y Craig (One shorts Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora